La India hace su primera exportación a Rusia pagada en rupias

El presidente ruso Vladimir Putin (izq.) y el premier indio Narendra Modi en una rueda de prensa conjunta, Nueva Delhi, 5 de octubre de 2018. (Foto: AFP

La India y Rusia ponen a prueba el sistema de pagos que han gestionado para catapultar el comercio bilateral y evadir a la organización internacional SWIFT.

El nuevo sistema se ha instalado en las sedes del Banco de la Reserva de la India (RBI, por sus siglas en inglés) y en el banco estatal ruso VEB, para garantizar la transferencia fluida de los documentos de importación o exportación para las operaciones en rupias y rublos.

El mecanismo se aplicará mediante las cuentas vostros que permiten que un banco corresponsal extranjero actúe como agente o preste servicios como intermediario para que un banco nacional ejecute transferencias electrónicas, retiros y depósitos para clientes en países donde el banco nacional no tiene presencia física.

Por su parte, el director general de la Federación de Organizaciones Exportadoras Indias (FIEO), Ajay Sahai, anunció que el primer pago en rupias por un cargamento con destino a Rusia se llevará a cabo la semana que viene.

“Muchos problemas han sido solucionados. Exportadores e importadores han empezado a negociar con los bancos para abrir cuentas”, declaró citado por la agencia rusa de noticias RT.

 

Según las estadísticas, el volumen de los suministros de La India a Rusia fue de unos 1290 millones durante los cinco meses del año fiscal (entre abril y septiembre de 2022), mientras que las entregas rusas a La India alcanzaron unos 17 230 millones de dólares.

La India se ha convertido en el mayor cliente de petróleo de Rusia después de China luego de un boicot de compradores occidentales por el conflicto de Ucrania. Desde abril, las importaciones de crudo de India desde Rusia se han multiplicado por 50, cubriendo el 10 % de la demanda del país.

Occidente ha bloqueado a Rusia el acceso a los sistemas de liquidación en dólares y euros como parte de las sanciones sin precedentes impuestas por la operación militar rusa en Ucrania. Moscú asegura que tales medidas no podrán aislarle, sino que tendrán un efecto bumerán para los propios países occidentales.