¿Cómo Biden amenaza a China sobre la cooperación con Rusia? Y ¿Quién sanciona a EEUU por la ruina que arrastra en el mundo?

Presidente de EE.UU., Joe Biden, en una reunión con su par chino, Xi Jinping, 15 de noviembre de 2021. (Foto: AFP)

El presidente de EE.UU. avisa a su par de China que Pekín incurrirá en un error si viola las sanciones que Occidente impone a Rusia por la operación en Ucrania.

En declaraciones ofrecidas durante una entrevista exclusiva con la cadena CBS y emitida el domingo, el presidente estadounidense, Joe Biden, afirmó que hizo la advertencia en una llamada telefónica con su homólogo chino, Xi Jinping, poco después de que el líder chino se reuniera con el presidente ruso, Vladímir Putin, en el marco de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín.

“Le dije [a Xi]: ‘Si usted cree que los estadounidenses y otros seguirán invirtiendo en China basándose en que usted viola las sanciones que se han impuesto a Rusia, creo que está cometiendo un error gigantesco, pero esa es su decisión”, recordó Biden.

Sin embargo, el mandatario de EE.UU. aseguró que no tenía la intención de amenazar a China; más bien, quería advertir a Xi del alto precio que Pekín pagaría por violar las sanciones.

Por otro lado, Biden descartó que la alianza chino-rusa signifique efectivamente que Estados Unidos esté luchando en un nuevo tipo de Guerra Fría, “no creo que sea una nueva, más complicada, Guerra Fría”, adujo.

 

Con todo, tal como indicó Biden, “hasta ahora, no hay indicios de que [los chinos] hayan presentado armas u otras cosas que Rusia haya querido”.

Desde el inicio de la operación rusa en Ucrania (24 de febrero), Estados Unidos ha impuesto, en coordinación con sus aliados occidentales, sanciones al sector financiero ruso, al presidente Putin y a decenas de funcionarios, de ese país, además de enviar ayuda militar a Kiev.

Mientras tanto, el Gobierno chino, desde su postura “objetiva e imparcial”, ha expresado su disposición para actuar de forma constructiva en el avance de las negociaciones de paz entre Rusia y Ucrania.

De hecho, Pekín ha rechazado sumarse a las sanciones impuestas por el Occidente contra Rusia por carecer de “fundamentos legales”, alertando que las medidas coercitivas solo “arrastrarán hacia abajo la economía mundial”.

 

La Unión Europea, por su dependencia de EEUU, se dirige al precipicio

Alastair Crooke
Gleichschaltung (control totalitario nazi) de la UE: «No nos importa lo que pienses: todo será regulado o limitado hasta la muerte»

Bueno, por si hay alguien, en algún lugar, que no se haya dado cuenta, Europa está en crisis. Hace seis meses, los líderes europeos estaban ansiosos de que sus planes de dejar de comprar gas y petróleo rusos, y sancionar absolutamente todo lo ruso, harían explotar la economía de Rusia y, además, «eliminarían» al presidente Putin al mismo tiempo.

El avance rápido hasta hoy provocó que ya son «seis de cada 10 empresas en Reino Unido que enfrentan el cierre debido al aumento de los costos de energía»; «se avecina un frío invierno para Europa»; «diez terribles inviernos por venir»; «inflación récord en la zona euro», y las opciones energéticas de Alemania disminuyen. Pero anímate: a los líderes europeos no les importa lo que pienses. ¡Agárralo! “Apoyaremos a Ucrania hasta el final”, advierten.

Es simplemente extraordinario: la UE sigue pegándose un tiro en el pie; y luego lo hace de nuevo. Primero imaginó el colapso financiero de Rusia; luego imaginó que la incompetencia militar de Rusia y su tambaleante desempeño permitirían a Zelensky humillar a Rusia en el campo de batalla. Y ahora, en lugar de dejar de cavar más profundo, la UE presenta su «plan B»: después de sancionarlo todo (con consecuencias predecibles), ahora planea «tocar el precio» de todo, con consecuencias adversas igualmente predecibles.

El viernes de la semana pasada los ministros de finanzas del G7 acordaron continuar con su plan para limitar el precio de las exportaciones de petróleo ruso. Esta iniciativa no reemplazará los embargos separados de los países del G7 sobre el petróleo ruso, pero se implementará en paralelo: el 5 de diciembre para el crudo y el 5 de febrero de 2023 para los productos refinados.

Este límite se activará a través de la «prohibición integral de servicios» que impiden el transporte marítimo de crudo y productos derivados del petróleo rusos. Esos servicios, que incluyen seguro de envío, solo se permitirán si los productos se compran a un precio igual o inferior al que establecerá una “amplia coalición de países”. Un esquema que es esencialmente creación de la secretaria del Tesoro de EEUU, Janet Yellen.

En su visión, el precio se fijaría por encima del nivel de precios que Rusia requiere para equilibrar su presupuesto nacional (y, por lo tanto, incentivar a Rusia a seguir bombeando petróleo), pero por debajo del precio requerido para mantener la prosperidad de las economías occidentales, y lo suficientemente bajo como para recortar profundamente en los ingresos petroleros de Rusia, debilitando así (se espera) su economía y su esfuerzo bélico.

