La hija de una residente de un centro investigado por la Fiscalía aborda a Ayuso: «¿Comes cinco comidas por 4,60 euros?»

La mujer consiguió hablar con la presidenta madrileña sobre la residencia Francisco de Vitoria de Alcalá. La Fiscalía abre diligencias tras las denuncias por las «pésimas condiciones» de los mayores ingresados y la mala calidad de la comida.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante un pleno en la Asamblea de la región, a 16 de marzo de 2023.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante un pleno en la Asamblea de la región, a 16 de marzo de 2023.  Daniel González / EFE

La Fiscalía de Madrid inició este miércoles una investigación sobre las denuncias contra la residencia Francisco de Vitoria, en Alcalá de Henares, dependiente del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. El Ministerio Público ha pedido documentación a diferentes organismos sobre las quejas en relación «a las pésimas condiciones» en las que se encuentran los mayores ingresados y los trabajadores del centro y la mala calidad de la comida que se sirve a los mayores.

Julia Martínez, hija de una residente, es una de las personas que lleva meses alzando la voz y denunciando la pésima situación del centro. El jueves de la semana pasada dio un paso más. Invitada por Unidas Podemos a acudir al debate en la Asamblea de Madrid, decidió abordar directamente a Ayuso en los pasillos de la cámara. 

«Le pregunté si ella comía cinco comidas al día por 4,60 euros», cuenta Martínez, según publica El PaísEl diario destaca que la mujer relató a la presidenta madrileña la falta de material y de personal en la residencia, «con los abuelos abandonados, sin agua caliente muchos días, con solo cuatro grifos de agua potable… Y ahora, con legionela». Y no, Ayuso admitió que ella no come por menos de 5 euros al día.

Según Julia Martínez, de 48 años, la jefa del Ejecutivo madrileño se comprometió a estudiar la rescisión del contrato con la empresa que suministra los alimentos. Sin embargo, este miércoles Ayuso puntualizó en rueda de prensa que lo que le transmitió a la hija de la residente es que le «gustaría acompañarla un día» y «conocer de primera mano» las instalaciones. Algo que, dijo, hará cuando «tenga la oportunidad».

Las palabras de Ayuso se enmarcan en la estrategia de huida hace adelante que la Comunidad de Madrid está tomando con las residencias. El Gobierno autonómico ha negado que haya legionela en la Francisco de Vitoria. Sin embargo, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares detectó niveles graves de presencia de dicha bacteria durante una inspección sanitaria. Según detalló el consistorio, se encontraron «varias muestras con más de 8.000 de unidades formadoras de colonias» en el agua de las duchas del centro, cuando se considera que más de 1.000 unidades formadores de colonias ya representan «una situación grave, donde se requiere una actuación inmediata».

La Comunidad de Madrid se ha limitado a decir que los problemas en la residencia se arreglaron «hace tiempo». En paralelo, la Fiscalía investiga la denuncia presentada por Unidas Podemos, que recoge las quejas de familiares y trabajadores respecto a las condiciones en las que se encuentran los residentes, tanto en la cantidad y calidad de la comida, como en la asistencia necesaria para el día a día al no cumplir la ratio de trabajadores.

La formación morada denuncia que la comida que se está dando a los residentes «no cumple con los mínimos estándares de calidad» y se encuentra «en mal estado muchas veces», incluyendo en ocasiones «gusanos, con hongos o estando prácticamente podrida».

Según la formación, «muchos de los residentes no pueden comer por sí mismos ni ver lo que están comiendo», lo que a su juicio puede suponer un delito contra la salud pública. Podemos incluía en la denuncia una serie de fotografías para advertir del estado de la comida que se da a los residentes. Para la formación, se trata de hechos conocidos por la residencia y su dirección, al hilo de lo cual recuerda «las continuas denuncias» de los familiares al centro y a la Comunidad de Madrid.

En su denuncia, la formación asegura que hay personas que «han perdido peso» y habla de condiciones de «desnutrición» en los residentes que llega incluso a relacionar con fallecimientos en el centro. Los familiares de uno de los internos denunciaron que había perdido 14 kilos en apenas diez meses desde que entró en el centro. Cuestionado en su momento por ello, el responsable de las residencias de Madrid, José Manuel Miranda, quitó gravedad al asunto alegando que el paciente llegó con sobrepeso y que ahora «está en su peso ideal».

Katarina Roth: «La UE no debería establecer una compra conjunta de armas, es contraria a sus tratados y valores» (Solo manda la OTAN Y EEUU)

La eurodiputada eslovaca Katarina Roth.

La eurodiputada eslovaca Katarina Roth.  Parlamento Europeo

Katarina Roth Nevedalová (Eslovaquia, 1982) es una eurodiputada de la familia socialdemócrata. Es un verso suelto que discrepa de la respuesta europea a la guerra de Ucrania. En entrevista con Público explica su postura tras un año de bombas cayendo a las puertas de la UE.

Roth un caso sui generis en la UE y en la familia socialdemócrata europea. La sensación y el discurso que impera en Bruselas es que no hay opción alternativa en armar a Ucrania hasta los dientes para su camino hacia la victoria definitiva. Roth se opone al envío de armamento al frente y afea que la UE está abandonando su esencia como proyecto pacifista hacia una organización militar que habla el lenguaje de la fuerza y ya no tanto el de la diplomacia.

Cumplido un año de guerra, la UE ha golpeado a Rusia con las sanciones más potentes de su historia. Está otorgado a Ucrania un apoyo sin precedentes en todos los campos: político, financiero y militar. ¿Cómo valora la respuesta europea a la guerra?

Creo que la UE es un proyecto de paz. La idea de exportar la paz es su principio básico. Para eso es para lo que hemos trabajado durante tantos años. Por ello, es impactante que haya tanta gente en la UE pidiendo armas. Ya tenemos a la OTAN, que tiene un papel militar.

Además, creo que las sanciones que estamos imponiendo a Rusia no están funcionando. Están afectando a las clases más pobres y vulnerables y están provocando no solo una crisis económica, sino energética. No creo que sean la mejor opción. Entiendo a todos los que quieren apoyar a Ucrania, yo también lo reivindico, pero creo que deberíamos apoyarles, no a través de las armas y de la pata militar, sino con ayuda humanitaria y con más llamadas a terminar el conflicto y a la paz. Deberíamos presionar para que ambas partes se sienten en una mesa para ver qué condiciones pueden acordar.

