Los manifestantes han pedido elevar el ratio de personal por usuario y un incremento de las inspecciones.
Los convocantes, además, han reclamado elevar el ratio de personal cuidador para garantizar que los mayores reciben una atención correcta. Para garantizar que las incidencias no se conviertan en norma, los ciudadanos que se han concentrado en el centro de la capital han exigido también más inspecciones y controles regulares.
La manifestación ocurre tan solo dos días después de que un usuario de una residencia de San Sebastián de los Reyes acudiera al Pleno del Ayuntamiento de dicha localidad para denunciar, con un emotivo discurso, las malas condiciones de vida, con temperaturas de hasta 40ºC y «comida deleznable».
El relato de este anciano, Mariano Turégano, los 140 pacientes de la residencia vivieron la ola de calor de este verano, una de las más largas e intensas, sin aire acondicionado, lo que derivó en ingresos hospitalarios por deshidratación. Unas condiciones, según puso de manifiesto este residente, que provocan además que nadie quiera trabajar en el mismo, que achacó a los «sueldos miserables» que se pagan.
A la manifestación ha acudido la portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Mónica García, que ha criticado al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso por «abandonar» a los mayores y «dejar las residencias en manos de negocio y de fondos buitre».
Las privatizaciones son parte de la culpa, según los manifestantes. Tanto es así que al menos hubo un 15% más de fallecidos en las residencias privadas durante la pandemia.
Las peticiones de los manifestantes, no en vano, están siendo escuchadas por el Gobierno. El Ministerio de Derechos Sociales de Ione Belarra ya ha aprobado un primer plan para la transformación total del sector. Algunas de las medidas que ya han trascendido son el fomento de la teleasistencia, el incremento del ratio de personal –con un mínimo de 80% de contratos indefinidos– y un límite de 120 plazas por residencia para acabar con la masificación de los centros.