El director adjunto de La Vanguardia analiza el movimiento estratégico de VOX que abandona el grupo de Meloni en el Parlamento Europeo y pasa a formar parte del grupo de ultraderecha pro-rusa liderado por Orban
Según informa el periódico La Vanguardia a través de su director adjunto Enric Juliana: “Vox abandona a Giorgia Meloni y se suma a la nueva plataforma impulsada por el primer ministro húngaro Víktor Orbán, el hombre de Vladímir Putin en la Unión Europea”
En un extenso artículo señala que “El partido de la extrema derecha española toma rumbo hacia Moscú, mientras espera la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Vox abandona el grupo de los “conservadores” para engrosar las filas de una nueva plataforma que adoptará el nombre de Patriotas por Europa. El salto hacia el Este fue anunciado ayer mientras Orbán se entrevistaba en Moscú con Putin, desafiando a las instituciones europeas”.
Desde su columna en el matutino expresó que “Santiago Abascal, presidente de Vox, informó personalmente a Meloni de esta decisión hace tres días, según se ha podido por fuentes conocedoras de la política gubernamental italiana. Según estas fuentes, Meloni quedó “muy afectada” por la deserción de Abascal, por dos motivos: se siente aislada y traicionada después de haber alimentado grandes sueños en la política europea”.
El periodista remarcó que “la nueva plataforma liderada por Orban, a la que ayer también se sumó la extrema derecha neerlandesa, puede convertirse en las próximas semanas en el principal grupo de las derechas nacional-populistas en el Parlamento Europeo, dejando a Meloni y a los ultranacionalistas polacos en segundo plano en el grupo de los “conservadores” (grupo que fue fundado por los conservadores británicos antes del Brexit, de ahí su nombre)”. A su vez, destaco que “después de las elecciones del próximo domingo, Marine Le Pen anuncie la adhesión del Reagrupamiento Nacional francés a Patriotas por Europa”.
Juliana también se refirió al descontento de Meloni “quien se siente muy disgustada, según las referidas fuentes, porque siempre ha apoyado a Vox y ha dado un trato preferente a Abascal”. Y, cabe recordar, que “hace unos meses, el Gobierno italiano promovió el nombramiento de un abogado próximo a Abascal como nuevo consejero de Endesa, la empresa eléctrica española que es propiedad de Enel, la gran empresa pública italiana de electricidad”.
Según sigue en su artículo, “La puñalada será recordada durante mucho tiempo en Roma. Según las fuentes citadas anteriormente, Abascal argumentó ante Meloni que Vox tenía necesidad de remarcar su perfil político ante la evidente estrategia del Partido Popular español de intentar captar a parte de sus votantes mediante un discurso más duro. “Vox quiere marcar distancias con el PP y Orban maneja cuantiosos fondos para su operación europea”, señalan las fuentes italianas. La desilusión de los Hermanos de Italia era ayer patente. “Abascal no ha elegido el mejor día para marcharse con Orbán”, ironizaban dirigentes del partido gubernamental italiano”. Y continúa citando el tuit de Abascal; “La relación personal con Giorgia Meloni va mucho más allá de la política diaria y coyuntural. Porque existe un lazo personal, político y moral”
Juliana concluye valorando que “el salto de Vox es cualitativamente importante y tendrá repercusión en la política interna española. A partir de ahora, Vox forma parte del círculo de Vladímir Putin en la Unión Europea y a la vez mantiene alianzas de gobierno con el PP en importantes comunidades autónomas, empezando por la Comunidad Valenciana. Poco después de conocerse la adhesión de Vox al grupo promovido por Orban, Alberto Núñez Feijóo, poco dado a los comentarios sobre política internacional, escribió ayer lo siguiente en la red X: “La visita del Primer Ministro de Hungría, Viktor Orban, a Moscú no representa a la UE. Nuestros valores son absolutamente incompatibles con Putin y sus acciones. La posición de la UE es muy clara: la agresión rusa contra Ucrania debe acabar”.