El límite teórico no está determinado, pero se estima en alrededor de $ 50 – $ 60 el barril. El presupuesto ruso se basa en el petróleo al equivalente de $44, durante 2022. La implementación de la UE requerirá que los estados miembros acepten por unanimidad enmendar el sexto paquete de sanciones que detalla el embargo del bloque sobre el crudo ruso, incluso ajustando su prohibición sobre los servicios de seguros.

Incluso este componente clave del seguro que sirve como el «mecanismo operativo» del tope es discutible: Lloyds’ of London es una de las principales aseguradoras marítimas. ¿Cómo, en la práctica, van a determinar las compañías de seguros qué cargas se transportan a qué precio inicial? ¿Van a reclutar un ejército de inspectores? ¿Por qué estos ministros del G7 asumen que solo se contratarán los servicios de seguros del G7? India ya está proporcionando seguros para los cargamentos rusos, al igual que Rusia y China. Lo más probable es que signifique un cambio de los servicios de seguros marítimos de Londres a Asia, otra pérdida de ventaja económica occidental heredada.

Bueno, la primera y más obvia laguna en este esquema es que depende de la disposición de los grandes importadores de petróleo ruso, incluidos India y China, para aceptar el esquema. Y ambos han dicho ‘no’. Rusia ha advertido que simplemente detendría las exportaciones a cualquier estado que participe en el esquema.

Luego, días después de que la UE amenazara a los comerciantes de productos básicos con una «intervención de emergencia» para aplastar los precios de la energía, Gazprom (¿pura casualidad?) anunció que «detendría por completo» todo el tránsito de gas por el Nord Stream 1 debido a una «fuga de gas».

La noticia provocó el desplome de los mercados bursátiles mundiales y amenazó con hacer que los precios europeos del gas y la energía vuelvan a subir a máximos históricos, además de obligar a Suecia a seguir a Austria y Alemania en el «rescate» de sus compañías energéticas por una suma de miles de millones de euros.

La UE (habiendo «trabajado sin parar durante el fin de semana»), a última hora del domingo, propuso «intervenciones históricas» en el mercado de la energía, incluido un impuesto sobre las ganancias excesivas (las que estén ¡por encima del 20% de ganacias extraordinarias!, https://lahaine.org/gB91) de las empresas de electricidad y energía. Y desde topes en el precio del gas a una suspensión del comercio de derivados de energía, «mientras el bloque se esfuerza por responder a los últimos acontecimientos en la profundización de la crisis».

O, en una palabra, ahora todos los demás mercados de productos básicos están a punto de ser regulados o limitados hasta la muerte.

El defecto clave de toda esta construcción es que Europa, los grandes consumidores, después de haber perdido el control de los precios de las materias primas frente a los productores de energía, ahora quiere, con la ayuda de EEUU, recuperarlo. Y nadie, fuera de Occidente, quiere eso. La OPEP+ ciertamente no quiere eso. De hecho, la OPEP+ está recortando la producción , lo que hará subir los precios. Los productores naturalmente quieren precios altos. No les interesa castigar a Rusia a expensas de sus ingresos.

Y la India y China están bastante contentas con comprar petróleo ruso con descuento (y gas licuado en el caso de China) y después de ‘transformarlo’, venderlo de alguna manera a los europeos con una buena ganancia. Ninguno de los estados tiene ningún interés en antagonizar a Moscú innecesariamente: no son fanáticos del intervencionismo occidental «basado en reglas».

La “intervención prevista de la UE debe diseñarse de manera que evite un aumento en el consumo de gas o ponga en peligro los esfuerzos para reducir la demanda de gas. Debería ser simple de implementar y coordinar en todo el bloque y «ser consistente con los objetivos climáticos del bloque”, dijo la Presidencia de la UE en el borrador del documento.

«¿Simple de implementar?» Aquí es donde estalla la risa: ¿Por qué? Porque, como incluso Goldman Sachs escribió el viernes, nada de lo que haga Europa conducirá a precios más bajos y, en todo caso, hará que los precios suban mucho más, lo que sugiere que los planes «históricos» de Europa funcionan en teoría y colapsan en la práctica.

Ucrania se desliza hacia una guerra real

Aunque las fuerzas rusas hayan estabilizado el frente y están ganando batallas en el Donbass, ahora, de facto, existe un estado de guerra entre Rusia y la OTAN

Una característica recurrente de la Guerra Fría fue que EEUU siempre le dio mucha importancia a la publicidad mientras que Moscú siempre optó por concentrarse en el resultado final.

La Crisis de los Misiles en Cuba es el ejemplo más conocido en el que el desenlace fue publicitado como un abandono del despliegue soviético de misiles en Cuba y un acuerdo para que EEUU no invadiera la isla. Lo que medios occidentales han ocultado, y lo que más le dolió al imperialismo, es que también se acordó el desmantelamiento de todos los misiles balísticos Júpiter que EEUU habían desplegado en Turquía, cerca de la frontera soviética.

El patrón de comportamiento sigue siendo el mismo en Ucrania. Según la narrativa occidental, Rusia está a punto de ser “derrotada” en la región de Járkov. Curiosamente, en los círculos oficiales de Washington, existe una abierta reticencia a tocar los tambores del triunfo, presumiblemente por que las fuerzas ucranianas solamente han vuelto a ocupar áreas que los rusos habían planeado evacuar de antemano.

