Ucrania recurrió a la inteligencia de Estados Unidos para planificar un contraataque a Rusia y recuperar parte de los territorios perdidos en el noreste.
Altos funcionarios ucranianos intensificaron en los últimos tres meses el intercambio de inteligencia con sus homólogos estadounidense en el marco de una planeada ofensiva contra Rusia en el noreste, la misma que se ha ejecutado desde hace días, informa el diario The New York Times (NYT), citando a funcionarios norteamericanos anónimos.
Ciertamente, Ucrania utilizó información estadounidense sobre los puestos de mando, depósitos de municiones y otros objetivos rusos antes de que comenzara una operación contra Rusia el jueves en la región de Járkov para retomar las tierras que están bajo el control de las tropas rusas.
Sin embargo, según la fuente, desde Ucrania no han comentado sobre esa colaboración de inteligencia por preocupaciones de que pudiera “poner de relieve debilidades y desalentar el apoyo continuo estadounidense”.
“Mientras Ucrania estaba ideando un plan para contraatacar a los rusos, altos dirigentes en Kiev decidieron que compartir más información con Estados Unidos ayudaría a conseguir más asistencia”, señalaron.
En este mismo contexto, una de las autoridades citadas por NYT dijo que “los estadounidenses discutieron ‘constantemente’ con Kiev las maneras en que Ucrania podría atenuar el avance ruso”.
El informe de The New York Times sale a la luz mientras Ucrania asegura que logró esta semana avanzar en la región de Járkov, recuperando unos 3000 kilómetros cuadrados de su territorio, entre ellos las ciudades de Balaklia e Izium
Mientras tanto, el Ministerio ruso de Defensa dijo el sábado que las tropas rusas desplegadas cerca de esas ciudades fueron reagrupadas para reforzar las posiciones rusas en la dirección de Donetsk.
Desde el inicio de la operación militar rusa Ucrania, el pasado 24 de febrero, Rusia ha advertido a EE.UU. y sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) que no proporcionen armas ni compartan datos de inteligencia con Ucrania, ya que corren el riesgo de convertirse en parte del conflicto. Mientras tanto, los países occidentales hacen caso omiso y han destinado millones de dólares en apoyo a Ucrania.