La pastora ultraconservadora que «sana» la homosexualidad colabora con el PP desde hace varios años

Yadira Maestre, líder de una iglesia evangélica que promete milagros de todo tipo, ha mantenido varios encuentros con miembros del PP desde al menos 2017. La pastora llegó a participar en un acto organizado por el ‘lobby’ que dirige Aznar.

Yadira Maestre con Aznar y Botella

La pastora ultraconservadora Yadira Maestre junto al expresidente José María Aznar y su esposa, Ana Botella, en una fotografía de junio de 2017.  FACEBOOK YADIRA MAESTRE

Un día quitaba el demonio del cuerpo, otro día se fotografiaba con José María Aznar. La pastora evangélica Yadira Maestre, cuya organización religiosa ultraconservadora promete «sanar» la homosexualidad, lleva varios años codeándose con dirigentes del Partido Popular (PP). Los antecedentes de su iglesia evangélica, adherida a postulados ultraconservadores y homófobos, han sido pasados por alto por los populares.

La invitación a Maestre para participar en el acto «hispano» que el PP celebró el  pasado sábado en Madrid –y que ha provocado una mezcla de asombro y críticas en el ámbito político– ha estado precedida por un largo intercambio de apoyos y guiños entre la dirigencia popular y esta pastora ultraconservadora.

30 de marzo de 2017. El entonces vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo  Casado, recibía por primera vez a Maestre y a su marido, el también líder evangélico Florentino Barceló. Ambos llevaban ya varios años al frente del Centro Apostólico Cristo Viene, una organización con sede en el barrio de Usera que fue apadrinada desde Miami por el telepredicador Guillermo Maldonado.

Entre los testimonios de «curaciones» realizados por Maldonado en EEUU figuran hombres que, según relatan, dejaron de ser homosexuales gracias a la intermediación divina. En España, Maestre y Barceló organizan talleres contra la «inmoralidad sexual», donde se busca «liberar» y «sanar» a quienes mantienen relaciones con personas del mismo sexo «o con animales».

En aquella primera reunión con Casado estuvo también presente el responsable del PP en Ecuador, Raúl Samper. «Oré por ellos y por las futuras elecciones presidenciales de Ecuador», señaló la pastora en un mensaje publicado en su cuenta de Facebook luego del encuentro.

Bendiciones a Rajoy

En mayo de ese mismo año, Maestre mostraba su alegría por el encuentro que Maldonado había mantenido en EEUU con el presidente Donald Trump. «Nuestros pastores también honran y bendicen la vida de nuestro presidente Mariano Rajoy y la nación de España, de igual manera bendecimos la vida del portavoz de comunicación del Partido Popular, el señor Pablo Casado«, escribió entonces.

Yadira Maestre y Pablo Casado
La pastora ultraconservadora Yadira Maestre junto al entonces portavoz del PP, Pablo Casado, en una reunión mantenida en marzo de 2017.  FACEBOOK YADIRA MAESTRE

«Hasta ahora creía que estos grupos se ubicaban a la extrema derecha política, pero ahora estoy observando que, tristemente, han sido adoptados por el PP, que quiere contar con el movimiento evangélico fundamentalista porque considera que así sumará apoyo electoral», afirma a Público Juanjo Tamayo, director de la cátedra de Teología y Ciencias Sociales de la Universidad Carlos III de Madrid.

Este experto en fundamentalismos religiosos calificó como «grave» esta relación entre el PP y el ultraconservadurismo evangélico. «En América Latina estos vínculos entre la derecha, extrema derecha y movimientos evangélicos fundamentalistas han cambiado el mapa político y religioso», remarcó.

Las relaciones de la pastora Maestre y el Partido Popular fueron en aumento. El 6 de junio de 2017, la pastora ultraconservadora asistió a la cumbre organizada por el Instituto Atlántico de Gobierno que dirige José María Aznar. Allí se encontró también con el entonces empresario ecuatoriano Guillermo Lasso, ahora presidente de ese país latinoamericano.

En diciembre de 2018, la pastora fue invitada a la sede nacional del partido para participar en la celebración del 70 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948. Allí se encontró –entre otros– con el entonces presidente de Nuevas Generaciones, Diego Gago. «Nos ha prometido que visitará nuestra iglesia para conocer lo que hacemos para el señor», relató Maestre.

La pastora también estableció vínculos con varios dirigentes del PP en la Comunidad de Madrid, entre los que se encuentran principalmente el ahora secretario de Nuevos Madrileños en la dirección autonómica de dicho partido, Gustavo Eustache, quien incluso se prestó a grabar un video en el que animaba a asistir a un evento de la iglesia que  dirige Maestre.

Coincidencias

En esa línea, Tamayo observa «coincidencias» entre los populares y estos grupos evangélicos ultraconservadores en asuntos como «el origen y el final de la vida o los modelos de familia». «Los programas del PP en estos temas coinciden con los mantras de estas organizaciones», apunta el experto.

El rechazo del feminismo es otro punto en el que, según destaca el teólogo, populares y ultraconservadores evangélicos coinciden. «Ese odio supone todo lo contrario a los valores del cristianismo», remarcó Tamayo.

Mientras tanto, las puertas del PP se siguieron abriendo para la telepredicadora: en diciembre de 2021, esta mujer relató que había bendecido en persona al alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida. Un año y medio después, en junio de 2021, la pastora asistió como invitada a la asamblea del PP de Fuencarral.

El Gobierno de Rajoy firmó un acuerdo con la pastora ultraconservadora para que presos limpiaran gratis su templo

 

De pastoras evangélicas a bailar ‘El Tiburón’: las imágenes más controvertidas del acto del PP para captar el voto latino

Por  

¿Mitin del Partido Popular o encuentro de la Iglesia evangélica? «Señor, bendice a nuestro alcalde; bendice a nuestra presidenta y bendice al señor Feijóo». Con estas palabras,  Yadira Maestre, pastora y fundadora de la Iglesia Cristo Viene de Usera, aparecía en el escenario de Europa es Hispania, un acto organizado por los populares para captar el voto de la comunidad latinoamericana.

