De momento no se ha establecido ningún plazo para la reunión.
Las negociaciones entre EE.UU. y Rusia sobre las garantías de seguridad han empezado este lunes en la ciudad suiza de Ginebra.
La delegación rusa está encabezada por el viceministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Riabkov, y el viceministro de Defensa, Alexánder Fomín. La parte estadounidense está presidida por la subsecretaria de Estado, Wendy Sherman. De momento no se ha establecido ningún plazo para la reunión.
El evento forma parte de un plan de negociaciones tripartitas entre las dos potencias. Además, se ha programado un diálogo entre Rusia y la OTAN en Bruselas y conversaciones en el marco de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), en Viena.
El domingo 9 de enero tuvo lugar en Ginebra una ronda preliminar de conversaciones. Entonces, Riabkov caracterizó el diálogo con Sherman como «increíble» pero «difícil». «Creo que mañana no vamos a malgastar el tiempo», subrayó el diplomático.
El pasado 17 de diciembre Moscú publicó dos propuestas de acuerdos que quiere alcanzar con EE.UU. y la OTAN. En los documentos figuran, entre otros puntos clave, las garantías mutuas de seguridad en Europa, así como la no expansión de la alianza hacia el este, incluida la adhesión de los exmiembros de la URSS.
En opinión de Carmen Parejo Rendón, directora de la revista La Comuna, las posiciones de EE.UU. se ven afectadas por las crisis internas en Occidente y el mundo multipolar. «Estamos viendo […] un cambio de modelo hacia un multilaterialismo», subrayó la experta en comentarios a RT.
A su vez, el politólogo William Serafino cree que EE.UU. mantiene «el espíritu de chantaje y un clima de confrontación» de cara a esta ronda de negociaciones y muestra «muy poca intención de negociar un equilibrio estratégico con Rusia y la desescalada en las tensiones con Ucrania». Al contrario, el país norteamericano está buscando «viabilizar otro conjunto de herramientas coercitivas contra la economía de Rusia».