Moscú vuelve a dejar la propaganda de guerra casi en su totalidad a manos de los periodistas occidentales, mientras el Kremlin se concentra en el resultado final, con tres dimensiones conocidas: una, completar la evacuación desde la dirección Balakleysko-Izyum sin pérdida de vidas; dos, atacar a las fuerzas ucranianas que abandonaron sus posiciones bien fortificadas para dedicarse a desplazamientos en campo abierto en la región de Járkov; y, tres concentrarse en la operación en Donetsk.

Este última aspecto se está volviendo muy sensible para Moscú, ya que una parte importante de los «corresponsales de guerra» rusos (que no se muevgen de Moscú) publicaron informes que parecen un apocalipsis. Incluso políticos como Gennady Zyuganov, secretario general del Partido Comunista –una voz poderosa en la Duma estatal- están preocupados.

Zyuganov declaró en la primera reunión plenaria de otoño de la Duma estatal que la «operación especial» se ha convertido en una guerra en toda regla y que la situación en el frente ha «cambiado drásticamente».

En un fragmento de su discurso, publicado en la web del Partido Comunista, Zyuganov explica: “toda guerra requiere una respuesta. En primer lugar, requiere la máxima movilización de fuerzas y recursos. Exige cohesión social y una priorización clara”.

Aunque pretende ser una crítica constructiva, la opinión de Zyuganov seguramente será pasada por alto por el Kremlin. El portavoz de la presidencia, Dmitri Peskov, se apresuró a responder: “En este momento, una movilización total o parcial no está en la agenda”.

La base de apoyo del presidente Putin sigue siendo sólida. Las recientes elecciones regionales y locales rusas se convirtieron en un “referéndum” sobre la situación de Ucrania. Y el hecho de que el partido gobernante obtuviera uno de los mejores resultados de su historia al ganar alrededor del 80 por ciento de los curules demuestra un voto de confianza al liderazgo de Putin.

Dicho esto, los “patriotas enojados” suponen un quebradero de cabeza para el Kremlin. Por eso la situación en torno a la región de Bakhmut en Donetsk adquiere una importancia particular. Bakhmut es el eje de toda la fortificación militar que Kiev erigió en Donbass en los últimos 8 años. Es un cruce de comunicación estratégica con carreteras en muchas direcciones (Lysychansk, Horlivka, Kostiantynivka y Kramatorsk) y el control de la ciudad es vital para establecer la supremacía total sobre la región de Donetsk.

Las tropas rusas y las milicias de Donetsk y Lugansk habían estado intentando desde el 3 de agosto penetrar las defensas ucranianas en dirección a Bakhmut-Soledar, con un éxito muy irregular. Ahora llegan informes de que los rusos han entrado en la ciudad de Bakhmut y han tomado el control de la zona industrial en la parte noreste. Algunos de estos informes dicen que las fuerzas rusas conocidas como el Grupo Wagner se han desplegado en Bakhmut. Se trata de ex militares altamente capacitados.

Las apuestas son extremadamente altas. Para Kiev, toda la logística de las operaciones en Donetsk puede desmoronarse si pierden el control de Bakhmut. En cuanto a los rusos, el avance en esa dirección despejará el principal obstáculo para una ofensiva decisiva hacia el eje Slavyansk-Kramatorsk al oeste, el último conglomerado de fuerzas ucranianas en Donetsk (Bakhmut está a solo 50 km de Slavyansk-Kramatorsk).

¿Que piensa el Pentágono?

Hablando sobre la “contraofensiva” ucraniana el pasado fin de semana, el general Mark Milley, presidente de los Jefes de Estado Mayor estadounidenses, expreso algunas opiniones muy sugestivas:

– Ucrania ha acumulado una gran cantidad de poder de combate. Cómo lo usen ahora será el factor determinante. Las cosas se aclararán “en los próximos días y semanas”.

– El ejército ucraniano hasta ahora ha luchado extraordinariamente bien en la línea de defensa.

– Ahora Ucrania se está moviendo hacia operaciones ofensivas donde es fundamental integrar el poder de fuego en las maniobras para lograr la superioridad.

– Por tanto, “está por ver” qué ocurre en las próximas semanas. “Es una tarea muy, muy difícil la que han emprendido los ucranianos”, al iniciar una ofensiva combinada con guerra de maniobras.

La ofensiva ucraniana en Kharkov fue planeada como un ataque para rodear y destruir las agrupaciones rusas en el área de Balakleya, Kupyansk e Izyum. Pero el comando ruso se anticipó a este intento, reduciendo su agrupación militar en esta línea del frente. Por eso el número de fuerzas ucranianas superó a las rusas casi 8 veces.

Tambien, en previsión de la ofensiva ucraniana, los civiles fueron evacuados en convoyes militares. Usando tácticas de defensa móvil al amparo de unidades especialmente organizadas, los rusos finalmente lograron replegar todas sus unidades militares.

