China arremete contra EEUU por actos de “terrorismo tecnológico”

Empleados trabajan en una línea de producción de chips en el condado de Huanan, China

China acusa a EE.UU. de incurrir en actos de “terrorismo tecnológico” tras las presiones de Washington a otros países para impedir que Pekín fabrique chips.

Después de la escasez mundial de chips registrada en los últimos años que ha hecho todo tipo de estragos, China aspira a convertirse en líder mundial de la industria de los semiconductores, pero según un informe del portal estadounidense Bloomberg, Estados Unidos trata de utilizar su poder e influencia para frustrar los planes del gigante asiático.

En este sentido, Washington está “presionando” a los Países Bajos y Japón para que impidan que sus compañías vendan a empresas chinas productos claves para la producción de chips.

“Este es otro ejemplo más de la práctica estadounidense de diplomacia coercitiva al abusar del poder estatal y ejercer la hegemonía tecnológica. Es terrorismo tecnológico clásico”, condenó el miércoles el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Zhao Lijian, en una ruda de prensa al ser preguntado sobre el asunto.

 

El vocero chino criticó el enfoque adoptado por Washington al buscar repetidamente politizar, convertir en armas e ideologizar las cuestiones económicas y comerciales y ejercer el bloqueo tecnológico contra otros países.

Sin embargo, Zhao señaló que esto “solo servirá para recordar a todos los países los riesgos de la dependencia tecnológica de Estados Unidos y los impulsará a volverse independientes y autosuficientes a un ritmo más rápido”.

“Aquellos que buscan bloquear el camino de los demás solo terminarán bloqueando su propio camino”, advirtió a Washington.

Además, el portavoz de la Cancillería china instó a los países involucrados a “adoptar una postura objetiva e imparcial sobre este asunto” y tomar “decisiones independientes basadas en sus propios intereses a largo plazo y los principios de equidad y justicia del mercado”.

Brasil, en riesgo de disturbios mayores que el asalto al Congreso de EEUU.

El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, ofrece un discurso en Río de Janeiro, Brasil, 2 de julio de 2022. (Foto: Getty Images)

La máxima autoridad electoral de Brasil advierte que el país corre el riesgo de enfrentar un incidente más grave que el asalto al Capitolio de EE.UU. en enero de 2021.

El próximo 2 de octubre, se celebrarán las elecciones presidenciales en Brasil, y según indican los resultados de las encuestas, el expresidente izquierdista Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010) lidera las intenciones de voto frente al actual mandatario, Jair Bolsonro, quien busca ser reelegido.

Entretanto, Edson Fachin, presidente del Tribunal Superior Electoral de Brasil, advirtió el miércoles que el país podría ver disturbios postelectorales peores que los que ocurrieron en 6 de enero de 2021 en el Capitolio de Estados Unidos, cuando los partidarios de Donald Trump, quien perdió las presidenciales, atacaron el Congreso estadounidense, en un intento sin éxito por anular su derrota en las elecciones.

“Podríamos experimentar un episodio aún más severo que el [asalto del] 6 de enero en el Capitolio”, dijo el magistrado durante un evento realizado por el Wilson Center en Washington, D.C. (Estados Unidos).

Ante tal situación, llamó a la sociedad civil y a las instituciones del país a apoyar a las autoridades electorales cuando declaren los resultados de las elecciones de octubre.

 

Además, dejó claro que no aceptará ninguna injerencia en el proceso electoral, enfatizando que “el poder judicial de Brasil no se inclinará ante nadie”.

Sus comentarios se producen mientras Bolsonaro ha cuestionado una y otra vez la confiablidad del sistema de votación electrónica de Brasil, llegando incluso a amenazar con rechazar un resultado desfavorable en las elecciones.

Lula Da Silva, de 70 años, sigue siendo una figura poderosa en Brasil, y es favorito para ganar los comicios con una distancia de 14 % frente a Bolsonaro, según indican los resultados de una encuesta realizada por la firma Genial/Quaest, publicada el miércoles.

