Por Tremending
Peter O’Toole en Lawrence de Arabia, Robert de Niro en Taxi Driver, Macarena Olona en Lo de Évole… Hay actuaciones que simplemente son inolvidables.
La Sexta emitió este domingo la última entrega del programa de Jordi Évole, con una entrevista a la exdirigente de Vox, Macarena Olona, que no ha dejado indiferente a nadie.
En la misma, lanzó algunos torpedos a la línea de flotación de Vox: cuestionó las finanzas del que fue su partido y de la fundación Disenso, vinculó a personas «en el entorno de Vox» con alabanzas al nazismo, dijo que Abascal «no es libre» e insinuó que hay decisiones sobre Vox que se toman fuera de Vox…
Todo ello, entre puñalada y puñalada a Santiago Abascal, pese a decir que «es una buena persona».
También se habló de la supuesta pertenencia de miembros de Vox a la secta ultracatólica El Yunque y de la influencia de esta en el partido.
Eso sí, lo de que siendo su portavoz no supiera nada y que se haya dado cuenta justo después de fracasar en las elecciones andaluzas y acabar fuera del partido, eso ya cuela menos. Una actuación memorable, pero no por ello creíble.
La entrevista estuvo llena de silencios larguísimos. Quizá para darle dramatismo o quizá para aguantarse la risa por algunas de las cosas que estaba diciendo.
Olona habló sorprendidísima de nazis y xenófobos en el entorno de Vox.
Incluso se permitió el lujo de comparar lo suyo en Vox con American History X, una película en la que un nazi arrepentido es hostigado por su antigua banda por marcharse.
Y además, presentándose ahora como defensora de los derechos LGTBI. «En Vox hay dirigentes que creen que la homosexualidad es una enfermedad», ha dicho. Otra tremenda sorpresa que se ha llevado, parece.
Nadie sabe muy bien a qué juega con todo esto, pero seguro que a algo turbio.
La entrevista de Jordi Évole no habrá dejado muchas certezas, pero sí que ha provocado miles de reacciones en las redes.
Mientras Olona se va enterando muy sorprendida de lo que media España ya sabe hace años, Vox sigue haciendo de las suyas. Hace pocos días, por ejemplo, alertando del «alarmante» aumento de la homosexualidad.