En efecto, el plan de EEUU y la OTAN en la región de Kharkov de rodear a las tropas rusas se vio frustrado. Los rusos tuvieron pérdidas mínimas. Por su parte el alto mando ucraniano ha admitido que los rusos infligieron importantes pérdidas a sus tropas (una gran parte de estas son mercenarios pertenecientes a países de la OTAN).

Pero el ejército ruso también cometió errores. Inexplicablemente sus posiciones avanzadas no fueron defendidas con minas; la recopilación de inteligencia de primera línea fue deficiente; y las tropas rusas residuales (reducidas a un tercio de la fuerza total) no estaban equipadas con suficientes armas antitanque.

El resultado de los últimos acontecimientos es que el conflicto está asumiendo la naturaleza de una guerra en toda regla. Zyuganov no se equivocó cuando habló ante la Duma:

“La operación político-militar… se ha convertido en una guerra en toda regla. Ha sido declarada contra nosotros por los estadounidenses, la OTAN y la Unión Europea. Una guerra es fundamentalmente diferente de una operación especial. Una operación especial es algo que anuncias y algo que puedes elegir cuando ponerle fin. Una guerra es algo que no puedes detener aunque quieras. Tienes que luchar hasta el final. La guerra tiene dos resultados posibles: victoria o derrota”.

Llegó el momento que Putin debe tomar una decisión. Porque, aunque las fuerzas rusas hayan estabilizado el frente y se estén transfiriendo reservas al campo de batalla, ahora, de facto, existe un estado de guerra entre Rusia y la OTAN.

Las recientes llamadas telefónicas a Putin, en rápida sucesión, por parte del presidente francés Emmanuel Macron y el canciller alemán Olaf Scholz , después de un intervalo de meses, indican que puede haber surgido una necesidad de volver a atraer al líder del Kremlin.

OTAN admite que sus reservas de armamento se están agotando

Secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en una conferencia de prensa en Bruselas, Bélgica, 9 de septiembre de 2022. (Foto: Getty Iamges)

La OTAN advirtió de que ya se está quedando sin reservas de armas por el continuo suministro de asistencia militar a Ucrania.

El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jens Stoltenberg, reconoció el jueves que el masivo envío de armas a Ucrania para ayudar al país eslavo a luchar contra el Ejército ruso hace que las propias reservas militares del bloque “se estén agotando”.

En declaraciones ofrecidas durante una entrevista con CNN, el funcionario hizo hincapié en que ahora la tarea prioritaria consiste en reponer estas reservas.

De hecho, según informó Stoltenberg, la Alianza militar trabajará con la industria de defensa “para aumentar la producción, para producir más municiones y armas”.

Se acerca un invierno duro

Por otro lado, el político europeo destacó que la OTAN debe “movilizar más apoyo para mantener las sanciones” y prepararse para un invierno que será “muy duro y difícil”.

En esta misma línea, resaltó la importancia de proporcionar a las tropas ucranianas “equipos de invierno, uniformes de invierno, tiendas de campaña, generadores para que puedan ser capaces de operar” durante toda la temporada de frío.

Esto mientras que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, sigue exigiendo la entrega de más armas por parte de sus aliados occidentales. “Nuestro Ejército necesita un suministro sistemático de los tipos de armas necesarios”, ha dicho esta semana.

Desde otro ángulo, mientras EE.UU. también autoriza nuevos paquetes de asistencia militar a ese país europeo, en el mes de mayo, el presidente estadounidense, Joe Biden, había admitido que “ha proporcionado una histórica cantidad de asistencia de seguridad a Ucrania” y “casi ha agotado” los fondos que se puede utilizar para este fin.

A su vez, Rusia denuncia la entrega de armas occidentales a Kiev, y advierte que podrían caer en manos de los terroristas y arriesgar la vida de los civiles a lo largo del conflicto.

Es más, Moscú ha dejado claro que cualquier vehículo de la OTAN que transporta armas será considerado como un “blanco legítimo” para el Ejército ruso.

Venezuela está lista para exportar petróleo y gas a EEUU y Europa

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, durante una reunión en Caracas, 14 de septiembre de 2022. (Foto: Getty images)

Venezuela manifiesta su disposición a exportar su petróleo y gas a EE.UU. y a los países europeos que se están viendo azotados por una grave crisis energética.

“Lo hemos dicho, lo hemos ratificado a todos los diplomáticos: Venezuela está lista y preparada para cumplir su papel para abastecer con el petróleo y el gas que necesita la economía mundial, de manera estable y segura”, aseguró el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, durante una reunión mantenida el miércoles con el secretario general de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Haitham al-Ghais.

El mandatario venezolano indicó que su Gobierno viene “recuperando sustancialmente” la industria petrolera. “Hoy ronda los 700 000 barriles diarios”, remarcó Maduro para luego recordar que en 2002 se llegó a la cifra de 2,3 millones de barriles por día.

Asimismo, abogó por “un precio justo, equilibrado, ya asimilado” de 100 dólares el barril y reiteró su llamado a petroleras extranjeras para producir en Venezuela.

 

En este sentido, aseguró que su país está listo para elevar de manera progresiva y acelerada la producción petrolera, para ampliar y elevar la producción de productos refinados.

