El viernes miles de ciudadanos portando banderas colmaron la céntrica avenida Alameda de Santiago, la capital del país, para el cierre de la campaña por el apruebo.
En tanto los partidarios del rechazo se movilizaron a las alturas del capitalino cerro San Cristóbal. Unos 500 mil seguidores de la opción apruebo asistieron a un multitudinario acto en el mismo lugar donde el izquierdista Gabriel Boric celebró su triunfo como presidente en marzo pasado.
La opción del apruebo apoyará en la consulta popular el nuevo texto redactado durante el último año por una Convención Constitucional, que según afirman establece mayores derechos sociales.
A las urnas fueron convocados para el 4 de septiembre más de 15 millones de para definir si sepultan o no la Constitución vigente desde la dictadura de Augusto Pinochet, quien gobernó el país entre 1973 y 1990.
Las encuestas previas, vetadas hasta dos semanas antes de la elección, situaban sin excepción al rechazo por delante. Sin embargo, esta última semana el escenario se ha vuelto cada vez más estrecho de cara al referendo del domingo.