Relacionada: Evangélicos: el nuevo reino terrenal de la ultraderecha en América Latina

«¡Bendecimos a España y a toda su gente!», concluía exaltada Maestre, que celebraba la llegada «gloriosa» de la Semana Santa.

 

 

Pero esto no acaba aquí, porque todavía hubo espacio para la música. A ritmo de El Tiburón, los líderes del PP se pegaron unos buenos bailoteos.

 

«Latinos ultraderechistas adoradores de Trump y Bolsonaro, evangelistas, fanáticos que se han instalado en Madrid y que utiliza el PP», alertan algunos usuarios en relación a las palabras de la pastora. Otros tuiteros, en cambio, se quedan con la imagen del baile: «Eso es lo que veo en mi parálisis del sueño».

 

 

 

 

 

 

 

A propósito de la intervención de la pastora, Daniel Bernabé ha compartido más imágenes de Maestre, donde carga, durante uno de sus sermones, contra las mujeres por pactar con el diablo: «Justo la moderación que una sociedad racional necesita», remarca el escritor.

 

 

¿Qué pensará el nacional-catolicismo español al ver esto? Quién sabe, a lo mejor a partir de ahora, vemos una escisión dentro del PP entre católicos y protestantes.

La Marea Blanca no se rinde en Madrid con miles de personas en la manifestación contra la gestión de Ayuso

Decenas de miles de personas han recorrido el centro de Madrid por una «sanidad madrileña pública, universal y de calidad» convocados por sindicatos, asociaciones vecinales y plataformas por la sanidad pública.

26/03/2023 Manifestación por la sanidad en Madrid

Cabecera de la manifestación convocada por diferentes organizaciones sanitarias de la Comunidad de Madrid en defensa de una sanidad pública, universal y de calidad, 26/03/2023.  Juan Carlos Hidalgo / EFE

Una semana después del acuerdo entre el sindicato médico AMYTS y la Consejería de Sanidad que puso fin a la huelga de médicos pese a no incluir la contratación de más profesionales, una nueva manifestación en defensa de una sanidad «pública, universal y de calidad» ha recorrido Madrid un domingo más.

Decenas de miles de personas han recorrido, más de 50.000 según los organizadores, las arterias centrales de la capital en un día plenamente primaveral, llamados por asociaciones en defensa de la sanidad pública, sindicatos y organizaciones vecinales y de consumidores.

Convocada en Plaza de España a las 12 horas y con destino Atocha, el comunicado conjunto reclama «apostar claramente por la Atención Primaria» con financiación y recursos, mantener todos los Servicios de Urgencias Extrahospitalarias, acabar con «las privatizaciones y externalizaciones encubiertas». Los organizadores, con esta marcha, protestan ante la ausencia de medios que afecta «a la correcta atención y salud de los y las pacientes» y «la sobrecarga de trabajo que el personal sanitario tiene que soportar».

«El estado de salud de la sanidad pública madrileña es mala. Las causas son la financiación más baja de España, que además gran parte de ese dinero se va a conciertos privados con ánimo de lucro, y unas grandes listas de espera interesadas para que acusan a la sanidad privada», ha agotado Carlos Castaño, médico de la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (AFEM).

El sanitario, traumatólogo en el Hospital Gregorio Marañón de la capital, considera un «maltrato profesional» a los profesionales de la salud por, entre otras causas, tener las guardias peor pagadas de España y no tener acceso a la jornada de 35 horas que sí disfrutan otros trabajadores públicos.

En su opinión, el acuerdo que puso fin a la huelga de Atención Primaria es un «éxito» pese a no solucionar todos los problemas que afectan a la base del sistema sanitario porque «limita las agendas y así mejora la atención a los pacientes». Para el presidente de AFEM, la subida salarial alcanzada «supone un incentivo para que los médicos que quieren hacer primaria no se vayan a otras comunidades. Esperemos que se cumpla».

Quique Villalobos, presidente de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) ha lanzado un mensaje a la presidenta regional Isabel Díaz Ayuso: «No vamos a desaparecer, hasta que recuperemos nuestro sistema público de sanidad«.

Desde el sureño y popular distrito de Villaverde ha venido Ángeles para defender la salud pública del «robo que está haciendo Ayuso no poniendo el dinero que tiene que poner. No hay médicos y no han reabierto las urgencias como dijo». El acuerdo de Atención Primaria «ya estaba prometido de antes, pero la situación sigue igual. Tengo una cita con el médico de cabecera para dentro de más de un mes».

La protesta ha contado con la asistencia de los secretarios generales de la Unión General de Trabajadores (UGT) y de Comisiones Obreras. También han participado los partidos de la oposición de izquierda PSOE, Más Madrid y Podemos, con la presencia de Juan Lobato, Mónica García, Alejandra Jacinto y Roberto Sotomayor.

La marcha se ha cerrado con la lectura de discursos finales en la Glorieta de Carlos V por parte del presentador El Gran Wyoming y la actriz Lola Manzanares: «Es necesario y urgente conseguir mayor financiación para la sanidad pública madrileña. Un año más vuelve a estar a la cola de las comunidades autónomas. En los presupuestos de 2023 la Comunidad de Madrid aumentó las inversiones en Sanidad. Es urgente mejorar las condiciones laborales del personal sanitario».

«El Gobierno del Partido Popular deja de lado a una población vulnerable cada vez más desamparada para que acudan a la sanidad privada. La sanidad pública es un obstáculo para el afán privatizador del PP madrileño. La ciudadanía junto a los profesionales sanitarios nos hemos unido para defender una sistema sanitario público, universal y de calidad», ha destacado la arenga de cierre.