El jefe de Estado puntualizó que el país suramericano tiene un portafolio de más de 50 proyectos gasíferos de primer nivel con los estudios de sísmica hechos y con todas las garantías jurídicas para que los inversionistas internacionales vengan a producir gas en Venezuela y llevar el gas a los mercados internacionales.

Estas declaraciones se producen mientras crecen las discrepancias entre los líderes en Europa que alertan sobre las consecuencias de la crisis en el continente, especialmente en vista de la alta inflación en la eurozona y las dificultades energéticas ante el recorte de los suministros gasísticos rusos.

Bruselas espera recaudar 140.000 millones con su nuevo tope a los súper beneficios de las energéticas

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, participa en el Parlamento Europeo en el debate sobre el Estado de la Unión tras aprobar una propuesta que prevé recortar un 5% el consumo de luz en horas punta, limitar los ingresos de las renovables y una tasa del 33% a los súper beneficios de las industrias fósiles

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y la esposa del presidente de Ucrania, Olena Zelenska, en Estrasburgo, el 14 de septiembre de 2022.La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y la esposa del presidente de Ucrania, Olena Zelenska, en Estrasburgo, el 14 de septiembre de 2022. Eric Vidal / Parlamento Europeo

Lo que para el PP es propio del “comunismo más bilioso del siglo XX”, para la Comisión Europea es el camino para encarar una crisis energética sin precedentes, agravada por los cortes de gas por parte de Rusia como reacción al apoyo de la UE a la Ucrania invadida. Este miércoles la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen (alemana de la CDU, miembro del PP europeo), ha avanzado algunos datos de sus propuestas para afrontar el duro invierno en el debate del Estado de la Unión, en el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo. Según Von der Leyen, el nuevo tope europeo sobre los beneficios extraordinarios de las energéticas –incluido el límite al precio de renovables y la nueva tasa a las industrias fósiles– permitirá recaudar “140.000 millones de euros”.

En realidad son 142.000 millones anuales: 117.000 provenientes del tope al precio de las industrias inframarginales –renovables, nuclear– de 180 euros megavatio/hora; y 25.000 del impuesto de al menos el 33% a los beneficios extraordinarios de las industrias fósiles.

“Se nos está poniendo a prueba”, ha dicho la presidenta de la Comisión Europea: “Es una guerra contra nuestra energía, nuestra economía, valores, nuestro futuro. Se trata de la autocracia contra la democracia, y estoy convencida de que con el valor y la solidaridad necesarios, Putin fracasará y Europa y Ucrania vencerán”.

La propia presidenta de la Comisión Europea ha anunciado en el pleno que este miércoles viajará a Kiev para reunirse con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. Será la segunda vez que viaje a Ucrania desde el inicio de la invasión rusa –la primera fue el 8 de abril–. Von der Leyen tiene previsto debatir con Zelenski sobre los avances en el mercado único europeo para Ucrania, tras anunciar la extensión del roaming a este país. En la grada, está la esposa del presidente, Olena Zelenska, con quien viajará desde Estrasburgo.

“En el mes de marzo logramos conectar Ucrania a nuestra red eléctrica”, ha dicho Von der Leyen: “Se trataba de una iniciativa prevista para 2024, pero la llevamos a cabo en dos semanas. Y, en estos momentos, Ucrania nos exporta electricidad. Quiero ampliar significativamente este comercio que redunda en beneficio mutuo. Ya hemos suspendido los derechos de importación que se aplicaban a las exportaciones ucranianas a la UE. Integraremos a Ucrania en nuestro amplio espacio europeo de itinerancia gratuita. Nuestros corredores solidarios están siendo un gran éxito. Apoyándose en todos esos logros, la Comisión trabajará junto con Ucrania para asegurar el acceso sin trabas de este país al mercado único, y viceversa. Nuestro mercado único es uno de los grandes logros de Europa. Ha llegado el momento de que también lo sea para nuestros amigos ucranianos. Por ese motivo, hoy mismo viajaré a Kiev para tratar detalladamente de esta cuestión con el presidente Zelenski”.

La presidenta de la Comisión había viajado a la capital ucraniana ya el pasado 8 de abril junto al alto representante de la Unión Europea para los Asuntos Exteriores, Josep Borrell, cuando se había cumplido un mes y medio del inicio de la invasión y la UE acababa de aprobar el quinto paquete de sanciones a Moscú para vetar las compras de carbón ruso a partir del pasado mes de agosto.

“Quiero dejarlo muy claro: no vamos a levantar las sanciones”, ha dicho este miércoles Von der Leyen: “Es el momento de mantenernos firmes y no de hacer política de apaciguamiento. Lo mismo puede decirse de nuestra ayuda financiera a Ucrania. Hasta la fecha, el Equipo Europa ha aportado más de 19 000 millones de euros en asistencia financiera. Y eso, sin contar nuestra ayuda militar. El nuestro es un apoyo a largo plazo”.