La mayoría de voces en la UE se centran en pedir más y más armas. Todo pasa por ensalzar la parte militar. Todos somos empáticos con los ucranianos que están muriendo allí, pero lo que creo que deberíamos hacer es pedir la paz. Y para que quede claro: no creo que Ucrania debe ceder parte de su territorio.

Y, ¿cuál es su pensamiento sobre el rol del Alto Representante Josep Borrell? Su tono estos doce meses ha sido duro, llegando a hablar de que la OTAN aniquilaría al Ejército ruso o de que la guerra terminará en el campo de batalla. Hay quienes piensan que no es un lenguaje muy diplomático.

Creo que la guerra solo puede terminar en una mesa. No en el campo de batalla. La paz sólo llegará con la deposición de las armas y con el diálogo. Por eso, urgimos a la UE a que lidere conversaciones de paz. No somos una institución de guerra y por ello debemos alentar la diplomacia. La parte militar no es nuestro lugar, no es nuestro papel. Para eso ya tenemos a la OTAN y a los Estados miembros.

Con la guerra de Ucrania, ¿la UE ha desarrollado más su autonomía estratégica o ha aumentado su seguidismo de la línea e intereses de Estados Unidos?

Los Estados Unidos son parte de la OTAN y por ello todos tendríamos que tener una posición común. Pero vuelvo a enfatizar que la UE es un proyecto de paz. El envío de armas o el Ejército europeo no son su lugar. Ese es el lugar de la Alianza Atlántica. Debemos quedarnos donde pertenecemos: una asociación económica. Creo que Pedro Sánchez y el canciller Olaf Scholz son un buen ejemplo de líderes europeo que intentan buscar una solución al conflicto.

Entonces, ¿cree que la UE debería frenar el envío de armas llegados a este punto de la guerra? La Comisión trabaja en una iniciativa para promover una compra conjunta de material bélico -como hizo durante la pandemia con las vacunas-. ¿Cómo reconciliar esta iniciativa con los tratados europeos, que prohíben financiar con dinero comunitario el envío de armas a un país en guerra?

No creo que el envío de armas sea el camino a seguir. La compra conjunta de vacunas no terminó del todo bien. Y las armas son un asunto muy sensible. Entiendo que los Estados miembros lo quieran hacer y lo hagan de forma individual, pero la UE no debería establecer una compra conjunta de armas. Es contrario a sus tratados y a sus valores.

Enfatiza que la prioridad de la UE debe ser buscar y promover la paz. ¿Qué papel está jugando -o no está jugando- la UE en esta línea?

La Unión Europea es el mayor donante de ayuda humanitaria del mundo. Tenemos mucha experiencia y podemos apoyar mucho a la reconstrucción de Ucrania. Deberíamos utilizar nuestra experiencia diplomática para impulsar un alto al fuego ofreciendo una base sobre la que ambas partes puedan debatir. Algunos países como Turquía lo están haciendo.

¿No tiene derecho Ucrania a defenderse de un invasor? ¿No tiene Occidente el deber moral de ayudarle a ello?

Sí, tienen todo el derecho del mundo a defenderse de alguien que les ha invadido. Pero la pregunta es: ¿hasta dónde es suficiente? ¿Cuántas armas más son suficientes? Es cierto que existe una mayoría de líderes europeos que apoyan la línea de continuar el apoyo militar. Pero, por ejemplo, en mi país, si miras a la percepción general de la opinión pública, el 77% de la población se opone al envío de armas. Los eslovacos no tenemos muchas armas y corremos el riesgo de quedarnos desprotegidos.

El ex primer ministro Robert Rico, de su partido socialdemócrata, se ha mostrado contra el envío de armas. Incluso su nombre aparece en listas ucranianas acusado de propagar desinformación en favor de Rusia. Hay voces europeas preocupadas de que llegue al poder de nuevo en las elecciones de septiembre. ¿Cambiaría ello la política exterior de Eslovaquia? ¿Se alinearía más el país con los postulados de Hungría?

Lo que dice Rico es que la parte militar hay que consensuarla en la OTAN. Pero con mucho cuidado para que no se vea arrastrada al conflicto. Esto nadie lo quiere. Sería un choque entre potencias nucleares. Nosotros no difundimos propaganda; la propaganda y desinformación está, de hecho, por todos lados en el conflicto.

Nosotros no tenemos muchas armas que ofrecer. Lo que sí podemos ofrecer es ayuda humanitaria y a los refugiados. No quiero prejuzgar el futuro y cuál sería la postura y la respuesta de un . Pero lo que sí está claro es que nuestra urgencia es la paz y nuestra postura es que enviar armas no es el camino hacia ella. Además, tenemos que pensar en el día de después. Porque habrá un día de después de la guerra. Y ahí debemos ver cuál será nuestra relación y cooperación con Rusia.

¿Cómo anticipa ese día después de la guerra y la relación con Moscú? ¿La UE podrá construir algún tipo de relación con una Rusia gobernada por Vladimir Putin o todos los puentes estarán rotos?

Después de la guerra tendremos que convivir con Rusia. Es un socio estratégico y nuestro mayor vecino. Tenemos que establecer una cooperación. La habrá, seguro. Pero es prematuro anticipar qué forma tomará. Nadie sabe si será con o sin Putin. Es algo de lo que tenemos que hablar. De eso y de la reconstrucción de Ucrania. Hace un siglo nadie imaginaba algo parecido a la UE. Y aquí estamos. Nada es imposible.

Esta semana, Rusia ha anunciado su suspensión del acuerdo de control nuclear New Start dejando un mundo más peligroso e imprevisible. ¿Le preocupa que nos acerquemos a un choque entre potencias nucleares o cree que este es un escenario poco probable?

