Decenas de miles de personas han recorrido el centro de Madrid por una «sanidad madrileña pública, universal y de calidad» convocados por sindicatos, asociaciones vecinales y plataformas por la sanidad pública.
Cabecera de la manifestación convocada por diferentes organizaciones sanitarias de la Comunidad de Madrid en defensa de una sanidad pública, universal y de calidad, 26/03/2023. — Juan Carlos Hidalgo / EFE
Una semana después del acuerdo entre el sindicato médico AMYTS y la Consejería de Sanidad que puso fin a la huelga de médicos pese a no incluir la contratación de más profesionales, una nueva manifestación en defensa de una sanidad «pública, universal y de calidad» ha recorrido Madrid un domingo más.
Decenas de miles de personas han recorrido, más de 50.000 según los organizadores, las arterias centrales de la capital en un día plenamente primaveral, llamados por asociaciones en defensa de la sanidad pública, sindicatos y organizaciones vecinales y de consumidores.
Convocada en Plaza de España a las 12 horas y con destino Atocha, el comunicado conjunto reclama «apostar claramente por la Atención Primaria» con financiación y recursos, mantener todos los Servicios de Urgencias Extrahospitalarias, acabar con «las privatizaciones y externalizaciones encubiertas». Los organizadores, con esta marcha, protestan ante la ausencia de medios que afecta «a la correcta atención y salud de los y las pacientes» y «la sobrecarga de trabajo que el personal sanitario tiene que soportar».
«El estado de salud de la sanidad pública madrileña es mala. Las causas son la financiación más baja de España, que además gran parte de ese dinero se va a conciertos privados con ánimo de lucro, y unas grandes listas de espera interesadas para que acusan a la sanidad privada», ha agotado Carlos Castaño, médico de la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (AFEM).
El sanitario, traumatólogo en el Hospital Gregorio Marañón de la capital, considera un «maltrato profesional» a los profesionales de la salud por, entre otras causas, tener las guardias peor pagadas de España y no tener acceso a la jornada de 35 horas que sí disfrutan otros trabajadores públicos.
En su opinión, el acuerdo que puso fin a la huelga de Atención Primaria es un «éxito» pese a no solucionar todos los problemas que afectan a la base del sistema sanitario porque «limita las agendas y así mejora la atención a los pacientes». Para el presidente de AFEM, la subida salarial alcanzada «supone un incentivo para que los médicos que quieren hacer primaria no se vayan a otras comunidades. Esperemos que se cumpla».
Quique Villalobos, presidente de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) ha lanzado un mensaje a la presidenta regional Isabel Díaz Ayuso: «No vamos a desaparecer, hasta que recuperemos nuestro sistema público de sanidad«.
Desde el sureño y popular distrito de Villaverde ha venido Ángeles para defender la salud pública del «robo que está haciendo Ayuso no poniendo el dinero que tiene que poner. No hay médicos y no han reabierto las urgencias como dijo». El acuerdo de Atención Primaria «ya estaba prometido de antes, pero la situación sigue igual. Tengo una cita con el médico de cabecera para dentro de más de un mes».
La protesta ha contado con la asistencia de los secretarios generales de la Unión General de Trabajadores (UGT) y de Comisiones Obreras. También han participado los partidos de la oposición de izquierda PSOE, Más Madrid y Podemos, con la presencia de Juan Lobato, Mónica García, Alejandra Jacinto y Roberto Sotomayor.
La marcha se ha cerrado con la lectura de discursos finales en la Glorieta de Carlos V por parte del presentador El Gran Wyoming y la actriz Lola Manzanares: «Es necesario y urgente conseguir mayor financiación para la sanidad pública madrileña. Un año más vuelve a estar a la cola de las comunidades autónomas. En los presupuestos de 2023 la Comunidad de Madrid aumentó las inversiones en Sanidad. Es urgente mejorar las condiciones laborales del personal sanitario».
«El Gobierno del Partido Popular deja de lado a una población vulnerable cada vez más desamparada para que acudan a la sanidad privada. La sanidad pública es un obstáculo para el afán privatizador del PP madrileño. La ciudadanía junto a los profesionales sanitarios nos hemos unido para defender una sistema sanitario público, universal y de calidad», ha destacado la arenga de cierre.
Esta enésima protesta sanitaria madrileña ha sido precedida en Andalucía por las organizadas este sábado en las ochos provincias por la Coordinadora Andaluza de Mareas Blancas para parar la privatización sanitaria y reducir las listas de espera. El sábado hubo también movilización por la sanidad pública en Canarias.