El vídeoblog de Ana Pardo de Vera habla sobre cómo las grandes revoluciones y cambios sociales conllevan un nivel de activismo muy superior a los ímpetus partidistas e institucionales paralelos. Estos últimos que, además, suelen estar bien retribuidos y entran en la nómina. Este semana, en la Comunidad de Madrid, hemos conocido dos casos que advierten de forma ejemplar sobre la necesidad del activismo político -toda reivindicación social es política, para bien o para mal-, los dos casos en el ámbito de la lucha contra el maltrato animal y el respeto por la naturaleza.