Mientras tanto, Bolsonaro está en el ojo del huracán de críticas por la mala gestión de la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, y la posterior crisis económica en el país suramericano. Además, el presidente está involucrado en casos de corrupción, razones por las cuales su popularidad se encuentra golpeada y varios sectores y diferentes partidos del gigante latinoamericano piden que se emprenda un proceso de destitución (impeachment) en su contra.

Denunciado por explotación laboral el hostelero que ofrecía sueldo neto de 1.400 euros, alojamiento y comida en Lugo

El sindicato CCOO presenta una denuncia ante la Inspección de Trabajo contra el grupo gallego que realizó una atractiva oferta laboral antes del verano para poder reforzar su plantilla por no permitir las libranzas durante la campaña estival a los camareros y camareras, entre otras presuntas irregularidades. 

Una camarera sostiene una bandeja en la plaza Real de Barcelona, a 15 de junio de 2022, en Barcelona, Catalunya (España). Los empresarios del turismo y la hostelería han reiterado la ausencia de trabajadores en su sector
Una camarera sostiene una bandeja en la plaza Real de Barcelona, el pasado 15 de junio de 2022, en Barcelona.  David Zorraquino / EUROPA PRESS

Ayuso pagó 600.000 euros en un contrato sanitario en plena pandemia y no hay rastro de su ejecución

El Gobierno de la Comunidad de Madrid adjudicó a una empresa la instalación de sistemas de conteo para limitar los aforos en centros de salud, pero nunca especificó en cuáles y dos años después no hay pruebas de que hayan sido instalados.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante su intervención en la presentación de Hispanidad 2022, evento organizado por la Oficina del Español, este miércoles en la Real Casa de Correos, sede del Gobierno regional.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante su intervención en la presentación de Hispanidad 2022.  EFE/Emilio Naranjo

La Base #87 – Violencia política contra el ministerio de Igualdad

Pablo Iglesias, Sara Serrano, Manu Levin e Inna Afinogenova analizan el último episodio de violencia política y mediática contra Irene Montero y el ministerio de Igualdad a raíz de su viaje oficial a EE.UU. Con entrevista a Isa Serra, con la participación de las periodistas Anita Botwin y Gara Santana y con la colaboración de Gema MJ.

00:00 Inicio del programa

00:44 Editorial de Pablo Iglesias

3:37 Presentación

5:47 ‘La Base de Datos’ de Sara Serrano: ¿cuál fue la agenda del equipo del Ministerio de Igualdad en Nueva York?

17:30 ‘Titulares al banquillo’ de Manu Levin: cómo los medios presentaron un viaje laboral como turístico

36:01 ‘Pa´qué me invitan’ de Inna Afinogenova: sobre la prohibición del derecho a aborto en EE.UU. y las políticas abortistas en América Latina

46:01 Entrevista a Isa Serra, portavoz de Podemos, que formó parte de la comitiva del Ministerio de Igualdad en EE.UU.

51:12 Isa Serra: “Esta campaña tiene como objetivo es impedir que hagamos política con violencia política”.

55:57 Gara Santana:”Con Irene Montero se traspasan todos los límites”

58:20 Anita Botwin: “Ocurre porque esas mujeres están ocupando espacios que antes eran de los señoros acorbatados”

Un estudio de la Universidad de Oxford relaciona el aumento de la mortalidad con la privatización de la sanidad pública

Según los investigadores, la reducción de costes por parte de proveedores con ánimo de lucro ofrece un mayor número de servicios pero de peor calidad.

Un hombre, con una camisera que reza 'Sanidad pública de todos para todos' y 'Más sanitarios, muy necesarios', se manifiestan desde el Ministerio de Sanidad hasta la Puerta del Sol para apoyar la Atención Primaria, a 27 de marzo de 2022, en Madrid (España
Manifestación desde el Ministerio de Sanidad hasta la Puerta del Sol para apoyar la Atención Primaria. 

La subcontratación de entidades privadas para la gestión de los sistemas sanitarios públicos se relaciona con tasas significativamente mayores de mortalidad, como resultado «muy probablemente» de una disminución en la calidad de los servicios de atención de la salud. Así lo determina un estudio elaborado por investigadores de la Universidad de Oxford y publicado el pasado viernes en la prestigiosa revista The Lancet Public Health.