Esta enésima protesta sanitaria madrileña ha sido precedida en Andalucía por las organizadas este sábado en las ochos provincias por la Coordinadora Andaluza de Mareas Blancas para parar la privatización sanitaria y reducir las listas de espera. El sábado hubo también movilización por la sanidad pública en Canarias.

Santos Cerdán: «Al PSOE nos gustaría un entendimiento entre Podemos y Sumar»

Ser secretario de organización de una fuerza política nunca es un cargo fácil. Desde el verano de 2021 el puesto en el PSOE lo ocupa Santos Cerdán (Milagro, Navarra, 1969). El dirigente navarro lleva cerca de Pedro Sánchez desde sus exitosas primarias de 2017. Él fue el encargado de llevar los avales a la sede de Ferraz, uno de los momentos icónicos en aquel proceso frente a Susana Díaz. Compagina las tareas orgánicas con su escaño en el Congreso y es el coordinador del Comité Electoral de los socialistas de cara a las municipales y autonómicas del 28 de mayo. Cerdán atiende a Público en una entrevista sobre la expectativas electorales del PSOE, el papel del PP de Alberto Núñez Feijóo, la situación a la izquierda de los socialistas y otras cuestiones de actualidad. Periodismo, investigación y compromiso para construir un mundo más igualitario.

‘La encrucijada mundial’. Conocido por ‘Coronel Baños’, su trabajo actual trata de comprender y explicar lo que acontece en el mundo, dentro de los campos de la geopolítica, la estrategia, la defensa, la seguridad, el terrorismo, la inteligencia y las relaciones internacionales.

Edición especial de este directo en el que conversaremos con el Coronel D. Pedro Baños. Entre otros temas trataremos su reciente libro ‘La encrucijada mundial’. Conocido por ‘Coronel Baños’, su trabajo actual trata de comprender y explicar lo que acontece en el mundo, dentro de los campos de la geopolítica, la estrategia, la defensa, la seguridad, el terrorismo, la inteligencia y las relaciones internacionales. El objetivo último no es otro que lograr, entre todos, un entendimiento mutuo para conseguir un planeta mejor, en el que no haya enfrentamientos ni imposiciones, sino una coexistencia pacífica que respete las diversas culturas, ideologías y formas de entender la vida, pensando siempre, y por encima de todo, en la seguridad humana, que debe ser la principal preocupación. Es Coronel del Ejército de Tierra (Infantería), perteneciente a la XL Promoción de la Academia General Militar, y Diplomado de Estado Mayor. Actualmente estoy en situación de reserva.

El envío de munición radiactiva británica a Ucrania preludia la inminente contraofensiva Rusa

Londres anuncia el envío a Ucrania de munición de uranio empobrecido que podría ser empleado en la esperada contraofensiva ucraniana y Moscú advierte de que tal paso empuja a Occidente y Rusia hacia una colisión nuclear.

Un militar con un sistema portátil de misiles antiaéreos en medio del ataque de Rusia a Ucrania, a 23 de marzo de 2023.

Un militar con un sistema portátil de misiles antiaéreos en medio del ataque de Rusia a Ucrania, a 23 de marzo de 2023.  Violeta Santos Moura / REUTERS

Vladímir Putin ha lanzado una advertencia sin tapujos: Occidente ha cruzado de nuevo la línea roja y está enviando a Ucrania munición con un «componente nuclear». Este eufemismo se refiere a la munición de uranio empobrecido, con una altísima capacidad de penetración de todo tipo de blindaje, que Gran Bretaña estaría ya despachando al ejército ucraniano. Rusia «se verá forzada a reaccionar», ha amenazado el presidente ruso.

El Kremlin no teme tanto la radiación que este tipo de proyectiles pueda causar entre sus soldados, como a su potencial destructivo. La alta densidad del uranio empobrecido en proyectiles refuerza su capacidad para atravesar el blindaje de cualquier tanque o abrirse paso a través del búnker más sólido. El uso de uranio empobrecido para reforzar las granadas de artillería, los proyectiles de los tanques y los cohetes lanzados por los cazas de combate estadounidenses y británicos ya fue denunciado en guerras como las de Irak o Kosovo, en la antigua Yugoslavia.

Esta semana, la ministra británica de Estado para la Defensa Annabel Goldie, anunció que parte de la munición de los carros de combate Challenger 2 que Gran Bretaña está entregando al ejército ucraniano disponen de proyectiles perforantes con uranio empobrecido.

El número dos de Interior con el PP presionó a jueces a través de policías de las cloacas para ser ministro

Los ‘whatsapps’ de Francisco Martínez demuestran que utilizó sus relaciones con comisarios de las cloacas del Estado para conseguir objetivos personales y presionar al juez que investigaba el caso del Pequeño Nicolás para que fuera archivado.

El secretario de estado de Seguridad, Francisco Martínez.

El ex secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez.

El 3 de noviembre de 2017 las detenciones de los comisarios José Manuel Villarejo y Carlos Salamanca en lo que sería el inicio de la macrocausa Tándem desencadenaba una tormenta política, policial, judicial y mediática que sigue creciendo a día de hoy y que no se sabe cómo ni cuándo va a terminar. Uno de los afectados, por su relación personal y profesional con Villarejo, es el ex secretario de Estado de Seguridad con el PP (2013-2016), Francisco Martínez, investigado en la pieza Kitchen.

Precisamente, en los mensajes de WhatsApp del ex número dos de Interior que se han incorporado al sumario de Kitchen se percibe la preocupación del político por las detenciones. Incluso llega a exteriorizar el nerviosismo con su esposa:

Esposa de Francisco Martínez: «Has visto lo de Villarejo?».
Francisco Martínez: «Estoy súper nervioso, amor».

Sin embargo, el futuro de Martínez había comenzado a escribirse exactamente un año antes. El 3 de noviembre de 2016, Mariano Rajoy anunció su nuevo Gobierno y eligió como nuevo ministro del Interior a Juan Ignacio Zoido, en sustitución de Jorge Fernández Díaz, lo que provocaría que Francisco Martínez quedara fuera de la Secretaría de Estado que había ocupado hasta entonces.

