Las fuerzas rusas eliminaron a una veintena de mercenarios estadounidenses en la localidad de Andréevka, situada en la región ucraniana de Járkov (este).
Según ha informado este sábado el Ministerio de Defensa de Rusia, las fuerzas aéreas rusas también han abatido en Járkov a unos 80 miembros del destacamento armado Kraken, calificado por Moscú como nacionalista.
El comunicado ha precisado que, desde el inicio de la operación militar en Ucrania, el 24 de febrero, las tropas rusas han inutilizado 267 aviones, 148 helicópteros, 1776 drones, 367 sistemas de misiles antiaéreos, 4354 tanques y otros vehículos blindados de combate, 809 sistemas de lanzamisiles múltiples, 3320 piezas de artillería de campaña y morteros, así como 4969 vehículos militares especiales.
El Ministerio de Defensa de Rusia había anunciado previamente sobre una ofensiva contra una base de mercenarios extranjeros cerca de Zolochov, también en Járkov, y la eliminación de más de 100 milicianos de Polonia y Alemania.
El Ejército ruso sigue infligiendo bajas a los mercenarios extranjeros en el marco de su operación militar en Ucrania. Moscú ya les aconsejó que “se lo piensen siete veces” antes del ir al territorio ucraniano para unirse en la lucha de Kiev contra las fuerzas rusas.
El ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu, dijo el martes que Moscú es consciente de que las operaciones militares ucranianas se planifican en Washington (capital de EE.UU.) y Londres (capital del Reino Unido), y de que Kiev recibe información de inteligencia de fuentes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
EE.UU. está alimentando el conflicto en Ucrania enviando cientos de millones de dólares en armas al país eslavo. Moscú además acusa a Washington de enviar mercenarios a Ucrania, amenazándole con consecuencias impredecibles al respecto.