Alto índice de criminalidad preocupa a las autoridades del orden público y la comunidad que radica en Los Ángeles. Todos los días surgen nuevos casos delincuenciales.
Las principales calles de Los Ángeles se han convertido en áreas de alta peligrosidad a cualquier hora del día se están cometiendo delitos graves y autoridades ya no pueden ocultar los altos índices de delincuencia que se ha estado generando últimamente. En redes sociales circulas los vídeos de seguridad de comercios que son atracados por presuntos delincuentes que llevan mazos y están armados, entran en grupos encapuchados, rompen vidrieras para robarse joyas o artículos de comercialización. La proliferación de pandillas, las armas y narcóticos abundan. En el valle del Antílope desmantelaron una conexión de carteles, han incautado toneladas de drogas que su destino era venderlas en las calles.
En las ciudades grandes como Los Ángeles, muchos inocentes han muerto por balas perdidas. Los grupos delictivos toman las calles como campos de batalla. Las organizaciones pro derechos humanos hacen plantones y piden a las autoridades condenas más duras a delincuentes. Casos como el de Norma Ramírez que desconocidos asesinaron a su hijo y no ha tenido respuestas de la investigación.
Las autoridades policiales reconocen que grupos delictivos proliferan en grandes ciudades y muchos operan desde el extranjero.
Por ahora las corporaciones de seguridad piden a las víctimas de delitos denunciar, sin embargo, muchos no lo hacen por temor a represalias.
Rosie Orbach, Los Ángeles.