Este movimiento de Rajoy puso punto final a la carrera política de Martínez en el Ejecutivo, pero también supuso el cerrojazo a meses de estrategia para recolocarse dentro del partido y del organigrama del Gobierno. A pesar de sus planes y maniobras, el entonces secretario de Estado de Seguridad vio cómo durante el verano de 2016 se le escurrían entre los dedos la posibilidad de continuar en la estructura de Moncloa y su gran objetivo de llegar a ser ministro.

Toda esta estrategia se ve reflejada en los mensajes de WhatsApp que intercambió en aquella época con políticos y comisarios de las cloacas de Interior y en los apuntes de las famosas agendas de Villarejo.

Amigos de amigos para presionar a jueces

La bola de nieve que no parará de crecer y se llevará por delante a Francisco Martínez comienza a rodar el 20 de mayo de 2016. Ese día se envía a un juzgado de Madrid un informe sobre el caso Nicolás.

En concreto, al juzgado de Instrucción número 2 de Madrid, que presidía el juez Arturo Zamarriego. El documento es la «Propuesta de actuaciones» de la pieza de la grabación ilegal al CNI del caso del Pequeño Nicolás. Este informe solicitaba la detención de Villarejo y detallaba continuos contactos entre el secretario de Estado de Seguridad y el comisario.

En cuestión de horas, la información contenida en dicho documento protagoniza las preocupaciones de los colaboradores y socios de Villarejo. El 25 de mayo el comisario apunta en su guía de audios —las agendas— que el entonces todavía Director Adjunto Operativo (DAO) de la Policía Nacional, Eugenio Pino, «se temía lo peor en el Juzgado número dos».

Apunte de la agenda de José Manuel Villarejo en el que recoge la conversación con el DAO Eugenio Pino sobre que se temía lo peor en el Juzgado número 2
Apunte de la agenda de José Manuel Villarejo en el que recoge la conversación con el DAO Eugenio Pino sobre que se temía lo peor en el Juzgado número 2.

El informe lo firmaba el inspector Rubén Eladio López a las órdenes del comisario Marcelino Martín-Blas, jefe de Asuntos Internos. Ambos formaban parte junto a un equipo de siete policías de la Comisión Judicial que había creado el juez Zamarriego para proteger las investigaciones del caso de posibles maniobras e injerencias de las cúpulas de Interior y de la Policía Nacional.

Este documento se dio a conocer en los medios el 14 de junio, una semana antes de que a Martínez se le presentara por primera vez la posibilidad de optar al cargo de ministro. El 22 de junio, Público desvelaba los audios en los que se oye al entonces ministro del Interior Jorge Fernández Díaz conspirar contra rivales políticos del Partido Popular y, sobre todo, contra el independentismo catalán («la fiscalía te lo afina«). Esta información dejaba a Fernández Díaz en la puerta de salida del ministerio y la cartera casi vacante.

Pero la oportunidad llegaba en el peor momento. En esos días, Villarejo y sus colaboradores habían comenzado a retirar el apoyo a Martínez para presionarlo y conseguir el archivo del caso del Pequeño Nicolás y el nombramiento del comisario José Luis Olivera como nuevo DAO en sustitución de Pino, que se jubilaba.

Medios afines a Villarejo detallan la presencia del secretario de Estado en el informe de la Comisión Judicial y comienzan a torpedear su candidatura en las quinielas para sustituir a Fernández Díaz. Algunos medios fueron incluso más allá y avisaron veladamente de posibles nuevas informaciones acerca de la naturaleza de las actividades ejecutadas por Martínez en unión con el comisario.

En los whatsapps de Kitchen se observa cómo Martínez era consciente de que si quería que Rajoy lo nombrase ministro debía recuperar ese apoyo perdido. Pero también se aprecia la estrategia que pone en marcha para ello.

Sobre el asunto del nombramiento de un nuevo DAO, Martínez ganó tiempo con la designación provisional de Antonio Rodríguez y la convocatoria de un concurso de méritos para elegir al definitivo. Este concurso lo define su amigo el comisario Pedro Agudo en las conversaciones que ahora se conocen como «una orden histórica, la primera vez».

Sin embargo, en este tema Martínez sabe que no puede meter mano y que el ministro se lo ha dejado bien claro. Así, en el chat con Agudo es tajante y le comunica a su amigo que la decisión la va a tomar Fernández Díaz personalmente:

Francisco Martínez: «Pedro, lo nombra el Ministro [al DAO]. No tengas la menor duda. Nunca le he visto tan firme y empeñado en que este nombramiento lo hace él. Yo ni voy a opinar».

Martínez se coloca al margen en la elección del nuevo DAO, pero con el caso judicial de la grabación ilegal al CNI del caso del Pequeño Nicolás sí toma la iniciativa y se coordina con comisarios y políticos para presionar al juez del caso, Arturo Zamarriego, y a los investigadores.

Hasta ahora se conocían ataques y presiones policiales, mediáticas, jurídicas y políticas sobre los investigadores de los que ha ido informando Público desde 2015 y que se han confirmado posteriormente con audios. Por ejemplo, las presiones directas sobre los investigadores o la difusión de la falacia de que todo tiene causa en un «montaje» motivado por una supuesta «enemistad» hacia Villarejo.

Pero los whatsapps añaden presiones adicionales que no se conocían, como la ejercida el 21 de julio de 2016 por el DAO provisional Antonio Rodríguez sobre Martín-Blas, que resulta infructuosa.

Eugenio Pino: «Ayer, don Antonio Rodríguez estuvo reunido con Marcelino Martín Blas. (no hay pacto posible) de qué va esto».
Francisco Martínez: «Me lo ha contado todo hoy. No te preocupes».
EP: «¿Lo sabías tú?».
FM: «Me lo ha contado hoy. Al ministro también. Pásmate: ¡Marcelino fue a pedir más policías…! [para la Comisión Judicial]».
EP: «La entrevista fue a petición de Antonio y aprovechó el otro para pedir lo que le venga en gana».
FM: «Ya sabes cómo va a acabar Marcelino…».
EP: «Espero que en la cárcel».