Las propuestas aprobadas en el colegio de comisarios en un contexto de datos récord de inflación y sombras de recesión mientras el BCE arriesga asfixiar la economía con subidas de tipos sin precedentes, consisten, según ha ido circulando, en: que los países de la UE reduzcan su consumo medio de electricidad un 10% y que ese ahorro sea de al menos un 5% en horas punta; limitar los ingresos de las compañías eléctricas, fijando un tope en el mercado eléctrico de 180 euros el megavatio/hora para la generación de origen renovable, nuclear y con lignito –menos de los 200 euros que circularon en borradores hace una semana–; y fijar una tasa del 33% a los beneficios extraordinarios de compañías de combustibles fósiles (petróleo, gas, carbón y sector de la refinería), que están engordando gracias a los elevados precios del gas.

Eso sí, la Comisión Europea reconoce que necesita más tiempo para otras dos medidas para las que los ministros de Energía de la UE han pedido orientación: poner un tope al precio del gas y aumentar la liquidez de los mercados financieros de futuros de la energía.

A partir de aquí, se abre un periodo de negociación con los 27 para llegar a un acuerdo en la reunión extraordinaria de ministros de Energía convocada para el 30 de septiembre en Bruselas.

“Tenemos que acabar con la dependencia”, ha dicho Von der Leyen en el Parlamento Europeo: “Estamos en el 83% de almacenamiento, pero no basta. Hay que diversificar, apartarnos de Rusia y buscar socios más fiables, como EEUU, Nigeria y Noruega. El año pasado, el gas ruso que llegaba a la UE suponía el 40%; hoy ha caído al 9%.  Pero Rusia sigue manipulando nuestro mercado, prefieren quemar el gas en lugar de cumplir los contratos”.

Según Von der Leyen, “este mercado no está funcionando. Ha dejado de funcionar. Además, la crisis climática tiene un precio en nuestras facturas, la sequía ha afectado a las plantas hidroeléctricas y es diez veces más cara la luz. Está generando ansiedad a millones de empresas y familias. Quiero que nuestra Unión tome ejemplo y reducir la demanda en horas punta para que el suministro dure más. Por esta razón, los Estados miembros están presentando medidas para reducir el consumo de electricidad Hace falta un apoyo específico para las pymes, y para quienes no pueden pagar las facturas, por eso proponemos un tope de los beneficios nunca imaginados. En estos momentos no está bien recibir beneficios de la guerra y que paguen el pato los consumidores”.

“Los beneficios deben compartirse y canalizarse hacia quienes más los necesitan” ha dicho la presidenta de la Comisión Europea: “Nuestra propuesta recaudará más de 140.000 millones de euros que permitirán a los Estados miembros amortiguar el golpe de manera directa. Y debido a que estamos inmersos en una crisis de combustibles fósiles, la industria de los combustibles fósiles también tiene una obligación especial. Las grandes empresas de petróleo, gas y carbón también están obteniendo enormes beneficios. Y por eso tienen que pagar una parte equitativa: tienen que aportar una contribución contra la crisis. Todas estas son medidas de emergencia y temporales en las que estamos trabajando, incluido el debate sobre la limitación de precios. Es necesario que sigamos trabajando para reducir los precios del gas. Tenemos que garantizar la seguridad del suministro y, a la vez, nuestra competitividad a escala mundial”.

Von der Leyen ha añadido: “Al tiempo que nos enfrentamos a esta crisis urgente, también debemos mirar hacia el futuro. La configuración actual del mercado de la electricidad, basada en el orden de mérito, ha dejado de ser justa para los consumidores. Estos deberían aprovechar los beneficios de las energías renovables de bajo coste. Por lo tanto, tenemos que desligar la influencia dominante del gas sobre el precio de la electricidad. Para ello, llevaremos a cabo una reforma profunda e integral del mercado de la electricidad”.

“Queremos que los precios del gas se mantengan bajos, garantizando los precios de la energía y la competencia. Pero si es demasiado cara, daña nuestra competitividad”, dice Von der Leyen, quien ha reconocido que “el mercado del gas ha cambiado totalmente. Cada vez más hay gas licuado. Pero ese mercado no se ha adaptado, y queremos ir a un patrón más representativo para reflejar esos cambios. Y al mismo tiempo, las empresas energéticas tienen problemas de liquidez, por lo que vamos a trabajar con reguladores del mercado para limitar la volatilidad de precios cotidianos, enmendando el marco de ayudas estatales en octubre. No es fácil, pero son los primeros pasos”.

Nuevas normas fiscales

La UE lleva con las normas fiscales –deuda y déficit– suspendidas desde el inicio de la pandemia para dar vía libre al gasto público. Pero también se ha embarcado en el proceso de reformarlas, por su complejidad para ser aplicadas y su rigidez. En este contexto, la presidenta de la Comisión Europea ha dicho: “Necesitamos unas normas presupuestarias que permitan la inversión estratégica y que salvaguarden, al mismo tiempo, la sostenibilidad presupuestaria. En octubre presentaremos nuevas ideas para nuestra gobernanza económica. Los Estados miembros deben tener más flexibilidad en sus sendas de reducción de la deuda. Sin embargo, debe existir una mayor responsabilidad en cuanto al cumplimiento de lo que se haya acordado. Deben establecerse normas más sencillas que todos puedan seguir. Para abrir el espacio a la inversión estratégica y otorgar a los mercados financieros la confianza que necesitan. La estabilidad y el crecimiento solo pueden ir de la mano”.