El informe, que analiza el impacto de la privatización de estos servicios en 173 áreas sanitarias de Inglaterra entre 2013 y 2020, relaciona las externalizaciones con un «empeoramiento de la asistencia sanitaria». «Las tasas de mortalidad tratable se han estancado desde 2013, rompiendo una tendencia a la baja durante los diez años anteriores», detalla el trabajo.

Los hospitales privados suelen derivar a los públicos a los pacientes con enfermedades más complejas

¿Por qué la subcontratación con fines de lucro podría estar relacionada con la mortalidad tratable agregada?, se preguntan los investigadores de Oxford. Una teoría es que la reducción de costes por parte de proveedores con fines de lucro ofrece un mayor número de servicios pero de peor calidad.

Tras la crisis de 2008, muchos gobiernos optaron por disminuir la inversión en los servicios públicos para ahorrar costes y reducir el endeudamiento público. Unas políticas de austeridad que no sólo no pusieron fin a la gran recesión económica sino que, además, empobrecieron todavía más a una población acusada por el paro y los créditos de la burbuja inmobiliaria.

Otra dinámica clave que señala el trabajo es la coyuntura que a menudo se observa en la relación entre los proveedores de las empresas privadas y los públicos. Los centros privados suelen atender los casos de pacientes con mejor pronóstico, pero se desentienden de aquellos que padecen enfermedades más complejas. Estos últimos son derivados a proveedores públicos, que no tienen personal adicional ni fondos para compensar y se ven desbordados.

Las políticas de austeridad han empeorado los servicios públicos

La necesidad de dar mayor peso al sector privado en la sanidad pública en busca de mejoras en la gestión y eficiencia fue uno de los argumentos más utilizados por los gobiernos a la hora de aprobar unas medidas que han generado una contundente desaprobación social. Quienes se oponen, rechazan que uno de los pilares del estado del bienestar se ponga en manos de «entidades con afán de lucro» que pueden priorizar otros objetivos por encima de la calidad de la salud de la población.

Los aumentos en las listas de espera y la disminución de la satisfacción del paciente sugieren que el sistema sanitario no está manteniendo los estándares de atención, según el estudio. Este contexto dificulta —inevitablemente— un diagnóstico temprano y una buena atención posterior, algo que en enfermedades como el cáncer es fundamental para salvar vidas.

Los autores analizan los resultados obtenidos por pacientes reales en las áreas con más servicios privatizados y los comparan con los logrados en aquellas donde apenas hay servicios sanitarios en manos privadas.

En España, catorce comunidades tienen servicios sanitarios «regulares» o «deficientes»

«El estudio es importante porque confirma lo que otros estudios parciales habían avanzado y lo que hemos podido observar en la evolución del sistema sanitario en los últimos años. Los recursos económicos destinados a las privatizaciones debilitan la sanidad pública y favorecen otros intereses. Lo deseable sería reinvertirlos en el sistema para hacerlo más fuerte y eficaz», explica el portavoz de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), Marciano Sánchez Bayle.

La relación entre un aumento de la mortalidad y la privatización de servicios públicos no es ninguna novedad. De hecho, es algo que ha ocurrido en otros países, como cuando las tasas de mortalidad aumentaron en Italia después de un período de privatización, detalla el informe.

La gestión de la pandemia en España puede ser un buen ejemplo. La mortalidad en las residencias con servicio externalizado fue de un 21,9% en los meses de marzo y abril de 2020, frente al 7,4% de las de gestión totalmente pública. Según el informe anual de la FADPS, la calidad del sistema sanitario es deficiente o regular en 14 de las 17 comunidades autónomas. Solo tres obtienen resultados aceptables, las otras catorce tienen servicios sanitarios «regulares» o «deficientes».

La contundente respuesta de Yolanda Díaz a Margarita Robles por el gasto militar

Imagen combinada de Yolanda Díaz y Margarita Robles. — Mariscal / A.Ortega / EFE / EUROPA PRESS

Margarita Robles ha vuelto a cargar contra su socio de Gobierno, Unidas Podemos (UP). En esta ocasión por las intenciones del ala socialista de incrementar el gasto militar. La ministra de Defensa ha apelado a las tensiones en el grupo confederal, pero parece que le ha salido «el tiro por la culata» tras el cierre de filas de Yolanda Díaz con Ione Belarra en este asunto después de la contundente respuesta de la ministra de Trabajo.

