La sanidad gallega está colapsada por las vacaciones de agosto, con decenas de centros que non dan cita este mes.
El pasado 6 de agosto, una mujer murió en el aparcamiento del punto de atención continuada (PAC) de Baltar, en la localidad pontevedresa de Sanxenxo, a donde tuvo que ser trasladada en coche por su pareja porque el Sergas le indicó que no había ambulancias disponibles para recogerla. El suceso está siendo investigado por un juzgado de Cambados (Pontevedra) después de que la familia de la mujer presentara denuncia en la Guardia Civil.
No es la primera vez que un paciente muere en agosto esperando asistencia o sin obtenerla en un PAC o un centro ambulatorio abierto en Galicia. El 4 de agosto del año pasado, un hombre murió en A Estrada (Pontevedra) ahogado en su propio vómito tras acudir a su centro, donde el único médico de guardia había salido a atender una urgencia.
Las plataformas locales de defensa de la sanidad alertan de que en Sanxenxo, una localidad turística que pasa de 17.000 a más de 100.000 habitantes en agosto, la situación es crítica: de sus dos centros de salud, en el de Vilalonga no hay médicos ni enfermeros y el de Baltar sólo cuenta con la mitad de la plantilla, por lo que el Servizo Galego de Saúde (Sergas) decidió la semana pasada suspender las consultas y que los facultativos sólo atiendan urgencias y desplazamientos.
La portavoz de Sanidade Hospitalaria del BNG, el primer partido de la oposición en Galicia, denuncia el «caos sanitario» en el que se encuentra Galicia y exige la comparecencia de Alfonso Rueda en el Parlamento autonómico para explicar la muerte de Sanxexo y las medidas que prevé adoptar la Xunta para resolver el colapso de la atención primaria.
Carreira alerta de que la suspensión de agendas por falta de profesionales provoca que miles de personas no puedan acudir a su médico o médica de cabecera durante este mes. El Sergas reconoce que «aunque es posible que alguna agenda estuviera cerrada, la atención está garantizada en los centros de salud y en los puntos de atención continuada». «Y todos los pacientes que acudieron con un problema de salud agudo fueron atendidos», añaden.
La portavoz del BNG, sin embargo, subraya sus argumentos con cifras el Sergas no rebate, y añade que hay más de 40.000 pacientes esperando por una intervención quirúrgica y más de 85.000 por una prueba diagnóstica, y que la mitad de los médicos internos y residentes que terminan la especialidad en medicina interna «huye de la atención primaria de Galicia».
El Bloque ha propuesto un plan de choque para la atención primaria dotado con 200 millones que permita acabar con la precariedad laboral, convocar todas las plazas vacantes en el Sergas y desarrollar las carteras de servicios de cada especialidad incorporando «nuevas especialidades que contribuyan a descongestionar la atención Primaria».
El pasado 22 de julio, la plataforma SOS Sanidade Pública, que integra a sindicatos, organizaciones de defensa, asociaciones de pacientes y usuarios y de profesionales sanitarios, presentó en la Cámara Gallega una propuesta de iniciativa legislativa popular con la que pretende forzar por ley a la Consellería de Sanidade, que dirige Julio García Comesaña, a reforzar la atención primaria en la comunidad.
El portavoz de la plataforma, el médico Manuel Martín, asegura que el caos sanitario se debe a «las políticas de desmantelamiento, de recortes, de falta de recursos y de abandono de la atención primaria acabaron con la situación en la que estamos», ha asegurado el doctor Martín, quien ha explicado que «hay una enorme dificultad de la población para poder acceder a los centros de salud».
Con posterioridad a la publicación de este artículo, el Sergas informó a Público de que el mes que viene «se incorporarán a la atención primaria gallega 106 especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria de la convocatoria por concurso de méritos de este año» y que «regresará la mayor parte del personal sanitario que ahora se encuentra de vacaciones».
Además, con respecto a las imágenes de pacientes encamados en los pasillos del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña que ilustran esta información, el Sergas explica que la demanda asistencial en el centro «era muy alta para la época del año» tanto por la pandemia como por la ola de calor, que la plantilla de urgencias aumentó en seis médicos en los últimos dos años y que «el esfuerzo del conjunto del personal» merece el «reconocimiento y apoyo» de la gerencia.