“El PP normaliza la entrada de la extrema derecha en las instituciones”

La presidenta de los socialistas europeos en la Eurocámara, Iratxe García, ha afirmado: “Las crisis ponen de manifiesto nuestras debilidades, pero también dónde tenemos que incidir. Nuestro compromiso con el pueblo ucraniano es firme, pero para asegurarnos el apoyo de la ciudadanía, hay que ponerse en la piel de quienes están sufriendo las consecuencias de la guerra. De la misma manera que fuimos socios leales en la pandemia, lo seremos ahora para evitar una recesión. Vamos tarde, pero me alegro que ya se escuche lo que decíamos: poner un tope al precio del gas, y eso podemos hacerlo con una parte de los beneficios extraordinarios. Me preocupa la extrema derecha, hay que actuar en la defensa del Estado de Derecho. Me da tristeza decirlo, pero el estado de la democracia es tan frágil como nuestra economía. Vuelven fantasmas superados, hay partidos profascistas que pueden ganar elecciones. Señor Weber, les hago un llamamiento para que reconsideren su papel, el mejor patriotismo es la unión europea, no el nacionalismo excluyente. Están normalizando la entrada de la extrema derecha en las instituciones, espero que rectifiquen porque tenemos una responsabilidad compartida”.

La portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat, ha defendido, por su parte: “Europa se mantendrá firme como una roca en defensa de la libertad de Ucrania, porque la causa de Ucrania es hoy la causa de Europa. El coraje, la resistencia y la valentía del pueblo ucraniano, que son el mejor símbolo de la justicia de su causa. Hace unos días Putin enterró sin honores en Moscú al presidente Gorbachov, la historia recordará a Gorbachov y condenará a Putin”.

La portavoz popular ha afirmado que “en estos tiempos difíciles Europa tiene muchos desafíos”, y ha pedido “luchar sin descanso contra la inflación, que es el impuesto más injusto para las familias, y aumentar la autonomía energética europea, para que la factura de esta crisis no la paguen los ciudadanos”. .

El portavoz de Ciudadanos, Adrián Vázquez, ha sostenido: “No es un debate de la Unión más. Necesitamos más que nunca coraje, solidaridad y resistencia. Seamos conscientes de que este invierno va a durar mucho, y necesitamos soluciones a medio y largo plazo, como la construcción de infraestructuras, una moratoria nuclear que nos permita transitar a los objetivos verdes”.

El ex president catalán Carles Puigdemont también ha participado en el debate: “Ha recordado al ex presidente David Sassoli, que pedía renovar la democracia. Usted ha recordado que la democracia no tiene que espiar a políticos y activistas, cosa que está pasando en España. El 61% de las sentencias del TEDH no se respetan en España y los comisarios europeos se fotografían con la extrema derecha [el vicepresidente Margaritis Schinas recibióo a Vox] y rechazan reunirse con eurodiputados espiados que han recibido un millón de votos”.

La eurodiputada de la France Insoumise, Manon Aubry, copresidenta de La Izquierda (el grupo de UP), ha señalado, por su parte: “Los parches no serán suficientes. Los precios deben congelarse en los niveles previos a la crisis, porque la energía es un bien común. Como el agua, la salud, la naturaleza y todo lo que necesitamos para vivir. Nuestro planeta se está quemando. Se les dice a los ciudadanos que apaguen su wifi. Pero también podría pedirnos que vaciemos el mar con una cuchara si insiste en importar al mismo tiempo leche y carne de Nueva Zelanda, literalmente a más de 19.000 km de distancia. Este es, de hecho, el corazón del problema, todas las crisis que estamos pasando le obligan a cambiar de rumbo provisionalmente, pero es la misma historia que con la pandemia. Nos dijo entonces que había entendido la lección, pero luego volvió a lo de siempre”.

Aubry ha añadido: “Ante el fracaso de este modelo, se está abriendo la puerta a un bloqueo, temporal, por supuesto, de los ingresos de las empresas energéticas. Excepto que con el umbral previsto las multinacionales se quedarán con márgenes enormes. ¿Cuántas crisis más necesitará para sacar verdaderamente las consecuencias de tus fracasos? Ya no nos queda tiempo que esperar”.

Bruselas aboga por un impuesto a las eléctricas y un ahorro energético obligatorio

Von der Leyen anuncia una tarifa para reducir los beneficios extraordinarios de las compañías fósiles y un tope a las renovables. Asegura que ambas recaudarán 140.000 millones de euros. Los populares europeos se muestran a favor de los gravámenes.

La presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen en una reunión, a 22 de junio de 2022, en Bruselas, Bélgica.
La presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen en una reunión, a 22 de junio de 2022, en Bruselas, Bélgica.  Dati Bendo / European Commission / d / DPA / EUROPA PRESS

Según adelantan ya medios como la agencia Bloomberg, los planes de la Comisión pasan por gravar un 33% los beneficios extraordinarios de las compañías fósiles y redirigir esa ganancia a los consumidores; poner un tope de 180 euros el megawatio hora a las industrias inframarginales, es decir renovables y nucleares; y un ahorro obligatorio del 5% del consumo energético en las horas punta. La mayoría de capitales son reacias a medidas imperativas y se declinan por planes voluntarios, como el que rige en la actualidad sobre el ahorro de gas en un 15%.

