A mediados de marzo, el movimiento Ansarolá de Yemen publicó una serie de documentos secretos y llamadas telefónicas pertenecientes al expresidente yemení Ali Abdalá Saleh.
Entre los documentos figuraban dos llamadas entre Saleh y el entonces director de la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos, George Tenet, realizadas en 2001.
En estas llamadas, Tenet presiona al presidente yemení para que libere a un hombre involucrado en los atentados con bomba contra el USS Cole en octubre de 2000, que dejaron 17 muertos y 37 heridos.
Lo más impactante es que el hombre es un miembro de alto rango de Al-Qaeda, mientras que los Estados Unidos han iniciado guerras sangrientas en Asia Occidental, su pretexto de luchar contra ese mismo grupo terrorista.