Robles, tras la oposición de Belarra a subir el presupuesto militar, le respondió:  «Pregunte a Yolanda Díaz si no quiere que se hagan fragatas en Ferrol». A lo que Díaz ha contestado con visible enfado: «El acuerdo para aprobar 1.000 millones de euros más para Defensa nada tiene que ver lamentablemente con la carga de trabajo de mi comarca, de Ferrol».

La líder de UP ha apelado a Robles y le ha recordado que «las formas en política son muy importantes; en materias de tanta sensibilidad (las decisiones) deben tomarse con respeto a los aliados y a las Cortes Generales, estos debates deben hacerse de manera prudente y serena».

 

Sánchez trata de revertir la crisis de la sanidad pública con el freno a la temporalidad y a las privatizaciones

El Consejo de Ministros de este martes el Gobierno aprobará una ley para hacer fijos a 67.000 sanitarios que actualmente tienen contratos temporales. Esta medida se suma al anuncio de la ley de equidad sanitaria, que pretende restringir las privatizaciones del sector sanitario, aunque desde Podemos han mostrado su disconformidad.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, interviene en una sesión plenaria, en el Congreso de los Diputados, a 30 de marzo de 2022, en Madrid (España).
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, interviene en una sesión plenaria, en el Congreso de los Diputados, a 30 de marzo de 2022, en Madrid (España).  EUROPA PRESS

El deteriorio generalizado de la sanidad pública, que languidece por toda España, ha puesto al Gobierno de Pedro Sánchez a la busca de proyectos para revertir el panorama: las privatizaciones, la temporalidad de sus sanitarios y la falta de personal para hacer frente a la demanda de pacientes. Hay estudios que aseguran que la precariedad en la sanidad pública y la desigualdad entre comunidades autónomas es un peligro no solo para los pacientes, sino para la propia cohesión nacional.

Que las competencias en torno a la sanidad estén derivadas a las comunidades autónomas hacen difícil trazar un plan común para todos. Sin embargo, este fin de semana, el presidente anunciaba en el diario El País que se trabaja en una ley por la que se harán fijos a 67.000 sanitarios en toda España y que un trabajador de la sanidad no podrá encadenar más de tres años de contratos temporales. Sin embargo, esta norma desarrollada por el Ministerio de Sanidad no es más que una continuación de una reforma anunciada en julio de 2021 por el Ministerio de Política Territorial y Función Pública, pero que se ha recuperado ahora para el debate público en un momento en el que la sanidad pública de varias comunidades está saturadacomo es el caso de Madrid.

Humberto Muñoz, secretario general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO (FSS-CCOO), ve en el anuncio una jugada promocional: «La medida es un mandato de la ley 20/2021 para la reducción de la temporalidad en el conjunto de los sectores públicos en España, todo ello para cumplir la sentencia del TJUE sobre el abuso de la temporalidad en nuestro país y para poder recibir los fondos europeos comprometidos. Es decir, lo que anunciaba el presidente del gobierno no es nada nuevo. Estos 67.300 sanitarios ya están en plantilla».

Los contratos temporales fueron el recurso que aprovecharon los gobiernos autonómicos a hacer frente a la crisis de la covid-19. Cuando los hospitales estaban saturados por la cantidad de personas ingresadas, las comunidades ampliaron sus plantillas con interinos. La mayoría, a partir de diciembre de 2021, fueron de nuevo despedidos, pese a que sindicatos y asociaciones defendían su contratación indefinida para aumentar el grueso de empleados en la sanidad pública, esquilmada de profesionales por las pocas plazas MIR que se convocan y por la huída de los sanitarios, que se decantan por la privada o por otros países ante las condiciones que se ofrecen en España.

Desde los sindicatos apuntan a que una necesidad real que tiene España pasa por la contratación de al menos 60.000 médicos, sin contar técnicos y personal administrativo. «Hay que incrementar el presupuesto sanitario hasta al menos el 7,5% del PIB e incrementar el gasto sanitario por habitante hasta al menos 2.000 euros por habitante», arguyen desde CCOO como medidas realmente efectivas.

