Agrupaciones obreras de Panamá denuncian que el país se encuentra secuestrado por una “mafia empresarial”, mientras se preparan para la reactivación del diálogo.
Más allá de las cifras oficiales de desempleo y el incremento de la informalidad, desde distintos sindicatos en Panamá denuncian que el deterioro de sus condiciones de trabajo también se ha incrementado en los últimos dos años y medio.
Según explican, esta desproporción repercute de manera directa sobre las condiciones generales de vida de la población.
En recientes foros, organizaciones populares han profundizado en la idea de que el Estado panameño es víctima de un secuestro, mientras se preparan para debatir con el sector empresarial la incidencia que han tenido en la actual crisis que atraviesa el país.
Las denuncias desde estas organizaciones han ido también contra algunos medios de comunicación a quienes señalan por promover el detrimento de la imagen de los trabajadores.
Frente al último receso anunciado el pasado 3 de septiembre en la Mesa del diálogo por Panamá, se espera que para el próximo día 13 de septiembre, las autoridades y las alianzas populares definan la posible participación de la empresa privada y otros sectores productivos en la negociación.
John Alonso, Ciudad de Panamá.