El mandatario subrayó que la delegación no encontró elementos para criticar el sistema electoral.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció este domingo que los observadores de la Unión Europea (UE) que llegaron al país para supervisar los comicios regionales del pasado 21 de noviembre actuaron como «espías» para manchar el proceso electoral venezolano.
En particular, el mandatario señaló que la delegación de la UE estuvo integrada por «espías» que llegaron al país como «enemigos», buscando elementos «para tratar de manchar el proceso electoral impecable y democrático de Venezuela» y no encontró elementos para criticar el sistema electoral.
Maduro insisitió en que los miembros de la delegación de la UE «no eran observadores internacionales«, pues «andaban por el país desplegados, libremente, espiando la vida social, económica y política». En ese sentido, dijo que «jamás se había visto en 22 años» con otras delegaciones.
Por otro lado, el mandatario, que calificó el proceso de «impecable, victorioso y hermoso», celebró que el chavismo resultara victorioso en la gran mayoría de los cargos, al tiempo que recordó que opositores lograron ganar algunas plazas. «Las oposiciones han ocupado su espacio, han quedado con una buena cosecha de gobernaciones y alcaldías”, agregó.
El informe preliminar de la UE
En la presentación del «informe preliminar» sobre los comicios, la jefa de la Misión de Observación Electoral (MOE) de la Unión Europea (UE) en Venezuela, Isabel Santos, señaló este martes que pudieron constatar que la votación se desarrolló «en mejores condiciones en comparación con procesos electorales anteriores«.
Sin embargo, llamó la atención sobre algunas irregularidades, como la instalación de los llamados ‘puntos rojos’ cerca de centros de votación en todo el territorio venezolano, a pesar que existía una prohibición del CNE, así como el uso extendido de recursos del Estado para las campañas políticas, si bien el marco legal establece sanciones a ese tipo de prácticas.