Las privatizaciones que los gobiernos autonómicos ejecutan son otro de los grandes problemas para la sanidad pública. En torno a esto, el Gobierno también ha dado pasos, aunque algo tímidos, para proteger el sistema público de salud. Se refuerza la sanidad, pero deja abierta la puerta a más privatizaciones. Cada vez es mayor el porcentaje que las comunidades reinvierten en acuerdos con entidades privadas. Catalunya y Madrid, a la cabeza de la lista.

Problemas estructurales en la Sanidad

Ni una pandemia ha servido para que los gobiernos autonómicos tengan entre sus prioridades el blindaje de la sanidad pública. La media nacional de inversión en la Atención Primaria es de un escaso 14.93% del total anual que se deriva a la sanidad. El dato es prácticamente similar al de 2019, 14.16%, año previo a la pandemia. El dato, que ya de por sí es escaso, ha descendido durante estos años en las comunidades en las que gobierna el Partido Popular.

Recientemente, un estudio de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADPS) en el que se analiza el estado de la sanidad pública de cada comunidad autónoma lanzaba datos demoledores: solo tres (Euskadi, Navarra y Asturias) obtienen resultados aceptables. Las otras catorce autonomías tienen servicios sanitarios «regulares» o «deficientes». En el caso de Catalunya, Murcia y Canarias, se las cataloga como los «peores servicios» de España.

Una vez más, las comunidades gobernadas por el Partido Popular están a la cola en otro listado: el de inversión de euros por paciente. Madrid (1.300 euros), Andalucía (1.388 euros) y Murcia (1.433 euros) son las que menos invierten ya que la media está ubicada en 1.679 euros.

Las listas de espera para operaciones también dejan datos preocupantes. En el mejor de los casos, que es Euskadi, hay que esperar 40 días para una consulta con un especialista. En el peor, Aragón, donde la demora alcanza los 160 días. La media nacional se ubica entre 50 y 70 días.

En cuanto al ratio de camas hospitalarias por cada 1.000 habitantes, el PP vuelve a quedar en la picota. En Andalucía apenas da una media de dos mientras que en Catalunya hay casi el doble.

Además de falta de presupuesto, España sufre de forma acuciante la falta de personal de enfermería. A la luz de los datos de la propia OMS, Suiza tiene 18,2 profesionales en plantilla por cada 1.000 habitantes y España tiene 5,3. Naciones como Uzbekistán, Eslovenia, Montenegro o Polonia también tienen una media superior a la española.

Y ante esto, ni el Gobierno de Sánchez ni el resto de partidos hacen por solventarlo. La ley de seguridad del paciente, pensada para mejorar el actual ratio en enfermería, lleva más de dos años estancada sin que ningún partido mueva ficha. Los enfermeros en hospitales tendrían asignado un máximo de seis pacientes por cada profesional, pero nadie ha movido ficha.

EEUU: Pobreza, miseria, marginación

Por Cecilia Remis. LQSomos.

Nos cuesta cuestionar el capitalismo, pues motivos no faltan. El gran imperio armado es un ejemplo de ello.
Si aparecen imágenes crudas de pobreza en Venezuela, por ejemplo, rápidamente los medios de (des)información las usan como argumento para cuestionar todo el sistema venezolano.
Si aparecen imágenes crudas de pobreza en Estados Unidos, en cambio, lo asumen como claroscuros inevitables de un sistema incuestionable.

Es un margen de pobreza «estructural», nos dicen. Es inevitable en cualquier sistema, nos dicen.
Ni la pobreza extrema, ni la corrupción galopante, ni el racismo, ni la desigualdad desorbitada… Nada parece ser motivo suficiente para cuestionar el sistema capitalista.

Estados Unidos, uno de los países más ricos del mundo, en base al PIB per cápita sería el quinto (1), combina ese dato, siempre deslumbrante como escaparate, con algunos de los peores índices de pobreza entre las naciones ricas.

