El líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, en una sesión de control del Senado de España, noviembre de 2020. (Foto: EFE)
Ante la derrota de Trump, el partido español Unidas Podemos afirma que “la ultraderecha” global “pierde su activo político más poderoso” en el mundo.
El líder del aludido partido y también vicepresidente segundo del gobierno de coalición de España, Pablo Iglesias, fue uno de los primeros en reaccionar ante la victoria del demócrata Joe Biden en las presidenciales de EE.UU., luego de que este ganara el estado de Pensilvania y superase el umbral de los 270 votos electorales necesarios para convertirse en el mandatario número 46 del país norteamericano.
“Se confirma que Trump ha perdido las elecciones. Es una buena noticia para el planeta, en la medida en que la ultraderecha global pierde su activo político más poderoso. Pero la ultraderecha que solo acepta la democracia si gana, sigue siendo un enorme peligro en América y Europa”, escribió la noche de sábado Iglesias en Twitter.
El portavoz parlamentario de Podemos, Pablo Echenique, celebró también el resultado electoral de EE.UU., afirmando que “hoy la ultraderecha está triste y rabiosa. Hoy el planeta es un poco mejor”.
En su tuit, Echenique anotó que la llegada de Biden a la Casa Blanca supone la derrota del “racismo, el machismo, el odio, el negacionismo climático, el autoritarismo y las fake news gritos para tapar los privilegios fiscales del 1 %”.
Por su parte, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, líder de Izquierda Unida (IU), consideró que la victoria del exvicepresidente Barack Obama (2009-2017) es “una buena noticia”, porque “la extrema derecha mundial pierde a su principal referente político, Donald Trump”.
Además, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, dirigente de la coalición regional de Unidas Podemos, saludó la noticia con un mensaje en inglés a través de Twitter en el que atribuyó el triunfo de Biden sobre Trump a la Marcha de las Mujeres, el Black Lives Matter, el movimiento por la justicia climática, entre otros.
Colau instó a todos estos movimientos sociales a seguir luchando por afianzar sus derechos ante las embestidas endémicas de grupos de ultraderecha, amparados hasta ahora en el saliente inquilino de la Casa Blanca.