En plena pandemia, Ecuador celebra este domingo unas elecciones presidenciales cruciales para su futuro que ponen fin a la era de Lenín Moreno. Tres candidatos destacan entre los 16 que se presentan: dos de ellos representan los extremos entre los que ha oscilado la política ecuatoriana en la última década. El tercero es un candidato indígena y ecologista.
La mayoría de los sondeos, auguran que el candidato más votado será el exministro correísta Andrés Arauz, que está al frente de la plataforma Unión por la Esperanza. Economista de 35 años, podría convertirse en el presidente más joven de la historia del país. Su victoria fortalecería el eje de izquierdas latinoamericano.
El segundo candidato con más apoyos sería el liberal conservador Guillermo Lasso, quien ha machacado durante la campaña que creará empleo, empleo y más empleo. Un mensaje que suena a miel en los oídos de un país empobrecido por la pandemia y la austeridad. Las encuestas pronostican que obtendrá algo más de 22% de apoyos, 8 puntos menos que Arauz y 8 puntos más que el ecologista Yaku Pérez, cuyo respaldo a uno u otro candidato podría ser decisivo en una más que probable segunda vuelta.
También puede ser decisivo el voto de los ecuatorianos que viven en el extranjero. Tan solo en España hay 178.000 electores, representando más de un tercio de la diáspora ecuatoriana. Tanto en España como en Ecuador, la jornada electoral supone un enorme desafío sanitario.