Cuatro expresidentes de España piden al Reino Unido que dialogue con Argentina por la soberanía de las Islas Malvinas

Felipe González, José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy se plegaron al planteo de Buenos Aires, instando a Londres a negociar de modo pacífico.

Monumento a los caídos en la Guerra de Malvinas de 1982, en la Ciudad de Buenos Aires Foto: Gabriel Rossi / LatinContent / Gettyimages.ru

La Embajada de Argentina en España informó este viernes que los expresidentes Felipe González, José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy lanzaron un pedido para que el Reino Unido y el país sudamericano reanuden, «a la mayor brevedad posible», las negociaciones para resolver la disputa por la soberanía de las Islas Malvinas.

De esta forma, estos importantes dirigentes políticos se pliegan a la postura de Buenos Aires, que insiste para que Londres acepte conversar, tal como lo establece la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en sus resoluciones. Según lo difundido por la diplomacia argentina, González, Aznar, Zapatero y Rajoy conformaron el Grupo de Apoyo al Diálogo, con la intermediación del embajador latinoamericano, Ricardo Alfonsín.

Además de estos exmandatarios, también se integraron al grupo otras personalidades españolas: el diputado Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, conocido como el ‘padre’ de la Constitución, el exministro de Asuntos Exteriores José Manuel García-Margallo y el ex secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) Javier Solana.

En el texto, remarcaron la necesidad de «encontrar una pronta solución» a la controversia, mencionando también disposiciones de la Organización de Estados Americanos (OEA) y el «principio de integridad territorial», amparado en la Carta de las Naciones Unidas.

Tensión a 40 años de la Guerra de Malvinas

Este posicionamiento se produce mientras Argentina lanza su Agenda Malvinas 40 años, para recordar el conflicto bélico que enfrentó a la dictadura local con el Reino Unido, en un intento fallido por recuperar la administración del archipiélago. Ahora, se producen actividades políticas, educativas y culturales para mantener vigente el reclamo pacífico y recordar a los combatientes.

Mientras, se le exige a Londres que acepte negociar sobre la administración del territorio, que está mucho más próximo a Argentina. Sin embargo, mientras Buenos Aires afirma que se atañe al derecho internacional y las disposiciones de la ONU, el Reino Unido rechaza la posibilidad de dialogar amparándose en la «libre determinación» de los pueblos. Esto, considerando que los isleños que crecieron bajo la administración británica, prefieren ser ingleses antes que argentinos.

Así, a menos que cambie la voluntad de los habitantes, Londres no aceptaría ningún tipo de conversación. En contrapartida, Buenos Aires remarca que «este principio no resulta aplicable en tanto la composición de la población de las Islas es el resultado de la colonización iniciada por el Reino Unido en 1833«. Además, el Gobierno de Alberto Fernández indica que su postura «va de la mano con el respeto al modo de vida de los isleños».

Más allá de la cuestión de fondo, a nivel político en los últimos días creció la tensión luego de que el secretario de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace, dijera que defendería las islas de «los matones». Acto seguido, la Cancillería argentina comunicó que estas expresiones «resultan absolutamente impropias e inaceptables», agregando que son «incompatibles con la relación diplomática existente».