Creo y espero que no haya una guerra nuclear. Pero estamos entrando en una dinámica peligrosa en la que nadie sabe qué ocurrirá. No somos conscientes del peligro que existe cuando se acorrala a alguien demasiado. Una persona empujada en un rincón, sin opciones, es capaz de hacer lo que sea. Y puede ser muy peligrosa. Tendríamos que tener esto en cuenta cuando emitimos nuestros comunicados y declaraciones sobre la guerra. La UE debe ser muy, muy cuidadosa.

Albares acusa al PP de «involución» por abstenerse en la moción de censura de Vox y Tamames

«Aquí en Bruselas lo que no se entiende es cómo es posible que exista un partido de derechas que no se oponga con claridad y nitidez a una moción de censura presentada por la extrema derecha», afirma el ministro de Asuntos Exteriores.

El presidente de VOX, Santiago Abascal (i), y el candidato de la moción de censura, el profesor Ramón Tamames (d), a su llegada a una comparecencia ante los medios en el Congreso de los Diputados, a 16 de marzo de 2023, en Madrid (España).

El presidente de VOX, Santiago Abascal (i), y el candidato de la moción de censura, el profesor Ramón Tamames (d), a su llegada a una comparecencia ante los medios en el Congreso de los Diputados, a 16 de marzo de 2023, en Madrid (España).  Jesús Hellín / EUROPA PRESS

El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha acusado este lunes al presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo, de «involución» por abstenerse en la moción de censura presentada por Vox, afirmando que ya se prepara para gobernar con la formación de Santiago Abascal tras las elecciones locales y autonómicas del 28 de mayo.

«Aquí en Bruselas lo que no se entiende es cómo es posible que exista un partido de derechas que no se oponga con claridad y nitidez a una moción de censura presentada por la extrema derecha y cómo se ha producido una involución del PP que ha pasado del no de Casado a la abstención de Feijoo», ha asegurado el titular de Exteriores en declaraciones desde Bruselas donde participa en la reunión de ministros europeos del ramo.

La abstención del PP a la candidatura de Ramón Tamames «solo tiene una lectura» para Alabares y es que el líder del PP ya prepara a su formación para gobernar con Vox. «No quiere molestar a los que son sus socios futuros», ha subrayado 24 horas antes de que arranque la moción de censura.

El titular de Exteriores ha insistido en que la moción es un instrumento constitucional «de primera importancia» y como tal el Gobierno la encara «con mucha seriedad». «Mañana los españoles van a poder ver con claridad dos programas de gobierno para España», ha afirmado, indicando que el proyecto de Pedro Sánchez «mira hacia el futuro» y está «encarnado en valores europeos» y el de «la derecha y la extrema derecha» por su lado «mira hacia el pasado».

La secretaria general del Partido Popular, Cuca Gamarra, ha manifestado este lunes en Bilbao que su partido no participará en el «show político que erosionará la democracia» y ha realizado un llamamiento a desalojar a Pedro Sánchez de la Moncloa en las urnas el próximo 28 de mayo. «No puede utilizarse una moción de censura para una promoción personal o de operación de propaganda a costa de la calidad democrática de nuestro país», ha advertido.

Para Gamarra, la moción de censura «que establece la Constitución», no está siendo utilizada con «la finalidad constitucionalmente establecida, se utiliza como una campaña de marketing y por puro electoralismo».

«Y nosotros en esto no participamos y no participamos porque para nosotros es clave el respeto a las instituciones y el respeto a los instrumentos que nuestra propia democracia nos da. No puede utilizarse una moción de censura para una promoción personal o para una operación de propaganda a costa de la calidad democrática en nuestro país», ha subrayado.

Temas más importantes

La portavoz nacional de CS y coordinadora autonómica en Baleares, Patricia Guasp, ha criticado este lunes que la moción de censura propuesta por Vox hace «perder el tiempo» a otras políticas y temas «más importantes» y además «le hace el juego» al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y también al líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo».

Por su parte, Abascal ha asegurado que tiene «la conciencia tranquila» de cara a la moción de censura, al tiempo que ha pedido al Partido Popular que escuche la intervención del candidato propuesto a la presidencia del Gobierno, Ramón Tamames, y replantee su voto.

«Yo estoy tranquilo y, sobre todo, no solo tranquilo de ánimo sino con la conciencia tranquila porque creo que estamos haciendo lo correcto. Creo que los españoles estamos padeciendo el peor Gobierno en muchísimas décadas, cada uno que elija cuantas. Desde luego elijo muchísimas», ha manifestado Abascal en una entrevista en Cadena Cope, recogida por Europa Press.

Esta es la segunda moción de censura que presenta Vox al Gobierno de coalición de Pedro Sánchez en esta legislatura. Y como la primera no prosperará.

El Gobierno de la Cuarta Transformación rescata la industria petrolera

Con rescate de la industria petrolera, México avanza a la autosuficiencia energética: presidente El presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó el reporte sobre los avances en el rescate de la industria petrolera, acción que significa la construcción del camino a la autosuficiencia energética y revertir la dependencia en energéticos que generó el periodo neoliberal. Uno de los mayores aciertos del Gobierno de la Cuarta Transformación, dijo, fue cambiar completamente la política de producción de Pemex, lo que ha frenado la importación de petróleo crudo y, al mismo tiempo, impide que suban los precios de los combustibles. “En vez de invertir en exploración, en perforación de pozos en el norte, en las aguas profundas donde no hay petróleo o cuesta mucho extraerlo, decidimos orientar toda la inversión al sureste para extraer petróleo en tierra y en aguas someras y esto nos funcionó porque tenemos reservas suficientes. Logramos evitar la caída en la producción de petróleo”, explicó. En conferencia de prensa matutina, la secretaria de Energía, Rocío Nahle García, detalló los logros de la implementación del programa emergente de rehabilitación de las refinerías de Ciudad Madero, Tamaulipas; Cadereyta, Nuevo León; Salamanca, Guanajuato; Tula, Hidalgo; Minatitlán, Veracruz y Salina Cruz, Oaxaca. “Se ha logrado que la producción aumente de 35 por ciento que encontramos en 2018, estamos al 72 por ciento. Cuando se inició la administración solo estaban trabajando dos refinerías completamente: Cadereyta y Salamanca. (…) Para abril de 2019 ya teníamos operando las seis refinerías, incluso Tula y Minatitlán, con un tren de refinación”, puntualizó. A la fecha se registran 922 mil barriles de crudo procesados por día; el compromiso es llegar a un millón 200 mil barriles este año por parte del Sistema Nacional de Refinación. Sumando la producción de la recién adquirida Refinería Deer Park en Texas y la entrada en operación de la Refinería Olmeca en Tabasco, en 2024 se consolidará la autosuficiencia energética, enfatizó la secretaria de Energía. Destacó que la inversión histórica asciende a 62 mil 898 millones de pesos del presupuesto público. En lo que va de 2023 se han ejercido mil 310 millones de pesos y quedan para los siguientes meses 14 mil 813 millones de pesos. Apuntó que se realizan reparaciones menores y mayores desde 2019, mismas que suman 491 intervenciones al 2022. En 2023 se harán 39 mayores y 186 menores; en total serán 225. La refinería Olmeca, en Paraíso, Tabasco, se encuentra en el proceso de pruebas, arranque e integración de líneas. Procesará 340 mil barriles por día y se obtendrán 170 mil barriles de gasolina y 120 mil de diésel ultra bajo azufre. El director general de Petróleos Mexicanos, Octavio Romero Oropeza, anunció que la proyección en marzo es alcanzar un promedio de 720 mil barriles de gasolina, diésel y turbosina en las seis refinerías de México y Deer Park en Texas, Estados Unidos. Sigue las actividades del presidente de México:

Gobiernos del PP regaron la fundación adscrita a su partido con 750.000 euros de dinero público desde 2019

La Fundación Concordia y Libertad ha estado inactiva en los últimos meses y presenta su renovación este 17 de marzo; sin embargo, no ha dejado de recibir subvenciones. Desde 2019 todas las ayudas de Gobiernos autonómicos y locales que ha recibido eran del PP.

Barones PP

Alberto Núñez Feijóo, el pasado 6 de diciembre, junto a los presidentes autonómicos y la secretaria general del PP, Cuca Gamarra.  EFE/ Kiko Huesca

Alberto Núñez Feijóo relanza este viernes la Fundación Concordia y Libertad, el brazo ideológico del Partido Popular que quedó descabezado cuando Adolfo Suárez Illana, su presidente, dejó la política el pasado 29 de noviembre. Desde entonces la fundación ha estado «inoperativa», aseguran en Génova, mientras se construía un nuevo equipo y un nuevo proyecto para relanzarla este 17 de marzo. Aún así, el cobro de subvenciones no cesó. El pasado 12 de diciembre la fundación adscrita al PP recibió 110.000 euros de la Comunidad de Madrid: dos ayudas, por valor de 100.000 y de 10.000 euros, que concedió la Consejería de Familia, Juventud y Política Social.

Según consta en el boletín de la comunidad, se otorgaron 100.000 euros a la fundación del PP para un proyecto de cooperación exterior «para apoyar la construcción de comunidades medioambientalmente sostenibles en el departamento de Boyacá (Colombia)». La otra subvención, de 10.000 euros, se concedió para acciones de «fortalecimiento de capacidades locales y construcción de ciudadanía activa para el proceso de localización de la Agenda 2030» en cuatro municipios del norte de Madrid.

La Fundación Concordia y Libertad (renombrada así por el PP de Pablo Casado y a la que previsiblemente Feijóo también cambiará el nombre este viernes) tenía un plazo de 18 meses desde la recepción del dinero para desplegar el primer proyecto y un año para el segundo. Por ahora, han consumido cuatro meses, pero resulta difícil seguir la pista de ambas subvenciones porque la actual dirección del PP, preguntada por Público, se desliga de ellas y asegura que la fundación se reiniciará por completo. Es más, en sus comunicados oficiales se refieren a una «nueva fundación».

La pista de las dos subvenciones otorgadas por Madrid se pierde con el reinicio de la fundación

Este periódico ha tratado de conocer el detalle y el estado de los proyectos subvencionados por la Comunidad de Madrid preguntando tanto al partido como a los responsables de la propia fundación, pero no ha habido respuestaEn su página web, todavía sin renovar, no consta ningún proyecto ni en marcha ni anterior en la región colombiana de Boyacá.

Según la base de datos nacional de subvenciones, la adjudicación de las ayudas se hizo a la Fundación Humanismo y Democracia, que es el nombre con el que se constituyó originariamente en 1977. Cuando Casado la renombró, la operación fue únicamente eso: un cambio de imagen y de nombre. La fundación mantuvo sus estatutos, sus objetivos y su CIF, el código que identifica a las empresas y organizaciones. Esto explica que en algunos documentos siga figurando su antiguo nombre. La operación, en principio, se repetirá de forma idéntica con Feijóo: cambio de nombre y mantenimiento de todo lo demás.

750.233 euros entre 2019 y 2022

Pero las subvenciones otorgadas por el Gobierno de Ayuso no son una excepción. Gobiernos autonómicos y municipales del PP llevan años regando la fundación con ayudas públicas. Entre 2019 y 2022 le han entregado al menos 750.233 euros. Los 110.000 de la Comunidad de Madrid se suman a los 347.300 del Ayuntamiento de Madrid, 175.000 de la Xunta de Galicia y 117.933 de la Junta de Castilla y León.

Este es el dinero público total que esta fundación ha recibido de gobiernos autonómicos y locales desde 2019, según la base de datos de subvenciones. Y todo procede de gobiernos de su propio partido. La Junta de Castilla y León le otorgó la subvención en junio de 2019, la Xunta de Galicia (con Feijóo al frente) en julio del mismo año y el Ayuntamiento de Madrid (ya con José Luis Martínez-Almeida como alcalde) en noviembre. Las dos primeras estaban destinadas a proyectos de cooperación en el exterior.

Además, según publicó eldiario.es en el año 2020, la fundación se encargó de gestionar dos Centros de Participación e Integración de Inmigrantes (CEPI) de la Comunidad de Madrid. Esta adjudicación se tradujo en ingresos de 460.000 euros al año para la Fundación Concordia y Libertad entre 2015 y 2020.