El chat hace referencia a las continuas solicitudes por parte del comisario Martín-Blas y del juez Zamarriego de obtener personal, material y documentación para la investigación. Estas peticiones fueron denegadas y denunciadas como obstrucción a la Justicia.

Martínez, abogado de formación, tiene claro que lo primero de lo que hay que encargarse es de que se archive el caso. Así se lo expresa el 14 de junio de ese año al comisario García Castaño, el jefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO), la encargada del apoyo policial y judicial para el control de comunicaciones y para efectuar pinchazos.

Enrique García Castaño: «Esto no le puede salir gratis a Cosidó, que es el que le ha dado alas a Marcelino y también la cagada de Eugenio con su amigo, la abogacía del estado debe actuar contra Marcelino, porque si no van a decir que algo habrá de verdad porque disciplinariamente nadie hace nada».
Francisco Martínez: «Para actuar hay que esperar a que se archive de una (…) vez el asunto».

Ese día, la web Okdiario había publicado sobre el informe de la Comisión Judicial y había causado la preocupación, no solo del político sino de los policías. El comisario García Castaño, al que apodan ‘El Gordo’ o ‘Gran Peso’, tenía un contacto para llegar hasta Zamarriego y de las conversaciones se desprende que algunos lo sabían. A los dos días, activa esta vía y así aparece reflejado en las agendas de Villarejo. El 16 de junio, el comisario recoge un encuentro organizado por García Castaño con el juez Juan Antonio Toro, amigo, según ellos, de Zamarriego. Esta reunión se repetirá 12 días después, el 28 de junio.

Apuntes de las agendas del comisario jubilado José Manuel Villarejo de los días 16 y 28 de junio de 2016 sobre los encuentros con el juez Juan Antonio Toro
Apuntes de las agendas del comisario jubilado José Manuel Villarejo de los días 16 y 28 de junio de 2016 sobre los encuentros con el juez Juan Antonio Toro.

Las gestiones con Toro son seguidas con atención por Martínez e, incluso, alentadas, tal y como muestran las agendas de Villarejo y los whatsapps de Kitchen. Cada poco tiempo, el secretario de Estado pregunta a García Castaño para saber cómo prosiguen las tareas de presión.

El 5 de julio de 2016 Castaño informa a Martínez de la primera gestión realizada a los días de acordar que la clave para el archivo estaba en el juez del caso, Arturo Zamarriego.

Enrique García Castaño: «Hablé con un juez amigo de Zamarriego [JUAN ANTONIO TORO] para que mañana no la lie con Pepe [VILLAREJO], a ver si termina este rollo».
Francisco Martínez: «Ojalá».

El 23 de agosto vuelve a recurrir a García Castaño y pregunta por cómo se están desarrollando los acontecimientos. En la conversación no deja pasar la oportunidad y le manda que «le diga no haga caso del Rústico», en referencia al comisario Marcelino Martín-Blas:

Francisco Martínez: «Qué sabes de tu amigo Marce y del Juez chalao [Arturo Zamarriego] ?? ¿Volverán a la carga??».
Enrique García Castaño: «No se nada».
FM: «Ok… Vaya dolor de cabeza de tíos».
EGC: «Ya lo se,que nos dejen en paz».
FM: «¿No tenías un amigo juez [Juan Antonio Toro] tronco del Zama [Arturo Zamarriego]?? Pues que le diga q no haga caso del Rústico [Martín Blas]».
EGC: «En eso estoy,no creas que lo olvido»
FM: 👍

El 22 de noviembre Martínez, ya con Zoido de ministro, sigue en ello:

Francisco Martínez: «Por cierto, has sabido algo más del Zama??».
Enrique García Castaño: «Me dice mi amigo [Juan Antonio Toro] todo bien, aunque no me fio».
FM: «Xq no t fías?».
EGC: «Porque es muy influenciable».
FM: «Bueno, se trata de que le influyan personas razonables como tu amigo… La verdad es que a mí ya no me importa mucho, pero me da por saco que sigamos con ese tema abierto».

Tres días después, el comisario García Castaño aporta novedades:

Enrique García Castaño: «Lo archivara sin vencedores ni vencidos, me acaba de decir mi amigo [Juan Antonio Toro]».
Francisco Martínez: «¿Seguro?? Sería gran noticia».
EGC: «Esta vez creo que sí, antes de fin de año».

Ya en 2017, el 16 de enero, Martínez vuelve a la carga y pregunta nuevamente por los avances en las presiones al juez. De hecho, la grafía delata el nerviosismo del ex secretario de Estado:

Francisco Martínez: «X cierto… ¿¿¿has tenido alguna nueva noticia de Zamarriego y sus oscuras intenciones???».
Enrique García Castaño: «Como siempre me dicen que bien, pero también me dicen que los otros siguen apretando».
FM: «Pues no sé q más van a apretar».

En esta misma conversación y tras comentar sobre el proceso de elección del nuevo DAO (García Castaño le comunica que se presenta), Martínez sigue preguntando:

Francisco Martínez: «En lo otro, la presión de «los otros» hará q no se archive??».
Enrique García Castaño: «No creo».

El verano de 2016 termina y los resultados esperados por los policías de las cloacas del Estado no llegan. La impaciencia es latente y Francisco Martínez intenta tranquilizar a los comisarios que poco tiempo antes eran incondicionales. Eso ocurre con Eugenio Pino, ya retirado, el 9 de septiembre.

Eugenio Pino: «Marcelino come e invita, con lo agarrado que es. – muchísimo-, en buenos restaurantes. ¿Quién se lo paga? Tuvo una reunión con Barrado en el casino de Madrid ¿quién pagó?».
Francisco Martínez: «No tengo ninguna duda. Por si tenías alguna duda (que no creo) yo estoy ABSOLUTAMENTE MOVILIZADO* para parar este disparate…».
EP: «Me congratula».

