Durante los últimos ocho años Kirovsk, en el Donbas, ha soportado el incesante bombardeo de las fuerzas ucranianias y ahora sigue siendo escenario de guerra.
Una escuela pública de la ciudad minera de Kirovsk, en Lugansk occidental, recibe ayuda humanitaria proveniente de Rusia. En esta región la guerra comenzó en 2014, y no se ha detenido hasta ese momento.
“Desde 2014, las escuelas, los jardines de infancia, la piscina de la ciudad han sido bombardeadas. Ucrania nos ha cortado el agua por completo. Nos quedamos un año y medio en la ciudad de Kirovsk. Simplemente no había agua. Todos estos años, el bombardeo se ha llevado a cabo precisamente en las áreas habitables”, relata Victoria Sergeevna, alacaldesa Kirovsk.
Un misil ucraniano cayó sin explotar en una casa que se ve en el informe elaborado por el corresponsal de HispanTV, Alejandro Kirk. Es del mismo tipo que en abril destruyó un edificio residencial en Donetsk.
Tras ocho años de defenderse de los ataques ucranianos, esta vez las milicias populares están a la ofensiva, recuperando el territorio completo de la antigua provincia, hoy República independiente de Lugansk.
Menos de 30 000 personas habitan esta ciudad minera. Las avenidas, generosas, y los edificios de la era soviética delatan un proyecto mucho mayor.
Alejandro Kirk, Kirovsk, República Popular de Lugansk.