La unidad de drones de Yemen sigue lanzando ataques aéreos contra Arabia Saudí en represalia por los seis años de guerra que Riad y sus aliados le han impuesto.
Según varios informes, los aviones no tripulados (drones) yemeníes han causado gran temor entre los saudíes, pues pusieron al descubierto la vulnerabilidad de los sistemas antiaéreos del aliado de EE.UU.
El periódico estadounidense The Wall Street Journal (WSJ) aseveró en un artículo que Arabia Saudí se enfrenta a ataques aéreos más frecuentes y cada vez más precisos a medida que los grupos de la Resistencia en Yemen explotan brechas persistentes en los sistemas de defensa aérea del reino árabe y la Administración del presidente norteamericano, Joe Biden, reconsidera el enfoque de EE.UU. en la región.
Estos ataques de represalia ponen de relieve la creciente complejidad de los peligros que enfrenta el reino árabe, que comprenden no solo drones, sino también misiles balísticos y de crucero.
Aunque Arabia Saudí se ha esforzado en los últimos años por mejorar sus capacidades militares mediante compras millonarias de armas occidentales, funcionarios estadounidenses actuales y anteriores dicen que Riad aún tiene mucho trabajo por hacer para integrar mejor sus radares, baterías antimisiles Patriot y armas de defensa aérea de corto alcance en un sistema defensivo eficaz.
El uso de drones en la guerra de Yemen
Desde 2016, el movimiento popular yemení Ansarolá ha desplegado vehículos aéreos no tripulados (UAV, comúnmente llamados drones) de una manera cada vez más letal contra las fuerzas de la Coalición Árabe liderada por Arabia Saudí en Yemen y en el reino árabe.
Inicialmente, las fuerzas yemeníes estrellaron drones desarmados contra los sistemas de defensa antimisiles Patriot de la coalición saudí. Luego, lanzaron UAV con cargas explosivas de largo alcance.
En julio de 2019, el Ejército yemení mostró una colección de vehículos aéreos no tripulados, que afirmó haber sido fabricados en el país. Se han identificado ocho tipos de UAV fabricados por las tropas yemeníes: Hudhed-1, Raqib, Rased y Sammad-1, Qasef-1 y Qasef-2K, y Sammad- 2 y Sammad-3.
Tipos de drones yemeníes
Qasef 1:
El Qasef-1 es un UAV rudimentario de primera generación, empleado por las fuerzas yemeníes.
El Qasef-1 tiene un alcance máximo estimado de 200 km; cuando se opera desde la parte occidental del país (donde Ansarolá tiene el control), sus objetivos están, por lo tanto, restringidos a los que se encuentran en territorio yemení.
El uso más notable de estas cargas tuvo lugar el 10 de enero de 2019. Un UAV Qasef-1 detonó en el cielo, sobre una base de las fuerzas leales al expresidente fugitivo de Yemen, Abdu Rabu Mansur Hadi, durante un desfile militar, y provocó la muerte de seis personas.
Drones Sammad:
En un esfuerzo por expandir el alcance y el impacto de las capacidades de sus drones, a mediados de 2018, las fuerzas yemeníes comenzaron a desplegar un UAV nuevo y más avanzado, el Sammad.
Este dron tiene tres variantes, a saber, Sammad 1, 2 y 3. Además de su diseño distintivo, el Sammad presenta una ojiva más grande que el Qasef-1, y tiene un motor más potente, lo que le proporciona un alcance efectivo más largo.
El Samad-1 tiene una envergadura de aproximadamente 3,5 metros y un alcance de 500 km; está destinado para labores de vigilancia.
Mientras que el Samad-2 mide 2,8 metros de largo y tiene una envergadura de 4,5 metros. Tiene aletas traseras distintivas en forma de V. Este dron puede transportar una carga explosiva. La versión de reconocimiento lleva una cámara digital incorporada. La variante de ataque consiste en una ojiva de 18 kg de explosivos mezclados con rodamientos de bolas.
El Samad-3 tiene 4,5 m de envergadura, al igual que el Samad-2, un alcance de 1500 km y lleva una carga explosiva.
Hudhud-1:
Otro de los aviones teledirigidos que utilizan las topas yemeníes para responder a las violaciones de Arabia Saudí es el Hudhud-1.
Se caracterizado por su pequeño tamaño y una sección transversal de radar (RCS) pequeña, que es difícil de detectar, rastrear e interceptar, así como una radiación térmica menor, lo que reduce la probabilidad de ser detectado por misiles guiados por infrarrojos.
Este dron tiene una duración de vuelo de 90 minutos y un radio operativo de hasta 30 km. Tiene una envergadura de 1,9 metros y una longitud de casco de 1,5 metros.
El dron Raqib (Rival):
El dron Raqib puede volar hasta 15 kilómetros durante 90 minutos.
Equipado con un sistema basado en un láser para un monitoreo y seguimiento precisos, con múltiples técnicas de imagen, incluida la imagen térmica.
Rased:
Rased es otro dron yemení que puede realizar un amplio abanico de funciones, incluida la vigilancia aérea y la observación del campo de batalla; además de la prospección geofísica, tiene una envergadura de 2,2 metros y una longitud de casco de un metro.
El dron tiene una duración de vuelo de 120 minutos más un radio operativo de hasta 35 kilómetros.
El próximo escenario en la guerra
Mientras perdura el estancamiento de la guerra, las operaciones de los drones yemeníes sirven como un símbolo eficaz de desafío militar contra sus adversarios de la coalición que, tecnológicamente, son superiores.
El uso de vehículos aéreos no tripulados por Ansarolá ha cambiado el rumbo de la guerra hasta el punto de que Arabia Saudí no sabe si proteger sus propias ciudades o los últimos bastiones de sus aliados en Yemen de los ataques de las fuerzas yemeníes.
Dada la clara voluntad de los yemeníes a recurrir al uso de drones altamente efectivos como una herramienta de disuasión, se espera que el empleo de estos aviones teledirigidos persista.
Conforme a los expertos, la infiltración de drones yemeníes en las profundidades del territorio saudí indica un cambio en la ecuación en la guerra impuesta a Yemen. Aunque las fuerzas yemeníes han podido interceptar y destruir en repetidas ocasiones un gran número de drones saudíes en el suelo yemení, con un equipo de defensa mínimo, la coalición saudí, que posee el sistema de defensa aérea Patriot a un alto costo, no ha podido interceptar los ataques yemeníes.
Los acontecimientos relacionados con la guerra de Yemen parecen registrar una gran derrota para los países agresores y sus partidarios frente a la voluntad del pueblo y el heroísmo de los yemeníes contra la voluntad estadounidense-sionista, y han demostrado en voz alta su voluntad y su fe, más fuerte que cualquier arma moderna y avanzada.