Los cubanos denuncian que el descontento de parte de la población por bloqueo, sea aprovechado por EE.UU. para generar disturbios en la mayor de las Antillas.
Cuba rechaza la desestabilización. En distintas localidades del país, los ciudadanos protagonizan manifestaciones ara repudiar la campaña mediática contra el Gobierno, que aseguran, busca provocar disturbios como los del pasado 11 de julio.
Por su parte, el presidente, Miguel Díaz-Canel, pide unidad. Su Gobierno reconoce que el país vive inconveniencias económicas, pero asegura que la culpa la tiene el bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos.
Aún así, La Habana anunció medidas para reducir en lo que se pueda el sufrimiento de sus habitantes. Entre ellos, autorizó la importación sin aranceles de comida, productos de aseo y medicamentos a los viajeros que lleguen a la isla.
Tras los incidentes del pasado domingo en Cuba, en todos los rincones de la Tierra, gobiernos, movimientos, organizaciones internacionales y representantes políticas han sumado voces para pedir el fin del embargo estadounidense contra La Habana.
En un comunicado, el Grupo de Puebla expresó su apoyo al gobierno cubano e invitó al presidente estadounidense Joe Biden a retomar la vía de la normalización de relaciones con la isla iniciada en la era de Administración de Barack Obama.