En San Francisco estrenan cubos de basura, para la vía pública, diseñados para evitar que las personas sin recursos puedan buscar comida u objetos para reciclar y vender… La crueldad del capitalismo no tiene límites

El país que aterrizó en la Luna o dio luz a internet, es incapaz de reducir sus tasas de pobreza. Dentro del mismo estado americano hay dos naciones, resumiendo, una de ellas es de excluidos totales. Más de 55 millones de estadounidenses viven debajo del umbral oficial de la pobreza.

EEUU no tiene una red firme de protección social o de un sistema de apoyo a los ingresos de las personas, aunque fuera de mínimos. Algunos programas de bienestar social que EEUU implementó en las últimas décadas, como los cupones de alimentos o el seguro de desempleo, le han permitido reducir algunos puntos su tasa de pobreza, pero son muy limitados, como ejemplo el 11% de los niños blancos en EEUU viven en la pobreza, esa tasa llega a 32% para los niños negros y a 26% para los niños latinos (2).

«EEUU es uno de los países más ricos, poderosos y tecnológicamente innovadores del mundo; pero ni su riqueza ni su poder ni su tecnología se están aprovechando para abordar la situación en la que 40 millones de personas continúan viviendo en la pobreza», declaraba Philip Alston, relator especial de la ONU para extrema pobreza y derechos humanos, en 2017.
Además, Philip Alston señalaba que EEUU tenía la mayor mortalidad infantil en el mundo desarrollado, que la expectativa de vida de sus ciudadanos era menor y menos saludable que en otras democracias ricas. Y también que su pobreza y desigualdad estaban entre las peores del club de países ricos OCDE, y su tasa de encarcelamiento entre las mayores del mundo (3).

Pandemia…

Un análisis realizado por Human Rights Watch de microdatos de uso público obtenidos de la encuesta Household Pulse de la Oficina de Censos (4) muestra que la recesión económica ocasionada por la pandemia ha tenido un impacto devastador y desproporcionado sobre los derechos de las personas con bajos ingresos que ya atravesaban dificultades. El American Rescue Plan (5) del Presidente Joe Biden, un proyecto de ley que prevé otorgar ayuda por valor de USD 1,9 billones en el marco del coronavirus, y que fue aprobado por la Cámara de Representantes de EEUU el 27 de febrero de 2021, dispone que se realicen inversiones de vital importancia para mitigar las dificultades económicas cada vez mayores que afectan a estos sectores de la población. Ahora, este proyecto de ley está siendo evaluado por el Senado, el cual podrá modificarlo antes de volver a enviarlo a la Cámara de Representantes para su votación final.

Desde el inicio de la pandemia, 74,7 millones de personas han perdido su trabajo, y la mayoría de los empleos se perdieron en sectores que pagan salarios inferiores a la media. Muchas de las personas que perdieron su trabajo y sus ingresos se están quedando sin dinero y ahorros. En el mes de enero, aproximadamente 24 millones de adultos informaron que se encontraban en situación de hambre y más de seis millones manifestaron que temían sufrir un desalojo o la ejecución de sus hipotecas en los dos meses siguientes, por no poder cumplir con los pagos relacionados con la vivienda. En contraposición con ello, las personas de ingresos más altos no han sufrido un perjuicio económico grave. Pese a estar atravesando la peor contracción económica desde la Gran Depresión, la riqueza conjunta de los 651 milmillonarios de EEUU ha aumentado en más de USD 1 billón desde el inicio de la pandemia, lo cual representa un salto del 36 %.

¿Cuestionamos el capitalismo? ¡Cuestionamos!

Los datos anteriores son escuetos, pero muy indicativos. Las imágenes son contundentes

Así están algunas calles en Los Ángeles, California. Sus aceras llenas de personas pobres, muchos de ellos con trabajo y que no pueden alquilar un piso. Hay más de 44 mil personas en el Condado de Los Ángeles. Esto es el paraíso capitalista…

 

Notas:
1.- Los 25 países más ricos del mundo
2.- Centro de Datos Kids Count
3.- Relator Especial sobre la extrema pobreza y los derechos humanos
4.- Archivo de uso público de la encuesta de pulso de los hogares
5.- Plan de rescate estadounidense