El Estado subvenciona las fundaciones de los partidos

La organización está vinculada al Partido Popular de forma oficial desde abril de 2017, unos meses después de que la FAES de Aznar hiciera el camino contrario. Como sucede con gran mayoría de fundaciones de partidos políticos, su principal vía de financiación son las ayudas estatales (del Gobierno central) y no los ingresos procedentes de gobiernos autonómicos y locales. Existen incluso ayudas del Ministerio de Cultura que se dan exclusivamente a las fundaciones y asociaciones de partidos que tienen representación en el Congreso o el Senado.

De hecho, entre 2019 y 2022 la Fundación Concordia y Libertad recibió 1.920.624 euros del Gobierno, entre ayudas del Ministerio de Cultura y del de Asuntos Exteriores. La Fundación Pablo Iglesias, la principal del PSOE, en ese mismo tiempo percibió 1.393.242 euros en subvenciones del Gobierno central y solo 10.387 euros en autonómicas, en este caso, de la Comunidad de Madrid.

La fundación del Partido Popular, eso sí, tiene como uno de sus objetivos «la Cooperación Internacional, especialmente en países en vías de desarrollo», según sus propios estatutos.

Inyecciones de dinero que vienen de lejos

Aunque la base de datos nacional de subvenciones solo permite ver las ayudas concedidas en los últimos cuatro años, las inyecciones de dinero a la fundación del PP a través de las Administraciones regidas por el partido vienen de más lejos. Las últimas cuentas publicadas por la propia fundación, las de 2021, recogen las de Galicia, Castilla y León y el Ayuntamiento de Madrid, pero también otra del Gobierno de La Rioja. Esta subvención, destinada a cooperación internacional con un monto de 115.844 euros, se otorgó en 2018 por el anterior ejecutivo autonómico, que presidía José Ignacio Ceniceros, también del Partido Popular.

En diciembre de 2022, el Tribunal de Cuentas emitió un informe de fiscalización de las fundaciones de partidos políticos sobre los ejercicios 2018 y 2019. El informe refleja que entre los dos años la fundación recibió subvenciones del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento y la Comunidad de Murcia, la Xunta de Galicia, el Gobierno de la Rioja y la Junta de Castilla y León. Todas las Administraciones estaban gobernadas por populares salvo el consistorio madrileño, en manos entonces de Manuela Carmena (hasta las elecciones de mayo de 2019).

En 2019 la fundación ingresó más de 2 millones de euros: el 70% por subvenciones

Las cuentas, además, muestran una clara dependencia de los fondos públicos. Según el informe, en 2019 la fundación ingresó 2.216.452 euros: el 70,21% por subvenciones públicas, algo más de 1,5 millones. Las donaciones de particulares, en cambio, fueron solo 18.622 euros.

Los tres pies al gato | ‘Aves de rapiña’, por Ana Pardo de Vera

Esta semana hemos conocido que al menos, tres cargos públicos de la Asamblea de Madrid ha cobrados ayudas sociales para familias vulnerables. El portavoz del Gobierno de Ayuso, Enrique Ossorio, lo ha cobrado porque, pese a tener el patrimonio más abultado y la cartera más llena del Ejecutivo, considera que merece un descuento de la factura entre el 25 y el 65% durante 2023 solo por pertenecer a una familia numerosa. Y si usted tiene envidia de él, tenga familia numerosa, ha dicho el consejero con su habitual empatía. Es un hombre que, sin duda, huele el dinero a distancia, no así la pobreza y desigualdad del territorio que gobierna, que no encuentra por ningún lado pese a los reiterados informes de alerta de Cáritas.

El secretario general del PP de Madrid, Alfonso Serrano, ha confesado él mismo que también lo cobra y que el suyo es aún más cuantioso que el de Ossorio, porque cobra el bono destinado a los consumidores vulnerables severos, es decir, que le descuentan un 40% de la factura y hasta un 80% durante 2023 si cumple los requisitos. Sabemos a ciencia cierta que Serrano cobra 82.000 euros. Vulnerable no parece, pero lo de vulnerable severo es un insulto a los y las madrileñas que realmente lo son.

La portavoz de Más Madrid, Mónica García, también ha admitido que ha cobrado el llamado bono térmico, como Ossorio y Serrano. Dice que se enteró cuando salió la noticia y que si supiera lo suyo, no habría pedido la dimisión de Ossorio horas antes. Reconoce el error y dice que tratará de devolver la cuantía recibida. Al menos, Mónica García sí ha rectificado, aunque la suya es una equivocación -si lo es- muy grave: de la derecha que preside Ayuso, a la que le parece bien que su hermano se lucre con dinero de la propia administración madrileña que ella gestiona en plena emergencia sanitaria y social; de la derecha que lidera Ayuso, que considera adecuado que se apruebe un protocolo para encerrar a los y las mayores enfermos de covid para morirse en las residencias … De esa derecha, la de la Púnica o la Gürtel, no se puede esperar nada, ninguna solidaridad, justicia social, … nada. Pero de la izquierda que pide empatía a la derecha, sí, sus votantes, simpatizantes, militantes, no esperan, desde luego, lo que ha hecho Mónica García, tuviera constancia o no.

El bono que han cobrado Ossorio, Serrano y García no siendo vulnerables, llamado bono social térmico, no se obtiene por generación espontánea, que no te engañen: para acceder al bono social térmico, previamente había que haber solicitado otro bono también para vulnerables, el bono social eléctrico, que sí requiere requisitos. Es decir, los tres cargos públicos que han recibido la ayuda social han pedido previamente otra ayuda, siendo conscientes de que ni son vulnerables ni les hacía falta. Siendo conscientes de que los recursos públicos son finitos y alguien que los necesite, algún día, dejará de percibir una ayuda por su culpa.

Newsweek: Ya es hora de retirar las tropas estadounidenses de Siria

Soldados estadounidenses se dirigen a una instalación de producción de petróleo en Siria

La intervención de EE.UU. en Siria es parte del statu quo defectuoso de la política exterior norteamericana instigado por belicistas, dice una congresista.

“Si no luchamos contra ellos allí, vendrán aquí”, estoy cansada de esta frase, manifiesta la congresista republicana por Florida Anna Paulina Luna, en un artículo publicado el jueves en la revista estadounidense Newsweek, mientras recuerda las varias iniciativas presentadas en el hemiciclo para retirar las Fuerzas Armadas de EE.UU. de Siria.

