La acción despechada de los fracasados que no pudieron dar el golpe ni invadir venezuela

Venezuela ha denunciado reiteradamente el incumplimiento del Convenio de Viena, que establece la obligación de los Estados de resguardar las instalaciones y los activos de los países que se usan para fines diplomáticos aunque se rompan las relaciones.

https://actualidad.rt.com/actualidad/314993-policia-entra-embajada-venezuela-washington

 

Entrega histórica de archivos sobre el Plan Cóndor y la operación ‘Teseo’ a Argentina

 

Europa occidental quiso imitar al “Plan Cóndor”

Miembros de los servicios de inteligencia de Alemania Occidental, Francia y el Reino Unido visitaron los del “Plan Cóndor” en Buenos Aires, en septiembre de 1977. Querían crear una organización antisubversión similar.

El Gobierno de EE.UU. entregó este viernes (12.04.2019) al ministro argentino de Justicia, Germán Garavano, 47.000 páginas de documentos desclasificados sobre la “guerra sucia” de la última dictadura argentina (1976-1983), lo que arroja luz sobre una de las páginas más oscuras de la historia del país.

Miembros de ONG como Archivo Nacional de Seguridad, dedicada a estudiar actas históricas, o el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) han examinado los nuevos documentos, archivos desconocidos de la CIA, el FBI y otras agencias estadounidenses de seguridad e inteligencia.

Sus analistas han descubierto o confirmado atrocidades, que no solo podrían ayudar a continuar buscando justicia contra las violaciones de derechos humanos, sino también arrojando luz sobre historias hasta hoy ocultas, dentro y fuera del continente:

1. Un plan para exterminar a los izquierdistas en el extranjero

Los jefes de la policía secreta de las seis dictaduras del Cono Sur de América (Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay) se reunieron en secreto en mayo de 1976 en Santiago de Chile para crear una “nueva unidad” destinada a exterminar a los izquierdistas en Europa y otros países de Latinoamérica.

Esa nueva unidad fue bautizada como “Teseo”, en referencia a Theseus, el rey griego que mató a puñetazos al Minotauro, según recoge un documento de la CIA desclasificado el viernes.

La unidad “Teseo” se creó bajo el paraguas del conocido como “Plan Cóndor”, una operación impulsada por los servicios de Inteligencia de las dictaduras del Cono Sur para secuestrar, torturar y exterminar a sus opositores con el conocimiento de Estados Unidos.

2. Asesinatos en el extranjero por 3.500 dólares cada 10 días

La CIA tuvo acceso a un acuerdo que firmaron en 1976 los países del “Plan Cóndor” para establecer cómo debía financiarse la unidad “Teseo”, que estuvo basada en Argentina.

El texto obtenido por la CIA, titulado “acuerdo de los países Cóndor en relación con la regulación de sus operaciones contra objetivos subversivos”, establecía que cada dictadura debía desembolsar 10.000 dólares para costes operativos y, además, tenía que pagar una cuota de 200 dólares “antes del 30 de cada mes”.

Según el acuerdo, los agentes asignados a misiones de asesinatos en el extranjero necesitaban unos 3.500 dólares cada diez días y se les ofrecía 1.000 dólares para comprar ropa en su primera operación.

3. Europa se interesó por el “Plan Cóndor” y quiso imitarlo

Los servicios de Inteligencia de Francia, el Reino Unido y la República Federal de Alemania (RFA) visitaron Argentina para conversar sobre “métodos para el establecimiento de una organización antisubversiva similar a “Cóndor”, según un cable de la CIA fechado el 7 de abril de 1978.

La CIA recogió que la inteligencia de esas tres naciones pensaba que “la amenaza subversiva había alcanzado unos niveles tan peligrosos en Europa”que era necesario “unir sus recursos de inteligencia con una organización cooperativa como “Cóndor” para hacer frente a ese supuesto peligro.

El cable de la CIA no explica cuál terminó siendo la relación entre las Inteligencias de Francia, el Reino Unido y la RFA con las dictaduras del Cono Sur.

4. El embajador argentino en Venezuela fue secuestrado por dinero

Los nuevos documentos revelan que el embajador de Argentina en Venezuela Héctor Hidalgo Solá fue secuestrado y asesinado en julio de 1977, por agentes de la extinta Secretaría de Inteligencia del Estado argentino (SIDE), que actuaron por su cuenta y sin el consentimiento de la Presidencia.

Los agentes raptaron a Hidalgo Solá con el “único objetivo de pedir dinero a su familia” y, cuando empezó una investigación interna para saber qué había ocurrido, los miembros del SIDE tuvieron “miedo de ser descubiertos” y lo mataron para encubrir el crimen, detalla otro documento de la CIA.

La familia de Hidalgo Solá no sabía lo que le había ocurrido hasta hoy. Su nieta acudió al acto en el que el ministro argentino de Justicia recibió los documentos desclasificados.

5. La CIA temía que los asesinatos la involucraran

El liderazgo de la CIA sabía que los países del “Plan Cóndor” tenían planes de asesinar a los integrantes de la Junta de Coordinación Revolucionaria (JCR), una organización que Washington considerada “un paraguas” para los movimientos latinoamericanos de izquierda con sedes en París, Lisboa y otras urbes europeas.

A la CIA le preocupaba que ese tipo de operaciones acabaran siendo un inconveniente y tuvieran “ramificaciones políticas adversas” para la propia agencia por su apoyo al “Plan Cóndor”.