*Las mayúsculas de remarque de esta conversación son originales. Es de los pocos mensajes en los que Martínez usa mayúsculas para recalcar.

Sin embargo, estos mensajes tranquilizadores no son suficientes y diez días después aparecen de nuevo contenidos contra Martínez en los medios que los policías le reenvían con mensajes de supuesto «ánimo» y atribuyen las informaciones a filtraciones de otras personas. Es el caso de las informaciones sobre la esposa de Martínez y que comenta con Pino:

Eugenio Pino: «Algo debes estar haciendo bien, tu nombre suena o simplemente molestas a alguien. Ánimo para ti y para Luisa».
Francisco Martínez: «Gracias Eugenio. Ya ves, ahora quieren joderme a mi y a mi mujer Que les den».
EP: «Con algún reparo, la fiscalía según Urrezquieta».
FM: «Pues qué bien.. Y qué coño les ha hecho mi mujer?? O yo??».
EP: «Parece ser que ya se lo habían filtrado hace algún tiempo».
FM: «Si eso es lo que tienen contra mi…».
EP: «Calumnia que algo queda .. He estado tomando un café con Terradillos, me confirma que la autora de la noticia es amiga de Grinda».

Sobre esta información le había advertido la tarde anterior el director de Comunicación del Ministerio del Interior, Juan José Esteban, que el 19 de septiembre por la tarde le decía:

Juan José Esteban:
«http://www.elespanol.com/espana/politica/20160919/156735213_0.html Lo anuncian ahora pero hasta las tres de la madrugada no se podrá leer completa la noticia en la web».
Francisco Martínez: «Cómo lo ves? Tampoco irá en el resumen de digitales, verdad??».
JJE: «No».

Esteban es el que lo avisa pero, al mismo tiempo, le tranquiliza advirtiéndole que esta información no irá en los resúmenes de los digitales que se distribuyen en Moncloa y los ministerios. Pasan las horas y por la mañana, a primera hora, Francisco Martínez vuelve a interesarse por la repercusión:

Francisco Martínez: «Algún eco a esta hora??».
Juan José Esteban: «Cero. Tampoco en redes sociales».
FM: «En serio?? 😳Y si no la tiene a estas horas es buena señal, ¿no?».
JJE: «Muy buena».

Pero Pino no es el único comisario que le envía «ánimo». Villarejo apunta ese día en su agenda que envía un mensaje de «apoyo» a Chisco, nombre con el que apoda a Francisco Martínez.

Apunte de la agenda de José Manuel Villarejo del día 20 de septiembre de 2016 en el que muestra su apoyo al diputado Francisco Martínez (PP) por la información publicada sobre su esposa
Apunte de la agenda de José Manuel Villarejo del día 20 de septiembre de 2016 en el que muestra su apoyo al diputado Francisco Martínez (PP) por la información publicada sobre su esposa.

Presión a periodistas

Martínez también demuestra en esos chats que hacía seguimiento a los periodistas que seguían el caso del Pequeño Nicolás y la operación ‘Kitchen’. Según sus whatsappscontroló las visitas de reporteros a la oficina que el juez Zamarriego asignó a su Comisión Judicial. En esas conversaciones, incluso se comprueba cómo Martínez asegura que llegó a denunciar ante la entonces fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal, esos encuentros.

Francisco Martínez: «Yo tenía los registros de la periodista de Público que iba a verle a Asuntos Internos. Se los di a la fiscal general del Estado y, por supuesto, no pasó nada. Y como soy gilipollas no tengo copia».

El ex número dos de Interior se lamenta con su interlocutor por no poder demostrar lo que dice. Estas vigilancias no eran la única manera de presionar a los periodistas. Martínez contactaba frecuentemente con periodistas para filtrar falacias contra la Comisión Judicial e incluso hacía uso de la dirección de comunicación del Ministerio para tratar de abortar publicaciones o advertir a los directivos de los medios sobre determinadas informaciones. El 16 de junio envía el mismo mensaje al todavía entonces DAO Eugenio Pino y al dircom de Interior, Juan José Esteban:

«Lo de Marcelino no tiene nombre… Mira la que ha liado Ayuso [Javier Ayuso] en El País de mañana…».

Se refería a una información del periodista Javier Ayuso en El País titulada: «El fiscal se opone a una investigación sobre presunta corrupción policial».

Unos días después, Martínez insiste con el recorrido de la información de Ayuso. Escribe a Villarejo por Telegram y le llama «muy preocupado» según apunta el comisario en su agenda.

Apuntes de la agenda de José Manuel Villarejo del 21 de junio de 2016 en el que recoge la preocupación de Francisco Martínez (PP), alias Chisco, por el editorial de El País
Apuntes de la agenda de José Manuel Villarejo del 21 de junio de 2016 en el que recoge la preocupación de Francisco Martínez (PP), alias Chisco, por el editorial de El País.

Y ese mismo día, insiste con el dircom de Interior y le muestra nuevamente su preocupación:

Francisco Martínez: «Lee el editorial de El País… Vaya tela… El de mañana…».
Juan José Esteban: «Secretario. Creo que hemos subestimado a Ayuso. Respira por las heridas de su enemistad con Villarejo. Hoy voy a hablar con el director de El País».

La conversación con alguien de El País, según se desprende de los chats, tuvo lugar, aunque no se puede afirmar que fuera con el director. No obstante, ni esta estrategia de presión mediática ni las otras acciones que puso en marcha el número dos de Interior llegaron a funcionar.