Para ella, abandonar el país árabe, es uno de los pasos fundamentales para “redigir” la política exterior de Estados Unidos, hasta ahora fallida, pues, explica, durante más de un cuarto de siglo, Washington ha desperdiciado recursos y derramado sangre de sus soldados en todo el mundo en vano.

“El argumento de que mantener a los estadounidenses en el extranjero es necesario para detener los ataques terroristas es absurdo”, reconoce. A su juicio, la crisis de Siria es un ejemplo del statu quo defectuoso de la política exterior de Estados Unidos, que mantienen vivo los belicistas derecha e izquierda por conveniencia.

La ingenua campaña del expresidente estadounidense Barack Obama (2009-2017) a favor de una reconfiguración de Asia Occidental fue un “experimento inútil”, sobre todo cuando lanzó la consigna “Al-Asad debe irse”, que solo extendió la guerra y empujó a Rusia a involucrarse por los riesgos que se cernían sobre ella. Peor aún, resultó en una guerra en donde “apareció el terrorista Daesh”.

 

El terrorismo local en países distantes no es una amenaza existencial para Estados Unidos y puede ser manejado de manera efectiva mediante capacidades de larga distancia y estrategias de alianzas prudentes. Y aún si los terroristas reaparecen, con nuevos bríos en la región, esto no exige un despliegue constante de tropas y una guerra sin fin, razona.

La “construcción nacional” de Estados Unidos en Asia Occidental no fue una política prudente. “Tomó miles de millones de nuestros propios ciudadanos y los canalizó a ONG, militares, programas de gobierno fallidos y desperdicio de ayuda exterior, dejando muchas regiones desestabilizadas”, y lo único que detonó fue hostilidad de esas poblaciones hacia los norteamericanos.

“Asia Occidental es una región con antiguas rivalidades tribales y problemas sociales que los estadounidenses no pueden arreglar, ni con sangre ni con dinero”, confiesa.

EEUU debe dejar de meter las narices en Asia Occidental

¿Por qué los miles de millones de dólares gastados en Asia Occidental no se invierten en proteger nuestra propia frontera? ¿Por qué las fuerzas estadounidenses patrullan naciones distantes, pero no la nuestra, que está amenazada? ¿Por qué el equipo que dejamos atrás durante nuestra retirada fallida de Afganistán no se vendió ni se envió a Taiwán?, cuestiona la congresista.

El trabajo de Estados Unidos no es vigilar las calles de Alepo. Es enfocarse en las fronteras estadounidenses y la ley y el orden en las ciudades del país, asegura.

La congresista Luna tiene memoria selectiva

El Ministerio de Petróleo sirio anunció previamente, en un comunicado, que las fuerzas estadounidenses y sus mercenarios están robando alrededor de 66 000 barriles de crudo por día de las áreas ocupadas en el este de Siria, que produce diariamente 80 000.

Después de contrabandear combustible de Siria a Irak, los soldados estadounidenses venden el petróleo de este país en el mercado negro de la región del Kurdistán iraquí y transfieren una parte a sus bases para su propio uso.

 

En diciembre, en un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores sirio calculó en 111 900 millones de dólares las pérdidas económicas de Siria causadas por las operaciones militares ilegales de Estados Unidos en su territorio.

De acuerdo al comunicado, las pérdidas directas están calculadas en 25 900 millones de dólares: 19 800 millones de dólares por el robo estadounidense de petróleo y gas, 3200 millones de dólares en daños a la infraestructura estatal y 2900 millones de dólares en daños a instalaciones de petróleo y gas.

El Ministerio estimó las pérdidas indirectas en 86 000 millones de dólares.

Julio Anguita responde a 12 periodistas en «La noche de Hermida». 1993

Un interesante programa dirigido y presentado por Jesús Hermida en el que se puso a prueba a Julio Anguita, coordinador general de Izquierda Unida (IU) en la época. Anguita respondió a las preguntas de los invitados: Carlos Carnicero, José Oneto, Antonio Franco, Xavier Vidal-Folch, Melchor Miralles, Ramón Cotarelo, Pilar Urbano, Andrés Aberasturi, Emilio Romero, Nativel Preciado, Cándido y José Antonio Sentís.

Fraude en Almería, la huerta de Europa: más de 14 millones en sanciones y 11.000 trabajadores afectados

La actuación de la Inspección de Trabajo ha aflorado en los últimos cinco años 1.640 empleos sin contrato y cotizaciones a la Seguridad Social por valor de 7,8 millones que no habían sido abonadas en el sector agrícola almeriense.

Fotografía de un campo de olivos en Almería.

Fotografía de un campo de olivos en Almería.  PIXABAY

La agricultura intensiva de Almería, la llamada huerta de Europa, con una producción anual de más de 3,5 millones de toneladas de frutas y hortalizas y unos ingresos que se acercan a los 3.000 millones de euros, esconde entre sus más de 32.000 hectáreas de invernaderos una realidad amarga que aflora con las inspecciones de Trabajo. En los últimos cinco años, según los datos facilitados a Público, se han impuesto a sus empresarios sanciones por valor de 14,5 millones de euros, en las que hay un total de 11.043 trabajadores afectados por diversos incumplimientos de la normativa laboral y de las cotizaciones a la Seguridad Social.

En los invernaderos de la provincia de Almería trabajan entre 40.000 y 50.000 personas en campañas que se encadenan y abarcan ya casi todo el año, y la gran mayoría, el 98% según CCOO, son extranjeros, personas migrantes. A ellos se suman otros 30.000 trabajadores de la industria del manipulado, la que se encarga de la selección, envasado y distribución de la producción de los invernaderos. Todo ello conforma uno de los principales sectores económicos de Andalucía, lo que se llegó a denominar el milagro almeriense, que en la otra punta de la comunidad, en la provincia de Huelva, ha tenido su réplica en el oro rojo del cultivo de la fresa.