“Hay que tomar todas las precauciones (…) para asegurarnos de que la agencia no sea acusada por error de ser parte de este tipo de actividad”, aseveró en un memorándum Raymond A. Warren, el que fuera jefe de Latinoamérica dentro de la CIA entre julio y agosto de 1976.

 

España, festín del cártel: cazadas 60 tramas de 400 empresas y medio Ibex para subir precios

 

DINERO FRESCO
Actualizado 

Competencia destapa una escalofriante proliferación de pactos ilícitos empresariales contra el Estado y el consumidor antes, durante y tras la crisis

José María Marín Quemada, presidente de la Comisión Nacional de...
José María Marín Quemada, presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). DAVID S. BUSTAMANTE

Como suele suceder con los temas más delicados, ni el Gobierno ni los partidos -Podemos incluido- han reaccionado a la espeluznante resolución del pasado miércoles de la Comisión Nacional de Mercados y de la Competencia (CNMC) que sanciona a una quincena de multinacionales y grandes empresas del país por amañar 275 concursos públicos de infraestructura ferroviaria durante 14 años imponiendo al Estado un sobreprecio superior al 20{14c88425e8fe9d97faae8feb4c9704a1f54f6c24ede33d0414f3cb3e373d26ea}. Los accionistas ni se inmutan, porque los 118 millones de sanción, aunque constituyen la segunda multa más alta en España a un cártel, queda por debajo del presunto beneficio obtenido, así que el presidente de la CNMC, José María Marín, amplía el castigo y ha pedido, por primera vez, a Hacienda que les prohiba concursar. Eso es peor, pero el Ministerio guarda por ahora silencio y tampoco se ha oído al ministro José Luis Ábalosencargar una investigación a Adif por si eran cómplices del cártel.

Todo apunta a que el caso desaparecerá en el sumidero de la campaña electoral, pero se une ya a la estremecedora hoja excel a la que ha tenido acceso este diario en la que los funcionarios de la CNMC recopilan los expedientes concluidos con sanción por amaño de concursos públicos o pactos de precios contra los consumidores. Suman ya más de 60 los cárteles o tramas desmanteladas desde la creación de este organismo en 2013, sin contar casos individuales. Este documento de uso interno dibuja España como un festín para los cárteles en que han participado ya al menos 400 empresas multinacionales y españolas de todo tamaño y sector, incluidas, por ahora, la mitad de las que cotizan en el Ibex 35.

«Mires donde mires aparece un cártel desde hace años», lamenta uno de los jefes de la CNMC.

Extracto de la resolución sancionadora de la CNMC con muestras de correos internos incautados de Indra y Software AG (SAG) que apuntan a cómplices en la Agencia Tributaria para conseguir concursos públicos en este organismo oficial

Impresiona por ejemplo lo que pasaba en 2013. César AliertaEmilio BotínFlorentino PérezAntonio Brufau y otros miembros del selecto Consejo Empresarial para la Competitividad reclamaban con razón modernizar el país y reducir el déficit para salir de la recesión. Lo malo es que, al mismo tiempo, departamentos de sus propias empresas y filiales estaban participando o incluso encabezando cárteles para imponer sobreprecios al Estado o a empresas y consumidores, según la CNMC.

Por ejemplo, en ese mismo año, directivos de varias filiales de ACS se reunían en secreto con competidores de OHL o Sacyr para «manipular» concursos de Adif, según el citado expediente S/DC/0598/2016.

También durante una década, los responsables del área de derivados financieros de CaixaBank, BBVA, Santander y Sabadell se confabulaban para engañar a, entre otras, las empresas de energías renovables y cobrarles altos tipos de interés si querían proteger su deuda de bandazos del mercado. Es el caso S/DC/0579/16 e incluye grabaciones de los financieros riéndose de sus clientes que la CNMC no publica para evitar «generar alarma social», según el propio presidente.

Expedientes como el S/0484/13 de Repsol o el S/0490/13 de Telefónica muestran de lo que son capaces antiguos monopolios para obstaculizar la competencia.

Y qué decir de los cómplices en la Administración. Dónde más pruebas ha encontrado la CNMC es en el cártel de licitaciones informáticas (S/DC/0565/15) desmantelado el pasado agosto y en el que IBM o Indra (presidida entonces por Javier Monzón), entre otras, amañaban los contratos públicos desde el mismo embrión del concurso. «En el pliego han puesto exactamente los modelos que nosotros les enviamos», escribía alborozado un directivo de Indra en un correo (ver documento adjunto) sobre la Agencia Tributaria. «En la Gerencia de Informática de la Seguridad Social quieren que les ayudemos a hacer los pliegos», se afirma en otro.

Todo esto es insoportable y debe ser erradicado. Por la hoja excel de la CNMC desfilan desde empresas sin escrúpulos que encarecían los pañales para ancianos a patronales, colegios de abogados, las estatales Correos y Renfe… Incluso multaron a CCOO y UGT en el cártel de la estiba en el Puerto de Vigo.

Ahora hay casos pendientes como un presunto «grupo estable y formal» formado por ¡Acciona, ACS, FCC, Ferrovial, OHL, Sacyr e Isolux! para repartirse obras públicas en todo el país; u otro de consultoras como Deloitte o PwC.

Por si fuera poco, muchas tramas reciben multas irrisorias o se salvan en tribunales por error formal, pero prolifera lo que resume un incautado correo entre socios -y teóricos rivales- de proveedores de Adif: «No tiene mucho sentido presentar dos ofertas al concurso». Una y listo.

Conozca los escándalos de Indra, la empresa encargada del conteo electrónico en las próximas elecciones