«Los beneficios de las empresas energéticas están bien, son buenos, pero esos ingresos récord, con los que nunca soñaron, que se benefician de la guerra y del esfuerzo de los consumidores, deben ser compartidos y redirigidos a quienes más los necesitan», ha asegurado la alemana desde el Pleno de Estrasburgo. Bruselas calcula que estos topes ayudarán a recaudar 140.000 millones de euros. El enigma ahora es conseguir el consenso entre los 27 Estados miembros y fijar los detalles de cómo ejecutar la medida y establecer los beneficiarios.

En uno de los discursos sobre el estado sobre el estado de la Unión más esperado, Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ha detallado estas cardinales de la brújula estratégica de la UE para hacer frente a uno de los inviernos más inciertos de las últimas décadas. La concreción de las medidas energéticas era uno de los anuncios más esperados del discurso de la alemana en Von der Leyen. El precio del gas cuesta ya diez veces más que hace un año. «Llegar a final de mes generando ansiedad a millones de familias e industrias dentro de la UE», ha asegurado.

Manfred Weber, líder del Partido Popular Europeo, ha apoyado el plan de acción energético propuesto por su compañera de filas, la también conservadora Von der Leyen. Entretanto, hace unos días, el líder del Partido Popular español, Alberto Núñez-Feijóo, calificó los impuestos del Gobierno de Pedro Sánchez a la banca y a las energéticas como unas medidas que «no encajan en un país de la UE». «No es justo que mientras muchos estén teniendo dificultades para llegar a fin de mes, otros se estén haciendo millonarios a costa del sufrimiento de las familias», ha asegurado Iratxe García Pérez, líder socialdemócrata en la Eurocámara.

La presidenta del PP europeo aboga ya por acometer una reforma del mercado eléctrico

La presidenta del Partido Popular Europeo aboga ya por acometer una reforma del mercado eléctrico en profundidad y por desacoplar el precio del gas de la factura de final de la electricidad. Son medidas que España lleva desde hace un año pidiendo en la capital comunitaria, pero ha tenido que llegar una guerra para que el resto de socios europeos asuman que el sistema energético, tal y como está concebido, no funciona.

Ahora son las capitales europeas las que recogen este testigo. Los 27 ministros de Energía se reunirán el 30 de septiembre en un Consejo extraordinario para debatir y, si llegan a un consenso, aprobar estas medidas. El debate se anticipa caliente porque no todas están dispuestas a gravar las compañías. Especialmente reticente es Polonia. Y tampoco genera mucha simpatía el ahorro vinculante. La Comisión Europea ha postergado, además, la propuesta para imponer un tope al gas. Una medida mucho más compleja desde el punto de vista de la unidad y a nivel de consecuencias.

La Base #2×02 – Contraofensiva ucraniana: ¿cambio en la guerra?

Pablo Iglesias, Sara Serrano, Manu Levin e Inna Afinogenova analizan la contraofensiva del ejército ucraniano frente a las tropas rusas, sus implicaciones militares, políticas, económicas y en la opinión pública en Europa y en Rusia, y cómo lo están narrando los medios occidentales y los medios rusos. Con la participación de Alejandro López, coordinador de ‘Descifrando la Guerra’.

“Rusia no ve perspectivas de reanudar diálogos de paz con Ucrania”

El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en una rueda de prensa en Sochi, Rusia. (Foto: Reuters)

Kremlin afirma que no ve perspectivas de reanudar diálogos de paz con Ucrania mientras asegura de que su operativo militar continuará hasta lograr sus objetivos.

“No vemos ninguna perspectiva de negociación (con Ucrania) en este momento y aún afirmamos la ausencia de requisitos previos para tales negociaciones”, ha indicado este lunes el vocero de la presidencia rusa, Dimitri Peskov, durante una rueda de prensa en Moscú, la capital.

Al respecto, el Ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, indicó la víspera, en una entrevista con el canal de televisión Rossiya-1, que Moscú no se niega a negociar con Kiev, “no renunciamos a las negociaciones. Quienes sí lo hacen, deben entender que, a medida que van dilatando ese proceso, más difícil será alcanzar un acuerdo”, dijo.

En otra parte de sus declaraciones, el portavoz ruso se ha referido a la situación en torno el centro nuclear de Zaporiyia, asegurando que el país euroasiático no planea retirar sus tropas del área.

“Ahora estamos hablando de lo principal, obligar a la parte ucraniana a detener el bárbaro bombardeo de objetos en el territorio de la planta, que está plagado de consecuencias muy tristes y catastróficas”, ha subrayado.

 

A continuación, Peskov ha vuelto de decir que la operación militar especial rusa en el territorio ucraniano continuará hasta que se logren todos los objetivos que se establecieron originalmente.

En este contexto, el diplomático ha firmado que el presidente ruso, Vladimir Putin, está en contacto constante con los jefes militares sobre la situación en Ucrania, y que se le informa cualquier acción.

Moscú y Kiev celebraron varias rondas de negociaciones para lograr un acuerdo que ponga fin a la operación rusa. La última tuvo lugar el 29 de marzo en la ccapital turca, Estambul, sin llegar a un acuerdo.