Desde arriba, la extensión de miles de hectáreas de invernaderos que abarcan un buen número de municipios del Levante y Poniente almeriense parece un mar de plástico; desde el suelo, se asemeja más a un laberinto de cientos de explotaciones agrícolas, muchas de ellas familiares con no más de dos, tres hectáreas, en el que resulta difícil moverse si no se conoce bien el terreno. Y esa es una de las mayores dificultades con las que se topan quienes tienen que vigilar que se cumpla la ley: encontrar la parcela y luego que no esté cerrada a cal y canto para que nadie sepa lo que está pasando dentro. Por eso, también, muchas veces tienen que ir acompañados de agentes de las fuerzas de seguridad del Estado.

Pese a todo, la Inspección de Trabajo y Seguridad Social hace su tarea. Según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social a los que ha tenido acceso este periódico, entre 2018 y 2022 se llevaron a cabo un total de 19.191 actuaciones en el sector de la agricultura de la provincia de Almería, con las que se registraron 2.917 infracciones en diferentes ámbitos de la legislación laboral y la Seguridad Social relacionadas con la contratación, declaración de jornadas y cotizaciones.

El número de infracciones en la agricultura almeriense se duplicó, además, en ese periodo: de las 407 que se detectaron con las inspecciones de 2018 hasta las 822 que se registraron el año pasado. Y el importe de las sanciones impuestas también creció considerablemente: de 1,81 millones de euros a 4,12 millones en 2022.

El número de trabajadores de la agricultura almeriense afectados por las infracciones cometidas por sus empleadores también ha aumentado de forma exponencial en los últimos cinco años, hasta haberse casi cuadruplicado su número, de 1.114 en 2018 a 4.373 en 2022, pese a que la cantidad de actuaciones de la Inspección de Trabajo no ha variado mucho en ese tiempo y se ha mantenido algo por encima de las 4.000 en cada uno de los años, salvo en 2020, el de la pandemia, que bajaron a 2.483.

Más de 1.600 trabajadores sin contrato

Como consecuencia de todas estas actuaciones, han aflorado un total de 1.640 empleos en la agricultura de Almería, es decir, trabajadores sin ningún tipo de contrato que han sido dados de alta en la Seguridad Social tras el requerimiento de la Inspección. Sólo en los dos últimos años contabilizados, 2021 y 2022, afloraron 906 empleos sin contrato en ese sector, lo que supone casi la mitad de los 1.919 que la Inspección de Trabajo detectó en ese mismo periodo en todos los sectores económicos de esta provincia andaluza.

El balance de la actividad inspectora también incluye las emisiones de expedientes liquidatorios para que las empresas se pongan al día en las cotizaciones a la Seguridad Social que han dejado de abonar. Se trata de casos como los de empleados dados de alta sólo a media jornada cuando están trabajando a jornada completa. En los últimos cinco años, a los empresarios del campo almeriense se les ha abierto expedientes de este tipo por una cuantía total de 7,83 millones de euros, una cifra que por ejercicios anuales se ha duplicado de los 1,06 de 2018 a los 2,11 millones de 2022.

Según han explicado a este periódico fuentes del Ministerio de Trabajo, el control de las condiciones de prestación de servicios y el consiguiente cumplimiento de la legislación del orden social en el sector agrario tienen una especial relevancia. El carácter esencial de esta actividad económica, su estacionalidad, las especiales condiciones del medio en el que se desempeña el trabajo y el recurso «habitual» a mano de obra migrante son las que determinan, según Trabajo, que el sector agrario sea objeto de actuaciones planificadas en todas las materias que abarca su intervención inspectora.

En el caso de Almería, la labor inspectora también ha revelado una alta incidencia de infracciones relacionadas con la normativa de extranjería en el ámbito laboral. No en vano, el 36% de los 705 trabajadores extranjeros afectados en 2021 por alguna infracción de este tipo en Andalucía estaban empleados en esa provincia. Y tales infracciones supusieron la imposición de sanciones por un valor total de 2,48 millones de euros.

Lo más llamativo, si cabe, es que Almería triplica a Málaga en número de trabajadores extranjeros afectados por el incumplimiento de la normativa de migración en el ámbito laboral, pese a que Málaga tiene el doble de extranjeros afiliados a la Seguridad Social en el régimen general y cuatro veces más en el de autónomos, de acuerdo con los datos del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía del año 2022.

Un fraude que CCOO ha estimado hasta en 50 millones

CCOO de Almería realiza periódicamente un informe sobre el fraude en las contrataciones, cotizaciones a la Seguridad Social y pago del IRPF que se comete en el sector de la agricultura de la provincia. Para ello, analiza las diferencias que hay entre los jornales declarados por los empresarios, los que se deberían de realizar de acuerdo con los criterios establecidos por la Junta de Andalucía para cada tipo de explotación y cultivo, y la producción registrada oficialmente en el año. De acuerdo con ese estudio, CCOO estimó que en la campaña 2019-2020 los empresarios habían dejado de abonar en torno a 45 millones de euros a Hacienda y a la Seguridad Social, una cantidad que entre 2011 y 2015 había elevado a 50 millones.

El secretario provincial de CCOO, Antonio Valdivieso, considera que la actividad de la Inspección de Trabajo, con un servicio «muy valioso», y la presión sindical son las que han conseguido reducir un fraude «sistémico» en el campo almeriense, aunque cree que los medios siguen siendo limitados para luchar contra un problema muy extendido y difícil de atajar.

Las dificultades para acceder a los invernaderos, la colaboración entre empresarios defraudadores que se avisan unos a otros cuando ven llegar a los inspectores de Trabajo y la falta de coordinación entre las diferentes administraciones involucradas en esta tarea son, a juicio de este dirigente sindical, las mayores trabas para acabar con las numerosas irregularidades en el empleo agrícola almeriense.

Una de las irregularidades más extendidas, según CCOO, es pagar por debajo del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), pero de forma camuflada. Como es ilegal pagar por debajo de esa cantidad, hay empresarios que declaran menos jornales de los que realmente se trabajan a fin de que cuadren las cuentas, abonan a sus empleados 5 euros o 5,50 la hora y el resto se lo dan en negro. «Es una artimaña que se hace, además, con la complicidad de muchas asesorías jurídicas y laborales que se conocen este tipo de prácticas. Son colaboradores necesarios y eso ya lo hemos denunciado muchas veces a la Seguridad Social·, dice a Público Antonio Valdivieso.

