Dos mercenarios estadounidenses, que combatían en Ucrania, llevan desaparecidos; sus familias denuncian que habrían sido capturados por las tropas rusas.
De acuerdo con lo detallado por medios locales, Alexander J. Drueke, de 39 años y que trabajó en el pasado en el Ejército de EE.UU., y Andy Tai Huynh, de 27 y que estuvo en el cuerpo de Marines, estaban combatiendo cerca de Járkov, Ucrania, hasta la semana pasada, desde cuando llevan desaparecidos.
La madre de Drueke, Lois, dijo al diario local The Washington Post que otro estadounidense que estuvo en Ucrania le llamó el lunes y le aseguró que ambos exmilitares habrían sido capturados por soldados rusos.
La Administración estadounidense, presidida por Joe Biden, ha anunciado que no puede confirmar la captura de los dos mercenarios, aunque ha prometido hacer todo lo posible para seguir la situación.
Por su parte, el rotativo The Telegraph ha señalado que los desaparecidos se unirían a otros mercenarios occidentales capturados por las fuerzas rusas, incluidos tres ciudadanos británicos: Aiden Aslin, Shaun Pinner y Andrew Hill.
El 8 de junio, el Tribunal Supremo de la autoproclamada república de Donetsk condenó a la pena capital a Shaun Pinner y Aiden Aslin, así como al marroquí Saadoun Brahim por formar parte del Ejército ucraniano en calidad de mercenarios.
Ayer miércoles, el portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, alertó a “soldados de fortuna” que luchan del lado de los neonazis ucranianos o solo tienen la intención de unirse a ellos, que enfrentarán sentencia a muerte.
Ucrania no ha dado cifras exactas del número de los mercenarios que luchan contra las fuerzas rusas; no obstante, Moscú da a conocer que casi 7000 extranjeros procedentes de más de 60 países —principalmente de Polonia, Estados Unidos, Canadá y Rumanía— se han unido a las fuerzas ucranianas.