El panorama no pintaba bien para Martínez y el 3 de noviembre de 2016, el día que Rajoy anunciaba los nombres de su nuevo Gobierno, sus esperanzas quedaban reducidas a poder continuar como secretario de Estado. Su sueño de ser ministro ya era imposible. De hecho, ese día sólo espera ya la posibilidad de que María Dolores de Cospedal sea nombrada ministra del Interior. Así se desprende de su conversación con un periodista de El Confidencial:

Periodista: «Buenas tardes. Supongo que tendrás el móvil ardiendo. Te diré que en todas las quinielas me dicen que sigues de secretario de Estado de Seguridad. No sé si es bueno o malo».
Francisco Martínez: «Bueno, a mi desde luego no me ha llamado nadie… y a estas horas es evidente que los afectados están avisados. Si sigo o no de SES dependerá de quien venga de Ministro o Ministra…».
P: «A mí me dijeron quién venía y que esa persona quería que siguieras. Pero no hemos publicado ni una línea».
FM: «Y quién es?? Cospedal??».
P: «Exacto. Me dijeron que iba ella y que ya se habían producido movimientos. El ministro está avisado de algo?».
FM: «Suena bastante creíble… aunque no sé a qué movimientos se pueden referir…».
P: «Parece que Rajoy ya ha comunicado a Fernández Díaz que no cuenta con él».

Esta conversación se produce unos minutos antes de que se conozcan los nuevos ministros, entre ellos, el del Interior, Juan Ignacio Zoido. Así se lo comunica el periodista a Martínez:

Periodista: «Zoido».
Francisco Martínez: «Eso suena».
P: «jajajaja. Confirmado».
FM: «Ya».
P: «Es Zoido. Espero que tengas mucha suerte en tu nueva andadura. Ha sido un placer. Seguiremos en contacto, no?».
FM: «Igualmente. Claro que sí! A tu disposición. Un abrazo».

Ambos dan por terminada la carrera política de Martínez en el Gobierno con la llegada de Zoido al Ministerio del Interior.

 

Los responsables de los «protocolos de la vergüenza» en las residencias de Madrid declaran por primera vez en un juzgado

El exdirector de Coordinación Sociosanitaria, Carlos Mur, y el exconsejero de Políticas Sociales, Alberto Reyero, declaran como testigos en una investigación sobre las muertes en los centros de mayores durante la primera ola de la covid.

Varias personas se manifiestan junto a marea de Residencias y Verdad y Justicia durante un homenaje-vigilia por las víctimas de la covid-19, a 18 de marzo de 2023, en Madrid (España).

Varias personas se manifiestan durante un homenaje-vigilia por las víctimas de la covid, a 18 de marzo de 2023, en Madrid.  Gustavo Valiente / Europa Press

Tres años después de que el Gobierno presidido por Isabel Díaz Ayuso aprobara los protocolos que impidieron que casi la totalidad de los residentes en los centros de mayores de la Comunidad de Madrid fueran derivados a hospitales cuando estalló la pandemia de la covid-19, un juzgado va a investigar en qué condiciones murieron estas personas. Así, por primera vez declararán como testigos ante un juez el entonces responsable de Coordinación Sociosanitaria, Carlos Mur, y el exconsejero de Políticas Sociales, Alberto Reyero.

La comparecencia tiene lugar este jueves 23 de marzo a partir de las 10.00 horas en los juzgados de Plaza de Castilla. El primero en testificar será, previsiblemente, Mur, como firmante de los documentos, y sobre las 11.00 horas lo hará Reyero.

Durante la primera ola de la covid, entre marzo y abril de 2020, 7.291 mayores perdieron la vida en los geriátricos madrileños sin ser trasladados a un centro hospitalario. «Nosotros ya sabíamos que las derivaciones estaban paralizadas antes del 18 de marzo, cuando se firmó el primer protocolo», explica en una conversación con Público María Jesús Valero, portavoz de Marea de Residencias. Ella misma cuenta, entre el dolor y la indignación, que su padre fue uno de los fallecidos. Desde entonces, no ha parado de mover cielo y tierra para que «la cruda verdad» sobre lo ocurrido se esclarezca.

Cuando arrancó la pandemia en 2020 se firmaron hasta cuatro de los llamados «protocolos de la vergüenza», los días 18, 20, 24 y 25 de marzo. En esos documentos se expresaba específicamente la orden de no desplazar a personas que tuvieran un problema cognitivo o de movilidad. «Todo el mundo sabe que prácticamente cualquiera que esté en una residencia tiene, o bien una, o las dos afecciones. Así que se libraron pocos», critica Valero. Junto a otras familias víctimas de esta «desastrosa» gestión han llegado a presentar en los tribunales más de 300 querellas, de las cuales solo hay 106 abiertas.

«Más grave, aún si cabe, son las llamadas a centros de salud a causa de otras patologías diferentes a la covid que tampoco trasladaban», lamenta Valero que recuerda que el número total de fallecidos se eleva a los 9.470 residentes. La comunidad trató de apaciguar las aguas bajo la excusa de que sus decisiones se tomaron en base a criterios clínicos, pero Marea de Residencias y Verdad y Justicia dudan de esa versión e insisten en la necesidad de una investigación a fondo: «Queremos saber por qué se decidió que nuestros familiares murieran solos y sin condiciones sanitarias dignas», dice.

«Nosotros queremos dejar claro que apoyamos esta iniciativa del Juzgado de Instrucción 9 de Madrid. Hasta el momento, es el único que se ha atrevido a llamar a declarar a los auténticos responsables y ha cumplido con el auto del Tribunal Supremo que mandaba indagar el origen y la autoría de estas resoluciones prohibitivas», asevera Valero.

Las trabajadoras se suman a las denuncias

El Gobierno de Ayuso nunca llegó a medicalizar los geriátricos, como se había comprometido cuando se dispararon los casos de coronavirus. De hecho, fueron los propios trabajadores de los centros de mayores quienes denunciaron inicialmente la «situación de descontrol» en el confinamiento.