También se dan los casos muy frecuentes, según este sindicato, de propietarios de pequeñas explotaciones familiares que se pasan con una furgoneta por las rotondas de los pueblos donde esperan cada mañana trabajadores, casi todos extranjeros, a ver si les cogen ese día para trabajar en un invernadero, sin ningún contrato y por un jornal que, generalmente, está por debajo del SMI.

Que se trabaje sin contrato, sin darse de alta en la Seguridad Social, es una de las infracciones más habituales, según Valdivieso, porque en muchos de los casos se trata de trabajadores en situación irregular en España a quienes por ley no está permitido contratar. Para acabar con este problema sería necesario, a su entender, afrontar un procedimiento extraordinario de regularización de cientos de personas que residen desde hace un tiempo en esta provincia y no tienen la oportunidad de legalizar su situación en España para acceder a un contrato, pero que sí trabajan en los invernaderos sin beneficiarse de ninguna cobertura social y explotados.

Los casos de explotación en el campo almeriense han dado pie a sentencias como la que en febrero de 2021 dictó el Juzgado de lo Penal número 1 de Almería, que condenó a un año y medio de prisión al empresario de un invernadero de Roquetas de Mar por un delito contra los derechos de los trabajadores, a raíz de una denuncia de un jornalero nacido en Burkina Faso. Según el fallo, firme al no haber sido recurrido por el condenado, los empleados carecían de contrato, no estaban dados de alta en la Seguridad Social, no disfrutaban de vacaciones o descanso semanal, sin horario definido y con disponibilidad las 24 horas del día, sin poder faltar al trabajo por enfermedad o cuestiones personales bajo la amenaza de poder ser despedidos, y con un salario de 40 euros por jornadas de 10 horas.

UGT estudió denunciarlo ante la fiscalía

En UGT también están preocupados por el volumen del fraude a la Seguridad Social que se comete cada día en el sector agrícola almeriense con pagos de salarios por debajo del SMI, tanto que en algún momento se han llegado a plantear denunciarlo en la fiscalía, asegura su secretaria provincial, Carmen Vidal. A su juicio, se trata de un tema complicado que se arrastra de muchos años atrás en los que no había ningún tipo de control sobre la actividad de los propietarios de cientos de invernaderos.

«No se puede decir que no vendemos suficiente cuando los datos dicen que cada año hay más exportaciones desde lo que se denomina la huerta de Europa. Entonces, si es así, ¿por qué no pagan lo que hay que pagar a los trabajadores y se cumple la ley?», se pregunta la responsable provincial de UGT.

El último informe de la entidad financiera Cajamar refleja que en la campaña 2021-2022 Almería registró «un máximo histórico» con la exportación de 2.864.211 toneladas de frutas y hortalizas por valor de 3.701,5 millones de euros, un 17,4% más que en el anterior ejercicio. La superficie de cultivo en invernadero siguió creciendo, un 0,8%, y alcanzó las 32.827 hectáreas. Y como balance final, los ingresos del sector crecieron un 14,2% y llegaron a los 2.940,2 millones de euros.

Sin embargo, pese a tal bonanza, el campo almeriense sigue sin disfrutar de un nuevo convenio colectivo y permanece anclado, por falta de acuerdo, al que se firmó hace ya ocho años, en 2015, y que, en buena parte, tampoco se cumple, según los sindicatos. Carmen Vidal asegura que lo han intentado muchas veces, pero no han conseguido que los empresarios se sienten a negociar un convenio, algo que sí han hecho, en cambio, los de otras provincias andaluzas con un importante sector agrícola, como Huelva, Jaén o Sevilla. Se han opuesto, según ella, incluso a que la Junta de Andalucía medie para negocien las dos partes. La patronal de ASAJA Almería, a preguntas de este periódico, ha eludido contestar sobre las inspecciones de Trabajo y el estancamiento de las negociaciones con las organizaciones sindicales para aprobar un nuevo convenio colectivo en el campo.

Seguir con un convenio de 2015 implica, a juicio del secretario provincial de CCOO, que se aplique una normativa laboral básica y anticuada que merma las condiciones de la mano de obra de la potente agricultura intensiva hortofrutícola almeriense. Eso cuando se cumple lo que dice el convenio -subraya Valdivieso-, porque en muchos casos los empresarios no respetan ni lo que se acordó hace ocho años, como es el caso del pago del complemento de antigüedad. «Lo único que quieren pagar es el Salario Mínimo, nada más, y aun así han protestado por la subida del SMI. Y lo peor es que el que está cobrando eso es un afortunado, porque el resto está cobrando por debajo, con jornales ocultos», explica el dirigente sindical.

Los municipios con la menor renta de España

La situación laboral del campo determina en gran medida la salud de toda la economía almeriense. Según los datos de CCOO, el 54% de los trabajadores asalariados de esta provincia cobraban en 2021 por debajo del Salario Mínimo Interprofesional, que ese año estaba situado en 965 euros mensuales, hoy en 1.080 euros. Entonces, 102.000 de los 108.000 contratos firmados en Almería fueron de carácter temporal, un porcentaje que se ha reducido de forma notable con la reforma laboral que ha impulsado la modalidad del indefinido fijo discontinuo en detrimento del eventual.

Estas cifras ayudan a explicar la paradoja en la que se hallan inmersos los municipios almerienses con un mayor número de explotaciones hortofrutícolas y, a la vez, con la menor renta media por habitante de España. Es el caso de Níjar, Vícar, Adra y El Ejido, que suman cerca de 22.000 hectáreas de invernadero en sus municipios y, sin embargo, están situados a la cola del país en ingresos per cápita, entre 7.307 y 8.000 euros anuales, o sea, 21.000 euros por debajo de la renta más alta, que es la que registra Pozuelo de Alarcón, en Madrid, según el último informe de Indicadores Urbanos del Instituto Nacional de Estadística.

Un informe del Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda, Gestha, publicado en 2014 reflejó que Almería había sido en 2012 la provincia con un mayor índice de economía sumergida de toda España, un 31,4%, y, por tanto la primera de la comunidad autónoma de Andalucía, que, con una media de un 24,6%, (253.000 millones de euros) superaba entonces en cinco puntos el promedio nacional.