Desde el Congreso de EE.UU. advierten al Pentágono de la cooperación misilística de Irán y China, alegando que los misiles iraníes son una amenaza para su país.
Los congresistas Elise Stefanik y Doug Lamborn, como dos miembros del la Comisión de Servicios Armados de la Cámara de Representantes de EE.UU., en una carta remitida al secretario del Departamento de Defensa (el Pentágono), Lloyd Austin, expresan preocupación por la cooperación entre la República Islámica de Irán y China en materia de misiles, exigiéndole medidas para lidiar con este asunto.
Al respecto, instaron al Pentágono a examinar si la apertura de la base de defensa antimisiles Fort Drum en el estado de Nueva York es apropiada para hacer frente a las posibles amenazas, esto mientras que hace unos años, la Agencia Antimisiles de Defensa de Estados Unidos llevó a cabo amplios estudios para establecer una nueva base antimisiles en la costa oriental de este país, y consideró adecuada la base de Fort Drum para tal tarea.
Los dos representantes republicanos denunciaron la transferencia de tecnología entre los “dos adversarios” de EE.UU. y exigieron más información sobre cómo esta asociación está mejorando las capacidades de los misiles iraníes.
Asimismo, solicitaron un análisis del Pentágono sobre cómo la arquitectura de defensa antimisiles de Estados Unidos está equipada para contrarrestar y disuadir las crecientes capacidades de misiles balísticos intercontinentales de Irán y subrayaron claramente la necesidad operativa de construir un tercer sitio de defensa antimisiles en Fort Drum.
“Con la asistencia técnica de la República Popular China, Irán continúa manteniendo la mayor fuerza de misiles en Asia Occidental, mientras que avanza en sus capacidades de lanzamiento espacial de doble uso y misiles balísticos intercontinentales (ICBM). Si no se controla, esta asociación permitirá aún más las capacidades nucleares e ICBM de Irán, mejorando su capacidad para mantener en riesgo la patria estadounidense”, alertaron.
Estados Unidos, al igual que algunos países occidentales, está tratando de impedir el desarrollo de misiles de Irán, y en ese sentido, el 16 de junio de este año, el Departamento del Tesoro de EE.UU. colocó en su lista de sanciones a una red de empresas en Irán, China y Hong Kong, bajo el pretexto de apoyar el programa de misiles de Irán.
El nuevo paquete de sanciones se anunció la misma jornada en que Irán presentó su primer misil supersónico de fabricación nacional, Fattah (Conquistador), capaz de evadir todas las defensas antimisiles, gracias a su alta velocidad, que supera 12 o 13 veces más la velocidad del sonido.
Irán asevera que sus misiles balísticos son armas convencionales y que su función es únicamente disuasoria y defensiva.