«No teníamos nada, ni medios, ni un mal gotero para que pudieran hidratarse. Ya no digo salvarles o alargarles la vida, sólo dejarles morir con dignidad«, recuerda María Ángeles Maquedano, auxiliar en una residencia. La trabajadora confiesa que las semanas que transcurrieron desde que se declaró el estado de alarma hasta Semana Santa (cuando «por fin empezaron a llevarse a la gente a los hospitales») fueron las peores en sus 15 años de experiencia en el sector.

Maquedano asegura que no se dio un trato adecuado a los mayores «porque no había recursos de ningún tipo» y narra cómo los residentes se contagiaron al no poder separar entre los infectados con covid y los que no «por una cuestión de espacio y de falta de directrices». Al presagiar lo que se vaticinaba y enterarse de las primeras muertes, muchos familiares intentaron sacar a sus mayores de los centros, pero la mayoría no lo consiguió. «Nos contactaban hasta por redes sociales para saber algo de los residentes porque la dirección del geriátrico no facilitaba ninguna información, y apenas podían comunicarse con ellos«, afirma la auxiliar.

Llama la atención que no haya sido hasta ahora cuando hayan llamado a declarar a Reyero, cuando fue él mismo quien reconoció tras dimitir, en unas declaraciones recogidas por este medio, que el Gobierno de Ayuso le negó la ayuda que pedía para poder salvar las vidas de los residentes. Es más, la propia Audiencia de Madrid ha llegado incluso a considerar «improcedente» que declararan los responsables. Por ello, aunque las asociaciones por la verdad y la dignidad de los fallecidos en las residencias reciben la noticia de la investigación en el juzgado con los brazos abiertos, aún no dan nada por conseguido y ponen la vista en Europa como próximo escalón jurídico al que apelar.

 

La hija de una residente de un centro investigado por la Fiscalía aborda a Ayuso: «¿Comes cinco comidas por 4,60 euros?»

La mujer consiguió hablar con la presidenta madrileña sobre la residencia Francisco de Vitoria de Alcalá. La Fiscalía abre diligencias tras las denuncias por las «pésimas condiciones» de los mayores ingresados y la mala calidad de la comida.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante un pleno en la Asamblea de la región, a 16 de marzo de 2023.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante un pleno en la Asamblea de la región, a 16 de marzo de 2023.  Daniel González / EFE

La Fiscalía de Madrid inició este miércoles una investigación sobre las denuncias contra la residencia Francisco de Vitoria, en Alcalá de Henares, dependiente del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. El Ministerio Público ha pedido documentación a diferentes organismos sobre las quejas en relación «a las pésimas condiciones» en las que se encuentran los mayores ingresados y los trabajadores del centro y la mala calidad de la comida que se sirve a los mayores.

Julia Martínez, hija de una residente, es una de las personas que lleva meses alzando la voz y denunciando la pésima situación del centro. El jueves de la semana pasada dio un paso más. Invitada por Unidas Podemos a acudir al debate en la Asamblea de Madrid, decidió abordar directamente a Ayuso en los pasillos de la cámara. 

«Le pregunté si ella comía cinco comidas al día por 4,60 euros», cuenta Martínez, según publica El PaísEl diario destaca que la mujer relató a la presidenta madrileña la falta de material y de personal en la residencia, «con los abuelos abandonados, sin agua caliente muchos días, con solo cuatro grifos de agua potable… Y ahora, con legionela». Y no, Ayuso admitió que ella no come por menos de 5 euros al día.

Según Julia Martínez, de 48 años, la jefa del Ejecutivo madrileño se comprometió a estudiar la rescisión del contrato con la empresa que suministra los alimentos. Sin embargo, este miércoles Ayuso puntualizó en rueda de prensa que lo que le transmitió a la hija de la residente es que le «gustaría acompañarla un día» y «conocer de primera mano» las instalaciones. Algo que, dijo, hará cuando «tenga la oportunidad».

Las palabras de Ayuso se enmarcan en la estrategia de huida hace adelante que la Comunidad de Madrid está tomando con las residencias. El Gobierno autonómico ha negado que haya legionela en la Francisco de Vitoria. Sin embargo, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares detectó niveles graves de presencia de dicha bacteria durante una inspección sanitaria. Según detalló el consistorio, se encontraron «varias muestras con más de 8.000 de unidades formadoras de colonias» en el agua de las duchas del centro, cuando se considera que más de 1.000 unidades formadores de colonias ya representan «una situación grave, donde se requiere una actuación inmediata».

La Comunidad de Madrid se ha limitado a decir que los problemas en la residencia se arreglaron «hace tiempo». En paralelo, la Fiscalía investiga la denuncia presentada por Unidas Podemos, que recoge las quejas de familiares y trabajadores respecto a las condiciones en las que se encuentran los residentes, tanto en la cantidad y calidad de la comida, como en la asistencia necesaria para el día a día al no cumplir la ratio de trabajadores.

La formación morada denuncia que la comida que se está dando a los residentes «no cumple con los mínimos estándares de calidad» y se encuentra «en mal estado muchas veces», incluyendo en ocasiones «gusanos, con hongos o estando prácticamente podrida».

Según la formación, «muchos de los residentes no pueden comer por sí mismos ni ver lo que están comiendo», lo que a su juicio puede suponer un delito contra la salud pública. Podemos incluía en la denuncia una serie de fotografías para advertir del estado de la comida que se da a los residentes. Para la formación, se trata de hechos conocidos por la residencia y su dirección, al hilo de lo cual recuerda «las continuas denuncias» de los familiares al centro y a la Comunidad de Madrid.

En su denuncia, la formación asegura que hay personas que «han perdido peso» y habla de condiciones de «desnutrición» en los residentes que llega incluso a relacionar con fallecimientos en el centro. Los familiares de uno de los internos denunciaron que había perdido 14 kilos en apenas diez meses desde que entró en el centro. Cuestionado en su momento por ello, el responsable de las residencias de Madrid, José Manuel Miranda, quitó gravedad al asunto alegando que el paciente llegó con sobrepeso y que ahora «está en su peso ideal».