La amenaza constante de los ataques ucranianos obligó en Donetsk a realizar el referéndum sobre la reintegración a Rusia en casas, pasillos, patios y trincheras.
Las mujeres fueron las encargadas de garantizar un proceso electoral correcto y masivo. Más de 2 100 000 personas ejercieron el voto para convertir la república popular de Donetsk en parte de la Federación Rusa.
La escuela número 5, en el distrito Voroshilovsky, celebró el martes el último día del referéndum sobre el regreso de Donetsk a Rusia, tras 100 años. Hace pocos meses era, sin embargo, un espacio de desolación, tras un ataque certero de la artillería ucraniana. Asesinaron a dos personas.
Durante cinco días, para protegerse de los proyectiles ucranianos, todo espacio fue un centro de votación. Heroínas de esta épica son las funcionarias electorales, que iban de casa en casa, de patio en patio, garantizando el derecho al voto. Por eso, también los patios fueron blanco de los cañones nazis, como lo que se ve en este informe en el centro de Donetsk, un ataque ocurrido el segundo día de votación.
En Kuybishevsky, uno de los distritos más azotados por los cañones ucranianos, votó el director del Teatro de la Ópera.
En la escuela cinco se prepara el conteo. Se inicia en el momento de elaboración del informe el conteo de votos para un referéndum que cambiará no solo el conflicto que se está viviendo en la zona del Donbás, sino también el mapa de Europa.
La respuesta es sí, sí. sí, sí, sí, si en Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia, las regiones del comicio. Lo importante es la participación masiva.
Pronto la bandera de Donetsk habrá cumplido su papel rebelde de los últimos ocho años. Para todos los efectos, incluido el curso de la guerra, ya es Rusia. Las celebraciones esperan a que llegue la paz.
Alejandro Kirk, Donetsk.