Benjamín Netanyahu citó pasajes de un libro sagrado en los que se incita a eliminar por completo, sin ningún tipo de consideración, a todo el pueblo palestino por ser enemigos de Israel. Esto lo puso en la mira de los defensores de DD. HH. y demuestra que el primer ministro israelí no tiene la intención de salvaguardar la población civil de Palestina, a pesar de que, supuestamente, el objetivo siempre ha sido el Hamás.