Hay mucho que se puede extraer de los comicios regionales en Alemania. Los ecos de la recesión, la caída en la irrelevancia de la otrora mandataria europea, la acuciante situación de los precios y, sobre todo, la jaula de grillos en que se ha convertido el gobierno de Berlín. Todo ello está sobre el tablero
Alemania sigue votando. Las elecciones europeas marcaron un hito para los partidos de gobierno, los partidos de establishment y los que aspiran a romper los consensos